Había tenido un gran 2022 pero en este inicio de 2023 lejos estuvo de lo que había logrado con resultados que no eran los esperados pero Casper Ruud renació en al ATP de Estoril.
Venció en la final a Miomir Kecmanovic por marcador de 6-2, 7-6(3) logrando así su título número 10 en el tour.
Comienzo a todas luces y complicación
El primer set fue resuelto por el noruego que consiguió rápidamente un break para encaminarse a lograr la primera manga.
Poco pudo hacer su rival ante la lucidez del hombre que acarició el número uno del mundo, que mostró sus credenciales y logró recuperar su nivel en esta semana.
En el segundo set las acciones se equilibraron y Kecmanovic se soltó, arriesgó y todo fue a resolverse a un tie break donde Ruud impuso su categoría.
El revés de Casper funcionó casi a la perfección y fue su arma letal en los peloteos largos con su derrotado.
Y pudo quedarse con el campeonato y de esta manera adjudicarse por cuarta temporada consecutiva con al menos un torneo en polvo de ladrillo en el tour.
Ahora deberá jugar en Montecarlo donde será uno de los favoritos a quedarse con el torneo ante la baja de Rafa Nadal, aunque claro está, deberá elevar su nivel para conquistar el Masters.
En cambio el otro finalista completó una semana muy buena que puede ayudarlo a dar un salto en su carrera, estará en él aprovechar o no la ocasión que se le presenta.
Fue una buena final en uno de los torneos clásicos de cancha lenta en Europa y ahora se viene Montecarlo, nada más y nada menos. Y sin obviar que falta poco para Roland Garros, sin duda alguna, la que es la cita grande y la que está marcada en rojo por muchos tenistas.
La noticia sin dudas es que volvió Ruud y justo en su superficie favorita.
Imagen propiedad: ATP Estoril
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