La Selección Alemana de Fútbol se enfrentará este domingo a Eslovaquia en los octavos de final de la Eurocopa 2016, un encuentro que tendrá lugar en Pierre-Mauroy de Lille y que decidirá el posible rival de los españoles en cuartos de final.
Alemania ha terminado su fase de grupos aparentemente sencilla y le toca verse las caras ante los eslovacos, quienes no han dado nada por perdido en ningún momento de la Euro. Los hombres de Jan Kozak han demostrado la confianza y la unión suficiente para sobreponerse a las adversidades y hacerse con un puesto en esta ronda tan elevada de una competición europea. Gracias a ello, gozarán de la oportunidad de desestabilizar a unos alemanes dolidos por su empate ante Polonia.
Joachim Löw tiene muy clara su estrategia de cara a este torneo, y la ha efectuado durante una fase grupal en la que su selección no ha destacado especialmente por su gran efectividad. Alemania no ha podido elaborar su juego con soltura debido a la falta de ideas en el ataque, hecho que tenía lugar cuando estos se acercaban a tres cuartos de cancha. El colocar a Götze como falso nueve ha sido un error criticado por gran cantidad de aficionados, dado que el no disponer de un delantero condiciona mucho el juego de este equipo en el que los laterales influyen mucho en el desarrollo de la fase ofensiva.
Así pues, la mejor forma de disputar este encuentro sería el colocar una referencia en la zona más avanzada del ataque y un hombre de enlace con el centro del campo. Mesut Özil sería el indicado para ese enlace, y Mario Gómez el ‘killer‘ ideal para terminar la jugada. A ellos se les unirían los Draxler y Müller, quienes no decepcionan con sus actuaciones y tienen gran movilidad por cualquier parte de la zona más avanzada del terreno.
Por su parte, los eslovacos plantearán este enfrentamiento de una forma distinta. La posesión de balón será para el rival, pero la contra será suya. Weiss y Hamsik llevarán la batuta en el contraataque con la finalidad de sorprender a una zaga alemana con pocos despistes. Y es que, esta será la única opción de los europeos del este, a menos que se efectúe una alta presión en el centro del campo y se intente manejar el balón, algo que no se les da especialmente bien.
Sin embargo, la Eurocopa no fue creada para tareas fáciles, y aquel que consiga la victoria tendrá la obligación de enfrentarse, bien a España, o bien a Italia en cuartos de final. Por parte de los alemanes, el partido más sencillo sería el del domingo, ya que los demás les ayudarían a continuar agrandando su leyenda, mientras que para los eslovacos, debutantes en este tipo de torneos, sería seguir haciendo historia, ya que avanzarían por primera vez a unos cuartos en una competición de países.
Milagros mayores se llegaron a ver en escenarios mucho más grandes. Este tipo de batallas solo se libran una vez en la historia, y la sorpresa puede estar presente en cada momento. El que tenga o no lugar dependerá de 22 futbolistas que lo darán todo en el terreno de juego, de 22 chicos que esperan cumplir con su objetivo de dar un paso más hacia la gloria.
Imagen: www.lavanguardia.com
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