El día que nació un nuevo derbi no se recordará por el juego realizado o el espectáculo, tampoco por los goles. El Barcelona, líder de LaLiga, ha ganado al Girona, decimoquinto en la clasificación, en un partido de rotaciones para los azulgranas. Tras dejar fuera en la convocatoria a Nelson Semedo y Gerard Deulofeu, Ernesto Valverde ha hecho rotaciones en el once inicial dando entrada a Mascherano por Gerard Piqué, Aleix Vidal en la posición de Deulofeu y Paulinho por Sergio Busquets. Por parte del Girona, Pablo Machín introdujo al once inicial esperado con la sorpresa, y el gran atractivo del partido, del marcaje al hombre de Pablo Maffeo-Becerra sobre Messi, lo que recordaba a un viejo marcaje realizado por Chico sobre Xavi hará unos años.
El partido comenzó con control del balón por parte de los azulgranas que en diez minutos tuvo varias ocasiones de Aleix Vidal y Luis Suarez. El Girona también llegaba con peligro con remates de Aleix García y Douglas Luiz pero el control era del Barça que se mostraba muy tranquilo. En el minuto dieciséis, Paulinho recibió una falta lejos del área que Messi lanzó, en un magistral tiro libre, e hizo que Gorka Iraizoz se estirara para una verdadera parada. La falta condujo a un tiro de córner que acabó en el primero de los culés. El córner lanzado por Messi fue largo al segundo palo donde Jordi Alba empalmó de volea y acabo rebotando en Aday para que el balón entrara por el lado derecho del guardameta del conjunto catalán. Desde ese instante el Barcelona trató de llevar el partido a su juego con conservaciones largas de balón pero sin llegar a realizar peligro. Hasta el descanso los dos conjuntos se intercambiaron un par de ocasiones sin peligro, los de Montilivi seguían metidos en el partido con el 0-1 después que el Barcelona no encontrara la forma de aumentar la diferencia.
La segunda parte, sin cambios por parte de ninguno de los dos equipos, comenzó muy bien para los azulgranas que ya en el minuto cuarenta y siete marcaban el segundo tras una jugada entre Luis Suarez y Aleix Vidal que el extremo resolvía con un tacón para centrar y el uruguayo sin tocar el balón engañó a Iraizoz y se la introdujo en propia portería. Después del segundo tanto el Girona comenzó a tener los primeros minutos de control del balón, sacando mucho rendimiento a las jugadas a balón parado. En el cincuenta y cuatro el Girona la tuvo en un córner para recortar distancias con en un remate de Olunga en el segundo palo que Ter Stegen bloquea.
A partir del minuto 60 comenzaron a producirse diferentes cambios en ambos conjuntos y en juego continuamente interrumpido por pequeñas faltas. Hasta que en el minuto sesenta y nueve el charrúa aprovecho un balón a la espalda de la defensa para convertir el tercero del Barcelona, un gol que le puede dar la confianza necesaria tras este mal comienzo de temporada. Tras el gol el txingurri Valverde introdujo a André Gomes por Aleix Vidal para darle minutos, después del buen partido de Vidal junto a Sergio Roberto por la banda derecha, el lado donde más peligro ha generado el Barça. El partido acabó con diferentes ocasiones y remates por parte de los dos conjuntos pero sin la suerte para el Girona que quizás mereció más tras el pobre partido del Barça. Un derbi, el primer derbi de esperemos muchos, que no pasara a la historia más que por alargar la racha de victorias de un Barça que sigue líder una semana más.
Foto: Girona FC
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