El día 8 de febrero de dos mil dieciséis fue, con total seguridad, el peor día en la carrera de Marc Gasol en la NBA. Sufrió una fractura no desplazada del escafoides tarsiano del pie derecho. Una lesión gravísima para los jugadores de baloncesto y más si cabe, para los jugadores de su tamaño. Dicha lesión le impidió disputar los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro y llegó a poner en duda su futuro como jugador de baloncesto. Paradójicamente, un hueso tan pequeño podía frenar en seco la carrera de un jugador tan grande como él.
El pasado 3 de octubre las dudas se disiparon. Ocho meses después, Marc volvió a jugar y demostró al mundo que está como nunca. Ha regresado, posiblemente jugando el mejor baloncesto de todas las temporadas que lleva en la mejor liga del mundo. Su muñeca ha vuelto más afinada. Ha añadido a su repertorio un lanzamiento de tres letal. Con dicho tiro, abre la defensa, su marcador tiene que salir a puntear el tiro y hace hueco para que otros jugadores penetren en la zona del rival, dejando un espacio valiosísimo en la pintura. En la zona sigue siendo intimidante. Tanto en defensa como en ataque. Su dominio en el juego interior y su tiro exterior le hacen ser, un jugador muy difícil de marcar. No hay que olvidar su habilidad para el pase, una faceta que domina como pocos pívots de la liga. Su acertado tiro de cinco metros, le hace ser uno de los centers más completos y versátiles de la NBA. La única laguna en su juego es el rebote. Un jugador de su envergadura debería ser más dominante en ese aspecto del juego. Si logra mejorar este último punto y continúa a ese nivel, en unos años, no sólo será el jugador más importante de su franquicia, también será uno de los pívots mas valorados de la NBA. Sólo Cousins y Karl Anthony Towns y posiblemente Embiid si sigue su progresión, se sumarán a ese grupo tan destacado.
Esta temporada su media de puntos ha subido a 17,4. Su máximo en la NBA. Promedia casi 8 rebotes por partido y 1,6 tapones. Con estos números podemos decir que estamos ante su mejor temporada. Parece que después de tan dura lesión, la rehabilitación ha sido perfecta. En el caso de Marc, el dicho: “lo que no te mata te hace más fuerte” se cumple. Esta campaña ha vuelto con un nivel más alto que nunca pero esperamos que con un nivel más bajo que el año que viene.
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Fotografia extraida de rtve.es
