Los niños deportistas buscan constantemente retos, y sobre todo aquellos que para su padre y su madre suelen ser más importantes.
Lo más importante para el desarrollo de un deportista es el amor de sus padres, familiares y amigos, además de hacerle entender que pertenece a lo que está intentando día a día en sus entrenamientos y competiciones: a un entorno DEPORTIVO.
Si te gusta que tus hijos practiquen algún deporte, seguro que no es solo por el beneficio físico que eso implica (que también). Seguramente estás convencido de que la práctica de un deporte tiene que ir unido a una serie de valores como son (entre otros): el respeto, el compañerismo, el esfuerzo, el trabajo en equipo, la superación, el civismo, la constancia, la disciplina… en fin, INFINITOS aprendizajes que servirán a tu hijo como BASE FUNDAMENTAL de la vida.
Sin embargo, muchas veces lo que hacemos es todo lo contrario a lo que predicamos.
Nuestros hijos aprenden de nosotros, de lo que decimos, pero sobre todo, de cómo nos comportamos. Lo que hacen es copiarnos continuamente. Ya sabemos que un padre o una madre lo es 24 horas al día, no hay ratos libres. Por tanto, si tienes un hijo deportista :
- Anímale y apóyale en cada competición, partido o entrenamiento. Nadie se está jugando la vida, no le grites ni le humilles. Está intentando disfrutar, permítele que lo haga.
- Que tu primera pregunta después de un partido o un torneo sea siempre “¿Qué tal te ha ido?”, y nunca si ganó o perdió… ¿qué más da eso?
- Respeta SIEMPRE… a su entrenador y sus decisiones. Aunque no te gusten. Tampoco se discuten.
- NUNCA menosprecies a ninguno de sus compañeros. Ninguno es peor que él, aunque para ti él sea el mejor de todos.
- No insultes jamás a un árbitro/juez.
- Si tu hijo tiene un mal día, anímale. Otro día lo hará mejor.
- Si vais juntos a un EVENTO DEPORTIVO, compórtate como él espera que hagas. No grites, no te enfades y no te portes como un MALEDUCADO. No le decepciones, haz que se sienta orgulloso y que quiera volver otro día contigo.
- Intenta que tu hijo practique el deporte que realmente le guste, y no el que te gusta a ti.
- Tu hijo no es UNA DE TANTAS ESTRELLAS DEL MUNDO DEL DEPORTE (ni falta que hace). Déjale disfrutar con el juego, porque es un juego, no lo olvides. Ensalza todo lo que hayan hecho bien, tanto él como sus compañeros, y minimiza lo que ha salido peor. Habrá más, torneos o competiciones, seguro.
- Por encima de todo, disfruta con tu hijo del deporte. Puede que no sea el mejor deportista del mundo… Eso, en realidad, NO es lo fundamental.
Y para terminar…
En el deporte, así como en la vida, los padres ejercen un papel fundamental para que sus hijos se beneficien del deporte. Si son capaces, mediante la actividad deportiva de éstos, de involucrarse de forma positiva en el desarrollo deportivo y personal del niño, lograrán que en el deporte se trabaje de un modo educativo e íntegro.
Esto va destinado a todos los padres, madres y familiares que dejáis muchas cosas por vivir con ellos, por hacer esfuerzos y sacrificios por ellos, por nuestros niños y niñas, por nuestro legado DEPORTE ESPAÑOL.
Gracias a mis padres.
Imagen destacada: Hacer Familia.
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