Minutos antes del comienzo del partido, se hace entrega a la Asociación Bicos de Papel de un cheque, para ayudar con su gran labor con los niños oncológicos del Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo.
Comentábamos en la previa que este era un partido muy importante de cara a las aspiraciones de revalidar el título de Liga para el Mecalia Atlético Guardés, y un gran paso en caso de victoria para Rocasa Ace Gran Canaria de llevarse esta Liga.
Llegaban ambos equipos con bajas, por parte del equipo visitante, la más destacada la ausencia de Lisandra Lusson, además Rocasa llegaba con la plantilla justa, 12 jugadoras, incluidas las 2 porteras Silvia y Dara.
En el caso del Guardés, causaba baja Anthía Espiñeira, y aunque formaban parte del banquillo, tampoco participarían, Marta Mendéz ni Gabriela Romero.
Con estas circunstancias, ambos entrenadores ponían sobre el campo su táctica de juego defensa y ataque.
Antonio Moreno, entrenador visitante, disponía una defensa central de gran envergadura con Mbengue y Pizzo de centrales y flanqueándolas María González y Haridian Rodríguez. En el ataque, reducía el campo, olvidándose del juego hacia los extremos, y daba completo protagonismo al lanzamiento exterior y a las pantallas y movimientos de desmarque de su pivote, Haridian.
Ignacio Prades, disponía una defensa 6-0, con Inés y Ana Portu como centrales, y Naiara y África a sus lados, para el ataque, Estela Doiro sería la encargada de dirigir al equipo, abriendo el campo lo máximo posible y buscando mucha circulación de balón.
En los primeros 20 minutos, la táctica de Antonio Moreno se estaba llevando el partido. Goles fáciles en lanzamiento exterior, Mbengue llevaba 4 goles, combinando con pivote, Haridian 5 y saliendo en rápidos contraataques. Por su parte Guardés tenía que elaborar más la jugada y no encontraba con claridad por donde penetrar.
Prades pedía tiempo muerto, y el revulsivo llegaba en el cambio en ataque de Rebeca Castell por Inés Hernández. A partir de ese momento las fijaciones al impar desde ambas alas si hacían moverse y desajustarse a la defensa canaria. En defensa, Prades ordenaba la subida a los laterales para buscar en 9 metros a las lanzadoras canarias, atrás la defensa empezaba a controlar mejor los movimientos de Haridian. Ese buen ajuste defensivo, permitía al equipo local salir al contraataque, donde Africa y Jennifer fusilaban a Silvia Navarro.
Empate 11-11 al descanso.
Tras el paso por vestuarios, el dominio del juego había cambiado completamente. Antonio Moreno insistía en achicar el campo, pero Guardés agobiaba a Pizzo y Mbengue que no podían buscar lanzamiento cómodamente.
La defensa canaria comenzaba a acusar también el continúo desplazamiento de extremo a extremo, una incansable Estela Doiro, movía a su equipo en un baile de derecha a izquierda, llegaban entonces los goles desde el extremo para Naiara y ante las circulaciones de esta misma, de Inés y la propia Estela que encontraban pasillos por los que penetrar.
Tuvo su mayor ventaja Guardes en el minuto 40, marcador 17-12, pero Rocasa no se rendía, y el entrenador pedía un último esfuerzo, sacando en ataque a Priolli y Schuster, que de nuevo contactaban con Haridian y permitian a Mbengue soltar el brazo desde 9 metros, aprovechando 2 exclusiones casi seguidas del Guardés.
Prades calmaba a sus jugadoras, y les recordaba que su baza era el movimiento, ya que las jugadoras canarias se estaban agotando por el esfuerzo.
Los últimos minutos serían para el Guardés, una Estela Doiro que parecía estar al inicio del encuentro junto con Inés firmaban varios tantos que las ayudaban a sacudirse la reacción canaria.
Caía por tanto en A Sangriña, por 26 a 21, el líder imbatido, Rocasa Gran Canaria.
Fuente imagen destacada: Sexto Anillo.
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