Después de una clasificación muy ajustada que se saldó con la pole de Lewis Hamilton en máxima igualdad con Sebastian Vettel se auguraba una carrera de infarto en el circuito de Montmeló, en el que incluso se preveía una lluvia que podía haber hecho la carrera más interesante, sin embargo, esta no ha sido necesaria.
Poco le duró la primera posición al piloto inglés, quien se vio adelantado en la salida por el Ferrari de Vettel, quien en una salida fulgurante consiguió alzarse con la primera posición.
Una salida agitada que se saldó con diversos toques, el más importante de ellos el protagonizado por Bottas, Raikkonen y Verstappen. El piloto holandés de Red Bull atacó a los ya emparejados pilotos que le precedían, intentando adelantarles por el exterior y situando tres monoplazas en paralelo. El ancho de la pista no era suficiente para tal acción, razón por la que Raikkonen se escoró hacia el exterior, empujado por Bottas que requería su espacio e impactando con el joven piloto. El mencionado incidente de carrera provocó el abandono tanto del Ferrari como del Red Bull (dirección rota y suspensión dañada respectivamente).
Por detrás, Fernando Alonso trataba de recortar la distancia que le separaba de los monoplazas de la bebida energética, emparejándose con Felipe Massa, quien le empujó fuera de la pista, hacia la grava, provocando la pérdida de varias posiciones (de séptimo a undécimo). Sin embargo, el mayor perjudicado fue el brasileño, cuyos tiempos se desplomaron, hundiéndose en el fondo de la clasificación).
En las posiciones delanteras, los Mercedes perseguían a un Vettel que volaba sobre el Circuit haciendo mayor la distancia que separaba a italianos y alemanes. Sin embargo, las posiciones se estabilizaron debido a la dificultad de adelantar, al menos hasta el momento en que empezaron a parar en boxes.
Alonso entró muy pronto, con la esperanza de encontrar un hueco en el que mantener un buen ritmo de carrera. No fue así, el piloto español se situó detrás de Kvyat resultándole imposible adelantarle, siendo además su ritmo de carrera insuficiente (quizás debido a daños en su monoplaza). Carlos Sainz que rodaba en zona de puntos a la caza de Magnussen cometió un error en la salida del Pit lane que bien pudo costarle una sanción pero que finalmente quedó en nada.
En las posiciones delanteras, Vettel fue el primero en parar, por temor a un undercut (además de una mayor degradación) aunque la estrategia de Mercedes era otra. Hamilton continuó en la pista varias vueltas más antes de entrar en boxes para poner neumáticos medios (Sebastian había puesto blandos) con la intención de ir a una sola parada o de tener el neumático más rápido a final de carrera.
Por el contrario, Bottas permaneció en la pista ralentizando el ritmo de Vettel, acción en la que tuvo éxito durante varias vueltas hasta que el piloto alemán adelantó al finés en un gran adelantamiento que bien pudo haber supuesto la victoria del de Ferrari en el gran premio.
Vettel mantenía una distancia prudencial sobre Hamilton, que el inglés se afanaba en reducir bajo las órdenes que le llegaban desde el muro, llegándose a lamentar de la estrategia empleada. Y así se sucedieron las vueltas hasta que Vandoorne no vio a Felipe Massa cuando este trataba de adelantarle, impactando con él y provocando un coche de seguridad virtual. El piloto belga sería sancionado al final de la carrera con 3 posiciones en la parrilla del Gran Premio de Mónaco y 2 puntos del carnet.
Hamilton aprovechó para entrar en boxes justo cuando se restituyó la situación normal de carrera y montar el neumático blando a treinta vueltas del final. Vettel no se vio afectado por su estrategia, manteniendo la suya propia hasta el momento en que hubo de entrar a cambiar sus degradadas gomas. Mercedes demostró haber acertado con la estrategia. El piloto alemán de Ferrari salió únicamente unos metros por delante del inglés, quien le presionó en las primeras curvas para permanecer a la espera de su oportunidad después. Contaba con el beneficio de montar un neumático más competitivo, y había de cuidar las gomas. Si tenía éxito en lo segundo, se alzaría con la victoria. Las premisas eran claras desde el box, él sólo tenía que cumplirlas (y adelantar a Vettel).
Mientras la primera posición se disputaba, Bottas rompió su motor habiendo de abandonar.
Finalmente, a casi veinte vueltas del final, Hamilton adelantó a Vettel (quien había aguantado vueltas anteriores gracias a poder activar el DRS detrás de pilotos doblados), emprendiendo un camino firme hacia la victoria que sólo podría ser evitado por un error o un desgaste excesivo de las ruedas. No fue así, el piloto inglés se alzó con la victoria reduciendo en siete puntos la lucha por el campeonato.
Detrás de él entró Vettel en segunda posición seguido de Ricciardo (únicos pilotos que no fueron doblados por Hamilton). El top ten lo completaron Sergio Pérez, Esteban Ocon (los Force India se vieron favorecidos por los incidentes de carrera, aunque mostraron un gran ritmo en relación a la parte media de la parrilla), Nico Hulkenberg (gran actuación del de Renault), Sainz, Wehrlein (que de no ser por una sanción de cinco segundos aplicada al resultado final hubiese acabado séptimo), Kvyat y Grosjean.
Fernando Alonso finalizó duodécimo la carrera, encontrando un ritmo competitivo sólo al final (su última vuelta se convirtió en la cuarta más rápida de la carrera, aunque sus ruedas eran bastante nuevas debido a su tercera parada).
Para consultar la clasificación completa del gran premio pulsa aquí.
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Imagen destacada: @F1
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