“El reto es volver a jugar bien. Encontrar la luz que nos permitía agredir a los rivales”, decía Sampaoli ayer sábado. “¿Crisis? Evidentemente”, concluye Pareja al final del encuentro. El Sporting ha logrado bloquear el interruptor de la luz a la que aludía Sampaoli.
Nada nuevo tras el parón. Como en la Tregua de Navidad de 1914, parece que los jugadores no han llevado a la práctica todo lo hablado mientras los combinados nacionales ocupaban los campos de fútbol del mundo. Si miramos la actuación de ambos equipos y comparamos con sus trayectorias previas, el ya mencionado parón no ha cambiado muchas cosas.
Seguimos viendo un Sevilla triste, sin el amparo de su gente. Aquel conjunto intratable en casa es ahora más vulnerable que nunca, y ya ni hablemos de sus partidos más allá de las fronteras hispalenses. Hoy, todos y cada uno de los defectos del equipo han salido a relucir sobre el verde del Pizjuán. Baja velocidad en la circulación del balón (que no mala, pues los sevillistas acaban llegando al área rival), nula explosividad de sus referentes ofensivos (a excepción de un milagroso Jovetic, que echó el resto en un partido que, en teoría, iba a ver desde la grada) y falta de puntería (hace ya mucho que Ben Yedder o Vitolo son un peligro para el guardameta adversario).
El Sporting ha logrado mantener su solidez y su apariencia de bloque compacto con la llegada de Rubi. Ha defendido sin problemas su portería (Amorebietas aparte), y cuenta en sus filas con un guardián inconmensurable: ‘Pichu‘ Cuéllar. Sin embargo, el aspecto ofensivo sportinguista se resume en un puñal con la palabra ‘Burgui‘ en su espalda. Aunque siga abajo, y con riesgo alto de descenso, parece ser el equipo más consistente de los candidatos al infierno de Segunda.
Del partido, poco que decir. Un Sevilla que no cree en sus posibilidades naufragó una y otra vez ante la costa de los jugadores del Sporting. Varios disparos del montenegrino Jovetic, con sus respectivas intervenciones de Cuéllar, fue lo único salvable del encuentro. Un encuentro donde también se asomó la polémica, con alguna jugada en la que pudo o no haber penalti. Sea como sea, no se señalaron, y no tuvieron mayor trascendencia.
El Sporting se mantiene tercero por la cola, a cinco puntos de la salvación. El Sevilla cae a la cuarta posición, castigo merecido tras un mes de marzo para olvidar. Las crisis siguen patentes en los dos conjuntos. En uno de ellos, el Sporting, se vislumbran algunos brotes verdes. En el otro, el Sevilla, las malas hierbas no se van.
FICHA TÉCNICA
Alineaciones
Sevilla FC: Sergio Rico; Mariano, Nico Pareja, Lenglet, Sarabia; Kranevitter (Iborra, 58′), N’Zonzi, Nasri; Vitolo, Correa (Vietto, 80′), Ben Yedder (Jovetic, 58′).
Real Sporting de Gijón: Cuéllar, Lillo, Babín, Amorebieta (Juan Rodríguez, 66′), Canella, Vesga, X. Torres, Sergio Álvarez, Carmona, Burgui (Isma López, 80′), Carlos Castro.
Arbitraje
Don Iñaki Vicandi Garrido (Pais Vasco). Amonestaciones para los locales Nico Pareja, Nasri, Mariano, y los visitantes Vesga, Lillo, Amorebieta, Xavi Torres.
Foto: laliga.es
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