Superando a la historia, haciendo poco ruido, salvando obstáculos, dando espectáculo… siendo equipo. Así ha llegado la Selección Española de baloncesto femenino, por primera vez en su historia, a semifinales de los Juegos Olímpicos. Una hazaña histórica que está a 40 minutos de convertirse en eterna. Hoy, a las 20:00 horas, España vs Serbia.
Barcelona 92, Atenas 2004, Pekín 2008 y Río 2016 han trazado un camino olímpico que está a punto de llegar a su meta: la medalla; por un equipo que comenzó a labrarse allá por el 2011 cuando un desastroso Europeo de Polonia borraba las ilusiones olímpicas londinenses. Fue entonces cuando la cualidad se convirtió en calidad, la garra en voluntad y el carácter en orgullo. Tres elementos que se fusionaron el pasado martes una vez más (y van muchos en el irrepetible último ciclo olímpico), personificados en esta ocasión en las manos de una Anna Cruz que, tras una extenuante remontada, creyó.
Creyó en el equipo, creyó en ella, para anotar una canasta que daba el pase a semifinales y que quedará grabada en la mente de todos los aficionados a este deporte. Y ahora, en el horizonte, aparece Serbia como única traba para alcanzar una laboriosa final olímpica que transformaría la historia en eternidad. Casualidad o no, este viaje se iniciaba con ellas, en un primer partido de la Fase de Grupos que hoy en día parece lejano cubierto de emociones, y que Lucas Mondelo lo calificaba como “una final”… difícil de definir lo que comenzará hoy a las 8.
España conseguiría la victoria entonces por 59-65, un resultado poco referente ante dos selecciones tan potentes y más teniendo en cuenta la evolución del equipo serbio en el torneo. Y es que Serbia, actuales campeonas de Europa, sufrió más de lo esperado sumando 3 derrotas consecutivas en el inicio del torneo, teniéndose que jugar todo a un partido a cara o cruz contra China por la 4º y última plaza que daba acceso a cuartos de final. Esa final anticipada para ellas, provocó un cambio de mentalidad que les ha supuesto mayor capacidad de competir a pesar de no mostrar su mejor juego. Bien dirigidas desde el banquillo por Marina Maljkovic, las jugadoras serbias han mostrado seguridad y temple. Un rival duro al que no le da miedo ir por detrás en el marcador y que no se arruga en finales apretados como ya demostraran en cuartos sorprendiendo a una de las grandes favoritas, Australia.
España, por su parte, llega llena de confianza tras el final de partido ante Turquía y con buenas sensaciones desde la Fase de Grupos. Con la historia reciente a favor (España se ha impuesto a Serbia en los últimos 9 enfrentamientos directos), las de Lucas Mondelo intentarán aprovechar la deficiencia de banquillo de las serbias, muy dependientes ofensivamente de su quinteto titular (Ana Dabovic, Sonja Petrovic, Jelena Milavanovic y Danielle Page), desgastando a las balcánicas con intensidad y cambios. “Nosotros somos un equipo, más que una simple selección. No hablamos de nombres sino de conjunto. Así hemos llegado hasta aquí y así continuaremos hasta el final” comentaba en esta línea el seleccionador en la web de la Federación Española de Baloncesto, que además hacía hincapié en el que se presupone la clave de un partido llamado a decidirse en los instantes finales: “Tenemos que controlar las emociones. Si controlamos las emociones podremos pensar con claridad para tomar las mejores decisiones”.
EEUU y Francia, la otra semifinal
Estados Unidos y Francia se enfrentará en la otra semifinal del Torneo Olímpico a las 0:00 horas de España. Las estadounidenses parten como principales favoritas tras volver a superar la barrera de los 100 puntos en cuartos de final ante una selección japonesa que nunca dejó de mirar de frente a EEUU, pero que nada pudo hacer. Geno Auriemma llega con la duda de Sue Bird con molestias en una de sus rodillas tras el partido de cuartos. La resonancia magnética ha desvelado que la veterana base sufre un leve esguince de rodilla que no le impedirá jugar los partidos que restan del torneo, eso sí con una protección especial.
El torneo ha sido menos apacible para el conjunto francés que logró el pase a las semifinales en un sufrido duelo ante Canadá que entró en los últimos 10 minutos con un rotundo y revelador 50-50 en el luminoso. Justo en el equipo canadiense deberá fijarse el galo para tener opciones a competir ante el “Dream Team” y es que las canadienses han sido las únicas capaces de dejar a Estados Unidos por debajo de los 100, hecho que se antoja indispensable para incomodarlas.
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Foto destacada vía: FIBA
