El equipo de Pedro Martínez consiguió una victoria agónica tras haberla tenido en la mano durante casi todo el partido y haberla podido perder en los últimos instantes del partido. Un minuto de inspiración del base francés Antoine Diot fue clave para recuperar la delantera en el electrónico y sellar una victoria más moral que clasificatoria, ya que horas antes la derrota del Hapoel en Krasnodar ante el Kuban había certificado el primer puesto del grupo para los Taronja.
El VBC inició con las ideas bien claras tanto en defensa como en ataque y pronto llegarían las primeras ventajas claras en el luminoso de un pabellón semivacío y con un ambiente gélido y muy lejano de lo que suele ocurrir en las canchas balcánicas. Oriola en primera instancia y Will Thomas tras las primeras rotaciones fueron los estiletes con los que el club de la Fonteta martilleó una y otra vez el aro de los de Ljubiana. Un esclarecedor 16-28 al final del primer parcial era un síntoma evidente de como había transcurrido el enfrentamiento.
La entrada de Dubljevic hizo perder potencia e intimidación en el segundo cuarto. El pivot reaparecía tras un largo periodo de inactividad y lo acusó, arrastrando con él a su equipo. Esto, unido a un Joan Sastre todavía convaleciente, dio alas al Olimpia que, poco a poco y sin un juego brillante, fue comiéndole terreno a los visitantes de la mano de Milosevic y Jankovic que veían el aro valenciano como uno de hula-hop. 37-39 al descanso y vuelta a empezar de cara a la segunda parte del encuentro.
El tercer cuarto no marcó diferencias importantes a favor de ninguno de los contendientes que iniciaron un intercambio de canastas con ligera iniciativa para los de la Avda Hermanos Maristas. La entrada de Diot no era el revulsivo esperado en este tramo de la contienda y solo la entrada de San Emeterio y Oriola y un aumento de la intensidad defensiva volvieron a devolver las grandes rentas en el marcador. Esta vez parecía la definitiva de cara a un supuesto tranquilo último cuarto. 52-64 daba la impresión de ser suficiente para no sufrir más sobresaltos.
Craso error este supuesto. Una presión a toda cancha, ahogar al base visitante y arriesgar desde la línea de tres fueron los tres pilares sobre los que cimentó su nueva remontada el equipo local. El 66-69 volvía a intimidar y hacer temer lo peor a Pedro Martínez tras sufrir un parcial de 14-5 que hizo adelantarse a los locales con un peligroso 72-71. Cuando más negras eran las nubes que se ceñían sobre el panorama, surgió el ángel salvador que tiñó de azul el cielo para los foráneos. Un triple a falta de 44 segundos y un providencial tiro libre, obra todo ello de Antoine Diot , tras una buena defensa dejaría el marcador en un 72-75 que fue el resultado final, no sin un tremendo sobresalto en forma de triple fuera de tiempo por parte de los eslovenos.
Foto destacada vía: valenciabasket.com
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