Ha terminado una nueva temporada en el circuito tenístico y, por tercer año consecutivo, Andrey Rublev consiguió finalizarla en el top 10. Fue un año turbulento y, para algunos críticos, algo decepcionante, pero la realidad es que está logrando lo más importante a lo que puede aspirar un deportista de alto rendimiento, mantenerse arriba, algo que cumplió con creces con 4 títulos y la clasificación a las ATP Finals. Sin más dilación, veamos cómo fue el año de Andryukha y lo más destacado que nos dejó su desempeño de estos últimos 12 meses.
Así es como empieza
Este 2022 no empezó de la mejor manera para Rublev, que pasó por la Covid-19 y se perdió la ATP Cup, torneo que había ganado con Rusia el año pasado y cuyo título no pudo defender en esta ocasión. Además de esto, se vio inmerso en una polémica, dado que admitió haber ingresado a Australia estando contagiado pero con una carga viral ínfima (además de pasar 10 días en cuarentena por allá), algo que está permitido por el país aunque, dado el escándalo que hubo esos días con Novak Djokovic, no pasaron desapercibidas esas declaraciones del ruso sobre su arribo al país oceánico.
Afortunadamente, superó la enfermedad y pudo jugar sin problemas el Abierto de Australia, torneo en el que no podría alcanzar la segunda semana, tras caer en 3R con Marin Cilic. Luego de este traspié, tuvo una seguidilla de tres torneos, donde los resultados fueron casi inmejorables, cayendo primeramente en semifinales en el Róterdam, torneo donde defendía la corona, contra Felix Auger-Aliassime, a la postre campeón.
Lo mejor, no obstante, vendría en la dos semanas siguientes, donde se vengaría del propio Auger-Aliassime en la final de Marsella en el que sería su primer trofeo de la temporada, mas no el último ya que, en la semana siguiente, salió airoso de Dubái también, venciendo a la revelación del torneo, Jiri Vesely, en el partido decisivo. Aun con todo esto, hay que decir que, si algo quedará en el recuerdo de su aventura por tierras emiratíes, será el pedido de paz que manifestó tras su partido de semis, en medio de la recién iniciada invasión a Ucrania, ordenada por el gobierno de su país.
Ya en marzo, fue una de cal y otra de arena para Rublev, con una destacada presentación en Indian Wells, donde acabaría cayendo frente a Taylor Fritz en semifinales, y una dura despedida tras ser aplastado en 2R por Nick Kyrgios en Miami, para redondear un primer trimestre con altibajos pero varios momentos a destacar.
La hora naranja
Llegamos a una de las épocas que mejor le sientan a Andrey, la gira sobre arcilla, afrotada con algo de irregularidad por su parte en esta ocasión. Solo pudo llegar a 3R de Montecarlo, lugar donde había jugado la final el año pasado, siendo derrotado esta vez por Jannik Sinner, días antes de alcanzar su punto más alto de esta temporada de tierra batida, su consagración en Belgrado, donde acabó triturando al final a un Djokovic que seguía reencontrándose tras su inactividad en el duelo por el campeonato.
El doblete de Madrid y Roma transcurrió sin pena ni gloria, alcanzado los cuartos de final en España, con Stefanos Tsitsipas mostrándole la salida aquella vez, y con debut y despedida en la 2R de la capital italiana, a manos de Filip Krajinovic, previo a un notable Roland Garros donde estuvo a las puertas de las semis, pero volvió a quedar eliminado frente a Cilic en el fatídico tiebreak de 5to set.
Poco queda para decir de su gira sobre césped, donde solo jugó un partido, la 1R de Halle, saldada con derrota ante Nikoloz Basilashvili, viéndose privado de disputar Wimbledon por la vergonzosa medida tomada por la organización del torneo, vetando a los tenistas rusos y bielorrusos de participar por razones bélicas ajenas a ellos, así que podemos seguir de largo en este repaso, que llega recién a su ecuador.
Welcome to the United States
En el siempre variado julio, Rublev volvió al polvo de ladrillo, viendo acción en Bastad y Hamburgo, perdiendo en ambos casos contra jugadores argentinos, Sebastián Báez en semifinales y Francisco Cerúndolo en 2R, respectivamente. Y así es como llegamos a la US Open Series, que iniciaría de buena forma para el ruso, metiéndose en las semis de Washington, cayendo a manos de un realizado Yoshihito Nishioka.
A pesar de esa buena campaña en la capital estadounidense, lo que estaba por venir bien puede considerarse su punto más bajo de todo el año, al haberse ido en su debut en Montreal contra Daniel Evans y, en Cincinnati, donde defendía final y peleaba su permanencia en el top 10, apenas pudo llegar a 3R, donde Fritz lo volvió a batir. Así fue como quedó fuera de los 10 mejores del mundo por primera vez desde 2020, si bien no duraría mucho, y ahora veremos el motivo.
Andrey llegó a la Gran Manzana con las expectativas más bajas en un GS en mucho tiempo, sin estar en el top 8 de la siembra y con un cuadro que se antojaba complicado para levantar vuelo, pero fue justo en Nueva York donde se vio algo diferente en él, siendo quizá el punto de inflexión su triunfo ante Denis Shapovalov en la 3R tras un auténtico partidazo, definido en tiebreak del 5to, donde se podía prever un bajón del ruso, conocido por su inestabilidad en momentos de tensión. En cambio, sacó lo mejor de sí y logró una victoria memorable que nos hizo ver a todos que, con una buena actitud como esta, podría ser capaz de grandes cosas.
Su camino en el US Open siguió, barriendo en 3 sets a Cameron Norrie en la 4R, antes de perder en sets corridos contra Frances Tiafoe en cuartos de final, no sin dar pelea (hubo 2 tiebreaks) y dejando buenas sensaciones en el balance total del torneo donde, además de volver al top 10, puede que siga sin cruzar la barrera del 5to partido en Grand Slam, pero acá se vio, si cabe, la versión más esperanzadora para que pueda lograrlo pronto de mantenerse así.
El último sprint del año
Entrando en octubre, eran pocos los torneos a jugar, y Rublev los encaró muy bien al principio, siendo semifinalista en Nursultán (Astaná), evitando Tsitsipas (al que veremos luego) que llegara a otra final, la cual llegaría la semana siguiente, saldándose con otro título para el moscovita, esta vez en Gijón, a expensas de Sebastian Korda. Semanas más tarde, tras perder en la 2R de Viena con Grigor Dimitrov y caer en la 3R de París contra el asombroso y finalmente campeón Holger Rune, se aseguró su 3era clasificación al hilo a las ATP Finals, donde se hizo sentir.
Las sensaciones previas a Turín no eran las mejores, como vimos líneas arriba, y el sorteo difícilmente podría haber sido más desfavorable para Rublev: Stefanos Tsitsipas, Daniil Medvedev y Novak Djokovic. Una cosa estaba clara, y era que, si quería llegar a semis, había que empezar bien contra Medvedev, algo por lo cual luchó pero, al final, tuvo recompensa, remontando un set de desventaja y ganando en tiebreak del 3ero un épico partido, antes de sufrir una esperada derrota contra Nole, propinada en sets corridos.
Nuevamente, como el año pasado, todo se definía en la última jornada, aquella vez no se dio contra Casper Ruud, pero aquí la historia sería distinta frente a Tsitsipas. No prometía mucho la situación al inicio del partido, donde el griego tuvo un 1er set impoluto y parecía caminar a paso firme hacia la Final Four, pero Rublev se afianzó, supo seguir intentando y, tras tanto perseverar, lo dio vuelta, ante un incrédulo rival al que solo le quedó desquitarse frente a los micrófonos después de tal remontada.
Aun con todo y las limitaciones de Rublev, mencionadas por su última víctima, pudo lograr su primera semifinal en este torneo tras tres participaciones en él, con una derrota frente a Ruud en dos sets que le pondría fin a su temporada oficial, pero con muchas ilusiones de cara al próximo año, a empezar dentro de pocas semanas en suelo australiano.
Como bonus, cabe destacar los partidos de exhibición que jugó en la Península Arábiga estos últimos días, cayendo en los cuartos de final en Diriyah contra Stan Wawrinka y repitiendo final en Abu Dabi, con resultado negativo, a diferencia del año pasado, viniendo esta última derrota del año precisamente contra Tsitsipas, en un duelo que seguramente veremos bastante en 2023, temporada donde ya no contará con uno de sus entrenadores, Abraham González, tras anunciar su salida del equipo este mes. Veremos cómo afronta Rublev el próxima año y, sea como fuere, acá estaremos para destacar lo mejor que hagan él y las demás estrellas del tenis mundial.
Resumen del año en números
4 títulos (en 4 finales): Marsella (250), Dubái (500), Belgrado (250), Gijón (250).
Resultados en GS: QF (RG y USO), 3R (AO).
Ránking al final de año: 8 (Mejor/Peor posición: 5/11).
Clasificado a las ATP Finals (SF).
Mejores resultados en M1000: SF (Indian Wells), QF (Madrid).
Foto: Rublev celebrando su triunfo frente a Tsitsipas en las ATP Finals (Stadium Astro).
Fue un placer acompañarlos a lo largo de este año, esperamos volver a encontrarnos en 2023, ¡Felices Fiestas! Síganme en @Superfrio9 y sigan toda la información y actualidad deportiva en @SextoAnillo, en www.facebook.com/sextoanillo, en nuestro Instagram sextoanillo. Entérate de todas las noticias de raquetas en @Raquetas_6A.
