Clermont se afianza en el liderato en la Champions

En una semana doble enfrentamiento entre Clermont y Sarracens, y los dos saldados a favor de los franceses.
El lunes los amarillos arrasaron a los sarries en el Allianz, y hoy la fuerza mental de los clremontois ha servido para sacar adelante un partido que de inicio se ha puesto muy complicado.
Clermont en su feudo es un equipo difícil, tiene unas buenas estadísticas; por el contrario el equipo londinense venía de una racha negativa de seis derrotas consecutivas entre todas las competiciones que juega.

Y empezó bien el partido para los visitantes, en el minuto 10′ tenía una 0-13 favorable gracias a dos golpes de castigo transformados por Owen Farrell, y un genial ensayo del medio de melé Spencer que en una salida de un reagrupamiento engaña y rompe la defensa de Clermont y anota el ensayo, que no convierte Farrell.

Clermont está lento, Parra no logra obtener balones limpios y Sarracens sólo debe mantener la marca en defensa.

El juego no está muy ágil por parte de ningún equipo, que además comenten muchas indisciplinas y gracias a ello Parra consigue transformar dos golpes de castigo, minutos 18 y 22, y pone el marcador en 6-13.

Clermont poco a poco va centrándose en el juego, consigue hacer retroceder al rival, Raka, que el lunes en el Allianz estuvo magistral, inicia una buena jugada de ataque y que podía haber terminado en ensayo de Penaud, pero por el contrario y para desgracia local, los dos jugadores han de dejar el terreno de juego por lesión.

A pesar de ello los amarillos van adueñándose el campo y van imponiendo su ritmo de partido, Parra ahora ya tiene un dominio claro en su espacio y el juego local cada vez es más asfixiante y los sarries caen una y otra vez en indisciplinas, lo que lleva a que Skelton vea tarjeta amarilla y el correspondiente golpe de castigo lo transforma Parra otra vez, 9-13.
Farrell consigue alejar el peligro y pone un balón en la touche a cinco metros de la línea local, pero la defensa de Clermont gestiona bien la posesión y consigue salir de su campo, gracias de nuevo al buen hacer de Parra, y que hace que Abendanon rompa la línea rival y ponga en peligro la defensa sarrie, que consigue salvar lo que parecía un ensayo.
Al filo del descanso, melé que se solventa con golpe de castigo, y que Scott Spedding se encarga de convertir, 12-13 para Sarracens.
Después de vista la primera parte la verdad es que si el resultado es favorable a los visitantes se debe más por despistes de los amarillos que por otra razón, eso sí hay que decir que la defensa sarrie ha sido muy eficaz.
Cada vez que Parra consigue tener el oval en sus manos, la línea de los tres cuartos visitantes tiembla y han de emplearse en defensa con toda la intensidad posible y casi al límite.
Eso hace que las indisciplinas visitantes sean casi constantes y de nuevo otro golpe de castigo que transforma otra vez Parra y adelante a su equipo en el marcador, 15-13.
Sarracens vive de los minutos iniciales del partido, algún tímido ataque y poco más, el ensayo por despiste local.
El equipo auvergnes cada vez es más dominador del partido, la delantera, manejada por un Parra en la línea que es habitual en él, domina el juego cerrado y la línea de tres cuartos, en sus ataques, es cada vez más peligrosa.
Sarracens no tiene ni estabilidad ni continuidad en su juego, depende más de jugadas aisladas individuales que del conjunto.
Pero la fortuna hace que Abendanon cometa un error en una carga a un jugador rival en el aire, y ve la cartulina amarilla de forma justa.
Farrell transforma el golpe y se acortan distancias, 18-16.
Y la ventaja numérica la aprovecha los londinenses que consiguen hacer valer la superioridad y Lozowski anota otro ensayo, que no convierte Farrell. El marcador 18-21, nueva ventaja visitante.
Pero Clermont no se hunde, por el contrario mantiene la cabeza frío y sigue el mismo patrón de juego, consigue romper la línea rival, y de nuevo otra indisciplina, esta vez del argentino Figallo, que ve la amarilla y deja en igualdad numérica de jugadores a los equipos.
Clermont va a por todas, quiere mantener el liderato y sellar prácticamente su pase a cuartos, cada vez que ataca hay peligro serio para los londinenses, y otra indisciplina, hace que en el minuto 72’ Parra convierta un nuevo golpe de castigo, y empata otra vez el partido, 21-21.
Sarracens solo tiene una opción, lanzarse a por la victoria, y Clermont, al que el empate le va bien, no puede cometer ningún error en el tiempo que resta para finalizar el partido.
Ahora es Clermont que mantiene una defensa firme, sin fisuras, con una presión sobre el pack rival que hace que recupere el oval, se lance al ataque y de nuevo otra indisciplina, absurda como la mayoría de las que han cometido los jugadores de Sarracens, y otro golpe de castigo, que Scott Speding transforma y adelanta a su equipo, 24-21, a falta de dos minutos.
La verdad es que Clermont ha sabido jugar con la cabeza, superar el mal momento inicial que le llevó a tener una clara desventaja en el marcador, superar el momento de inferioridad numérica por la expulsión de Abendanon, superar las lesiones de Raka y Penaud mediada la primera parte, imponer su juego gracias a un Morgan Parra que si está inspirado es difícil de superar.
Sarracens bien en defensa, pero demasiadas indisciplinas, y ha confiado demasiado en sus individualidades.

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