Llegó por fin el torneo del KO para los equipos de Primera División. Un trofeo en el que muchos depositan ilusiones y esperanzas, sobre todo las entidades de menor solera como pueden los de Segunda B, con el fin de encontrarse con uno de los “gordos” del fútbol europeo con el fin de resolver su temporada financieramente, dado que los ingresos en la categoría de bronce son más bien escasos.
En este caso, se enfrentan no dos conjuntos de menor entidad, si no dos clásicos de Primera División, la Unión Deportiva Las Palmas y el RC Deportivo de la Coruña, este último con dos trofeos de esta competición en su haber, la última conseguida en el 2002, ante el Real Madrid en el Bernabéu. Pero hace mucho de eso y el equipo está sumido en una crisis deportiva, que lo llevó a luchar por no ser uno de los tres conjuntos que pierden la categoría a final de temporada.
Caso idéntico al de su rival de mañana. El conjunto insular llega al partido en puestos de descenso a Segunda División tras una racha de resultados en las que obtuvieron tan solo dos victorias y cayeron derrotados en siete ocasiones, lo que propició la marcha de su entrenador Manolo Márquez y la llega del ex valencianista Pako Ayestarán en su sustitución, el cual todavía no conoce la victoria en su estancia en el archipiélago canario, sumando de este modo tres derrotas consecutivas. Especialmente sonada la goleada encajada en el Estadio de la Cerámica, un 4-0 doloroso por la imagen del equipo, que no fue del todo mala.
Por otra parte, el conjunto local, llega al partido fuera de los puestos de descenso, pero tan solo sumando dos victorias pero con dos empates que le permiten tener una ventaja de dos puntos sobre la zona roja de la clasificación. Suma de este modo, dos victorias, dos empates y cinco derrotas, la última, sonrojante ante su afición cayendopor 1-2 ante el Girona, con una polémica actuación arbitral, con dos penaltis más que dudosos pitados y dos goles anulados, uno de ellos en dudoso fuera de juego.
Esta derrota propició la decisión de prescindir de Pepe Mel como preparador herculino para subir en su lugar, al míster del filial, Cristóbal Parralo, con amplia experiencia en primera división como jugador, sumando 454 partidos entre Barcelona, Oviedo, Logroñés y Espanyol, además que vestir la camiseta del PSG en Francia. Con el filial herculino logró el ansiado ascenso a Segunda B tras un comienzo dubitativo y lo mantuvo líder de la misma, con dos puntos de ventaja sobre su inmediato perseguidor, el Fuenlabrada, uno de esos modestos que disfrutarán la Copa, también en el día de mañana ante el Real Madrid.
Junto a Parralo, sube del filial también un viejo ídolo deportivista como es Javier Manjarín, el autor del primer gol en la final de Copa de 1995 ante el Valencia.
Ninguno de los dos conjuntos proporcionó la convocatoria.
Fotomontaje: @NasuOtraMovida
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