Se pronuncia Iago Aspas

El hijo pródigo del Real Club Celta pisa fuerte, y esta vez para que se entere toda España. Algunos habrán oído hablar de él por primera vez ayer y quizás ya no se les olvide su nombre, se pronuncia Iago Aspas y en español también.

Como todos sabemos un jugador no se hace de la noche a la mañana, ni pasa de un día para otro a ser portada de revista. El caso del jugador de Moaña no es diferente, empezó a destacar con el Celta cuando era un niño. Su descaro y su picaresca ya sobresalían entonces cuando para hacer las pruebas del Celta mintió en su edad diciendo que tenía más años. Aunque los entrenadores acabaron descubriendo la mentira no se vieron capaces de rechazar a esa pequeña gran promesa.

Más adelante parecía que lo único que le podía frenar su progresión a este chaval era su carácter desmedido.  En su época de juveniles, debido a su mal comportamiento,  tuvo que irse al Rápido de Bouzas con un tajante “o cambias o no vuelves”. Y aunque así fue en su crecimiento a veces mostraba demasiado temperamento y no sabía medir los tiempos. Parecía que si su maduración no llegaba esa intensidad desmedida en su juego le podía pasar factura.

Pero aquel niño loco por jugar al fútbol se convirtió en un profesional como la copa de un pino que da ejemplo cada vez que sale al campo. Iago es ahora un jugador que imprime pasión y cabeza en el terreno de juego, que siente los colores y sobre todo que nunca pierde la esperanza. Ayer mismamente dio prueba de ello dándole alas a España después de marcar ese golazo ante Inglaterra cuando parecía que el partido estaba acabado. Puede que los del Liverpool se estén arrepintiendo de no haberle dado más oportunidades, pero eso queda atrás. Igual que sus inicios deportivos que a día de hoy muestran en él una huella importante.

Iago fue un jugador que con casi 21 años vio la oportunidad de debutar con el equipo de sus amores. Consiguiendo en su segundo partido disputado (contra el Alavés) el gol que salvaría al Celta de un posible descenso a 2ª B, empezaba bien la historia y solo iba a ir a mejor. Ahora todos sabemos como acaba ese cuento, el ilusionante jugador de la cantera se convirtió en el líder del actual EuroCelta. Pero, ¿y con la Roja? Después de otro dulce comienzo puede que acabe con otro final feliz. Hagan sus apuestas pero… este chico promete. No sería el primero que 29 años se sube al carro de la Selección, un jugador bien recordado por el celtismo lo hizo hace muy poco y… ¡por qué no otro! Con una Selección en proceso de renovación y a falta de arietes, Iago Aspas por su desparpajo, verticalidad y movilidad dará mucho que hablar para ocupar un puesto en la delantera. Su trayectoria puede servir de ejemplo a muchos niños que quieren cumplir un sueño.

Iago era uno de esos que iba al campo a ver a su equipo y que fue abriéndose hueco en el futbol a base de entrega y humildad, como reafirmaba ayer llevándose dos camisetas de la Selección y diciendo “no sé si volveré”. Una persona orgullosa de lo que representa, sentimiento que lleva a sus celebraciones, besando el escudo, el de su equipo, el del Celta. Y aunque ayer cambio de escudo su gesto no fue diferente, orgulloso de quien es y demostrando de donde viene.

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Foto principal vía: www.epimg.net