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Situación límite en Boiro

La tensión vivida este domingo en Barraña durante el encuentro entre Boiro y Guijuelo desembocó al final del partido en altercados y en una declaraciones del presidente David Places asegurando que su equipo se plantea abandonar la competición. Con el 2-0 en el marcador el árbitro madrileño Alberto Villoria Linacero pitó un penalti a favor de los chacineros, muy discutido por los barbanzanos, que metió a los de Mateo García en el partido que acabarían remontando con un gol de Raúl Ruiz cuya celebración encendió a una ya indignada afición.

Con el 2-0 en el marcador los hombres de Fredi Álvarez veían cerca la vendeta por la eliminación de Copa del Rey en la que el Guijuelo los dejó fuera de la competición hace dos meses. En ese momento y tras casi 80 minutos de dominio local el árbitro pitó un penalti a favor de los jamoneros que conllevó el 2-1 en el marcador y sacaría a los jugadores locales del partido.

Tanto jugadores como afición protestaron la pena máxima así como otras acciones arbitrales durante el partido. Y es que como viene siendo habitual los aficionados boirenses, equipo y directiva no están conformes con las actuaciones por parte de los colegiados de las que son objeto. Así el penalti polémico que le pitaron a Soto y supuso el 2-1, se unió a la amarilla a Manu Rodríguez por desplazar el balón  y acciones polémicas de otros partidos como la expulsión a Juampa en Copa del Rey, el penalti contra el Izarra o el gol fantasma de la Ponferradina.

Con la crispación en su máximo nivel apareció el gol de Raúl Ruiz y su posterior celebración con la que la tensión explotó en forma de violencia. El jugador chacinero puso el empate en el marcador en el minuto 84 y lo festejó mandando callar a la afición barbanzana y besando su escudo lo que desató la ira de los allí presentes.

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A raíz del gesto, y mientras el jugador celebraba el empate, un aficionado local saltó al campo, presumiblemente para agredirle empujando al jugador chacinero Néstor, que se encontraba en el banquillo. La Guardia Civil y la Policía Local de Boiro redujeron al individuo y lo sacaron del estadio. También molestó a la grada la celebración del banquillo visitante al que arrojaron hielos. Además cuando ambos equipos se dirigían a sus respectivos vestuarios, varios aficionados locales quisieron agredir desde la misma grada a Raúl Ruiz en el momento que encaraba el camino a las duchas, momento en que algún espectador casi logra golpearlo.

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Las declaraciones tras el partido no se hicieron esperar, el primero el presidente boirense David Places que alzó la voz contra el Comité Técnico de Árbitros de la Real Federación Española de Fútbol que decició poner este partido del Boiro un martes, solo dos días después de medirse al Caudal Deportivo en Mieres, no responde a sus correos y rehúye reunirse con el dirigente blanco para que este le exponga las quejas que han llevado al Boiro a recopilar en un video todas las acciones polémicas que han  perjudicado al club.

“Ya intentamos contactar con ellos por correo en tres ocasiones, pero no contestan, así que seguramente le mandemos un burofax esta semana”, apuntó el presidente barbanzano. Asimismo, en declaraciones a Galicia en Goles, programa de la Radio Galega, advirtió de que la situación es ya insostenible y el club “nos planteamos seriamente abandonar la competición. Si no se nos quieres nos vamos“.

Por su parte el técnico boirista Fredi Álvarez quiso felicitar a sus jugadores en la rueda de prensa posterior al choque. “Hemos sido mejores, menos los últimos 10-15 minutos; y el rival se fue arriba. Había mucho desgaste detrás y nos empataron un partido cuando lo teníamos que tener sentenciado desde antes“, aseguró el técnico, que vio la pena máxima del segundo tiempo como clave: “Nos fuimos del partido con el 2-1“. Sobre la actuación arbitral, el moañés aseguró que “no es mi guerra, no la puedo controlar. Ha habido muchas situaciones que no me han gustado. Las mil personas que estaban en el campo han visto lo que ha pasado en el partido“.

El técnico del Guijuelo, Mateo García, reprobó el comportamiento de su jugador Raúl Ruiz. “Censuro lo de Raúl y lo hablaré con él. Voy a hablar con el jugador, es un chaval con carácter y mañana hablaremos despacio. Hace falta un ratito de poso en ambos vestuarios“. El técnico visitante aseguró que Fredi se lanzó a por su jugador, cuestión que desmintió el moañés, y comentó que un futbolista boirista le pegó un manotazo a Raúl en la cara: “Somos los primeros que debemos dar ejemplo, si el árbitro está fino lo mismo acaba expulsado a algún jugador del Boiro. He visto un manotazo en la cara de Raúl, aunque no sé quién fue“.

La situación tensa al acabar el encuentro deribó en una situación límite para el CD Boiro que indignado se plantea abandonar la competición y reclama atención por parte del Comité de árbitros. Habrá que ver como evoluciona la situación y si el club gallego abandona la competición lo que sería una lástima para el fútbol gallego y una gran pérdida para la categoría a la que tanto les costó subir haciendo historia.

Fotos vía: La Voz de Galicia y CD Guijuelo

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