La National Women’s Soccer League tiene un nuevo campeón, para sorpresa de muchos y contra todo pronóstico, un joven Western New York Flash se coronaba como el equipo vencedor de la temporada 2016.
Después de que en las últimas semanas de temporada regular se dieran un par de sorpresas más, como la descalificación del Seattle Reign o la consagración de Portland Thorns como el mejor equipo de temporada regular por encima del Washington Spirit, arrancaban los Playoffs de la liga, teniendo como primera parada Washington DC, donde el Spirit sería por primera vez el anfitrión de una semifinal, al recibir a Chicago Red Stars, lideradas por Christen Press y que llegaban dispuestas a llegar a la final por segundo año consecutivo alcanzando la pos temporada.
Pero fue el Spirit quien pegaría primero, al 36′ la capitana Ali Krieger le daba la ventaja a las locales, ventaja que defendieron gran parte del partido, hasta que en la recta final fue el turno de la capitana de Chicago de dar la cara por el equipo, Press emparejaba las cartones al 81′ y nos íbamos a tiempos extras. Sería hasta el minuto 111′ que todo quedaría definido, con un gol de Francisca Ordega, Washigton llegaba por primera vez a la final de la NWSL.
Para conocer al rival que enfrentaría el Spirit viajamos hasta Portland, donde las Thorns también tendrían los honores de ser anfitrionas por primera vez, enfrente tendrían a la sorpresa de la temporada, un joven equipo del Flash liderado por el ex entrenador de Portland, Paul Riley y por la goleadora de la temporada, Lynn Williams. El Flash seguía dando sorpresas, las visitantes abrieron el marcador al 16′ por conducto de Samantha Mewis y minutos después, al 37′ Makenzy Doniak ampliaba la ventaja 0-2.
Apenas un par de minutos después, sería el turno de la capitana de Portland de aparecer, Christine Sinclair marcaba al 39′ para acortar la ventaja. Portland no se dio por vencido y logró empatar el partido en la recta final, al 77′ Emily Sonnet mandaba la segunda final a tiempos extra. El partido más emocionante de la fase final, no podía estar completo sin la campeona goleadora, Williams aparecía al 98′ y al 103′ para poner un 2-4 que parecía ser final, pero dos minutos después y justo antes del final del primer tiempo extra, Lindsey Horan volvía a poner a Portland en el marcador para dejar el 3-4 al 105′.
Los últimos 15 minutos vieron los esfuerzos desesperados del local por empatar el partido terminar en nada, el marcador ya no se movería, Portland quedaba eliminado en casa, el Flash consolidaba la sorpresa y se convertía en el segundo finalista de la temporada.
Al igual que el año pasado, la final de la liga tendría lugar en terreno neutro, por lo que los equipos se trasladaban a Houston, Texas, a la casa del Houston Dash, para definir al nuevo campeón, tras dos años de reinado de Kansas City, la NWSL tendría un nuevo campeón.
El partido empezaba de forma intensa, el Spirit parecía más peligroso en los primeros minutos y al 9’ Crystal Dunn aprovechaba el espacio que le dejaba el rival para anotar el primero del partido, el Flash no tardó en responder, cinco minutos después, al 14’, Sam Mewis nuevamente se hacía presente y empataba el partido. Ante el calor de Houston, ambos equipos fueron bajando la intensidad del juego, para el segundo tiempo nos regalaron un juego altamente defensivo y aburrido, con poca o nula emoción para una final de campeonato.
Los 90’ reglamentarios terminarían con el empate y al igual que en las semifinales, el partido se iba a tiempo extra. Nuevamente sería el Spirit quien buscaría el gol tempranero y nuevamente aparecía Dunn para poner en ventaja a las suyas al 92’. Los minutos restantes fueron agónicos para ambos equipos y para los aficionados, Washington defendía con todo su ventaja y el Flash se iba al frente por una última bocanada de aire.
Digno de una final, el drama se hizo presente; el arbitro indicaba un tiempo añadido de 4 minutos, el New York mandaba todo al frente y Washington se defendía con los diente, 30 segundos antes del final del partido, una mala salida de la portera Kelsey Wys abría las puertas para que Williams empatara todo de nuevo, Washington veía su título desvanecerse y el Flash mantenía la esperanza viva.
La tanda de penaltis resultó igual de dramática, la heroína del partido fue Sabrina D’Angelo quien atajó tres penas máximas, incluyendo los de Krieger y Diane Matteson para consolidarse como la jugadora más valiosa del partido y de está manera el Western New York Flash se coronaba con su primer título en la National Women’s Soccer League y Paul Riley obtenía su tercer título en tres ligas diferentes.
Con un equipo joven, formado sobre todo por debutantes y un entrenador quién llego al puesto días antes del arranque de la liga, WNYF da la sorpresa más grande de la temporada y logra consolidar su proyecto por encima de los grandes favoritos, Portland, Seattle y Chicago.
Ahora la liga entrará en un largo descanso que se terminará a principios del próximo año con el Draft colegial. Tras la incorporación este año del Orlando Pride y los rumores de integrar más equipos para el 2017, la liga estadounidense sigue consolidándose en busca de llegar a ser la mejor liga de Fútbol Femenino del mundo.
Foto vía: nwslsoccer.com
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