Jon Rahm apunto de triunfar en Torrey Pines
Arrancaba una nueva edición del Famers Insurance Open, y lo hacía todavía con el recuerdo presente de lo que fue una hazaña histórica para nuestro deporte, la primera victoria española en la historia del US Open, una hazaña más de las conseguidas por Jon Rahm, que le han otorgado un hueco destacado en el panorama de los mejores deportistas del momento.
El Farmers, siempre supone el pistoletazo de salida en lo que a torneos importantes del P.G.A Tour se refiere, y la estelar participación era una clara muestra de ello. El cartel reunía a algunas de las mejores estrellas de panorama golfístico, capitaneados por el número uno del ranking mundial, al que le acompañaban nombres ilustres como Justin Thomas, Xander Schauffele, Dustin Johnson, Jordan Spieth, Brooks Koepka o el mediático y pegador Bryson Dechambeau.
Números 1 emparejados
Como era de prever la organización no iba a tener dificultades para generar emparejamientos atractivos, y así quedó demostrado con el grupo de Jon Rahm, Justin Thomas y Dustin Johnson. Tres números uno que iban a disputar juntos las dos primeras jornadas, empezando por el South Course.
Cabe recordar que el torneo se juega en una rotación de dos campos, el North Course (donde se juega una de las dos primeras rondas) y el South Course, donde se juegan las tres restantes, siendo ese el campo en el que se desarrolla la acción el fin de semana. La dificultad de ambos campos es bastante dispar, el North Course se juega sensiblemente más fácil, y conviene conseguir un buen resultado ahí, para poder afrontar el temido South Course con un poco más de tranquilidad.
Jon abría el campeonato con rondas de 66 y 65, jugando de manera solvente, con esa extraña sensación de suficiencia que siempre le acompaña, y que lo situaban con -13 en cabeza, compartiendo liderato con Justin Thomas y Adam Schenk.
Arrancaba la jornada de viernes con los focos puestos en los dos principales favoritos a la victoria final, Rahm y Thomas, que a pesar de arrancar, con birdie en el hoyo 2 el primero, y birdie en el hoyo 3 el segundo, nunca consiguieron generar buenos momentos con los que distanciarse de los demás.
Jon terminaba sus primeros nueve con -2, -15 total, y lideraba el torneo con relativa suficiencia e incluso la renta podría haber sido mayor de haber aprovechado alguna de las magnificas oportunidades de las que dispuso.
Error fatal
Pero el golf es un reto constante y Torrey Pines castiga duramente el más mínimo error, un error que terminó llegando. Jon falló su salida a derecha en el hoyo 10, y con su segundo golpe no fue capaz de alcanzar el green dejándole en una posición muy comprometida de la que no se pudo recuperar. Cerró el hoyo con doble bogey tras un mal approach y cedió el liderato a Thomas.
El doble bogey supuso un punto de inflexión en su vuelta. Jon volvió a tropezar en el interminable hoyo 12, y a punto estuvo de volver a hacerlo en el 13, pero logró conectar un putt de dos metros para detener la hemorragia. Lo que en un inicio parecía una vuelta controlada se había convertido en un sufrimiento constante y era necesario que llegaran los birdies para frenar esa espiral peligrosa. El birdie llegó en el hoyo 15 y a punto estuvieron de llegar alguno más en los hoyos posteriores, pero los putts (aunque muy bien tirados) no quisieron entrar.
Por delante Will Zalatoris firmaba un 65 y se colocaba leader en casa club junto a Jason Day que con su 67 parecía recuperar sensaciones tras unas temporadas anteriores en las que las lesiones le habían impedido rendir a su nivel.
Jon cerró su vuelta al par, con un -13 total que lo colocaban a un golpe de los colíderes y todavía en perfecta posición para luchar por la victoria el día siguiente.
Mal comienzo
Llegó la jornada final y no empezó bien para los intereses de Rahm. Los bogeys en el hoyo 1 y 5 lo alejaban a cuatro golpes del liderato. Un liderato que en ese momento encabezaba Zalatoris, por lo que hacía falta una reacción rápida si Jon quería aspirar a la victoria. Esa reacción llegó, los birdies al 7, 8 y 9 lo colocaban a un solo golpe de la cabeza, y en plena disposición de luchar por el trofeo. Tocaba afrontar la parte más dura del campo, los temidos hoyos 11 y 12, los cuales consiguió solventar, no sin sufrimiento, manteniendo así intactas sus opciones de triunfo.
Por delante Luke List, que llevaba una vuelta de -4 en el día, consiguió sacar el birdie en el hoyo 16, y aunque tropezaba en el 17, culminaba su vuelta con un birdie final al 18 para un -15 total, que lo colocaba líder en casa club. Los jugadores que seguían en el campo sabían desde ese momento cual era el registro a batir si querían alzar los brazos al final de la jornada.
Jason Day empataba en cabeza con Zalatoris tras un espectacular eagle en el hoyo 14 y presentaba su candidatura al título. Simultáneamente, Jon cometía bogey en el hoyo 15 en lo que parecía hacer desvanecer sus opciones victoria. Pero Jon nunca se rinde, y haciendo alarde de una de sus mejores armas, la tenacidad, consiguió anotarse un birdie de raza en el hoyo 17, el cual recordó sobremanera al conseguido en el US Open.
Esperando el error
Después del birdie conseguido, Jon afrontaba el 18 con la misión de acumular un nuevo acierto que le asegurara un hueco en un hipotético playoff, siempre que Zalatoris y Day no mejoraran el resultado de -15. La misión se complicó cuando Jon falló su driver a la derecha. Ello le obligó a hacer un lay up y buscar el birdie con el tercer golpe. Este no fue del todo certero, y aunque se dejaba una oportunidad de unos tres metros, no fue capaz de convertirla y terminaba con -14 a un golpe de List.
Quedaba por ver si Zalatoris y Day iban a ser capaces de igualar o superar a List, que aguardaba en el campo de prácticas a la espera de un posible playoff. Day sintió la presión y cometió dos bogeys finales con los que dilapidó sus opciones. Sin embargo Zalatoris, que se mostró muy sólido durante toda la jornada, se plantó en el hoyo final con plenas opciones.
Si hacía birdie sería el ganador, y el par le aseguraba una plaza en el playoff. Tuvo una oportunidad de oro para finiquitar el torneo pero la suerte le fue esquiva y tras una cruel corbata, la bola no quiso entrar. Iba a ser la muerte súbita quien dictaminara el vencedor.
En el primer hoyo del playoff fue List, el que consiguió el birdie que cerraba el torneo. Primera victoria para él y justo vencedor de una ronda final que como siempre que se disputa en Torre Pines, nos dejó grandes momentos de emoción.
En cuanto a Jon, gran tercer puesto que confirma las buenas sensaciones mostradas en el Sentry. Pese a que queda el regusto amargo de no ver ese buen juego refrendado en forma de victorias, también queda la dulce sensación de saber que si mantiene este nivel, los trofeos no tardarán en llegar.
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Escrito por: Iñaki Latre
