A no bajar la guardia
Un partido con pocos alicientes deportivos con una clasificación ya decidida y dos equipos con ganas de agradar y de agradarse jugando al baloncesto. Poco público en en La Fonteta y un ambiente más frío de lo normal en la cancha valenciana.
El Valencia Basket empieza frío
Con un ataque errático y un porcentaje de tiro muy bajo, el inicio fue claramente francés. Rebote defensivo ausente, intensidad de piernas y brazos muy lejos de lo habitual y primera brecha para los galos. (5-15 m. 5) Pedro Martínez llama a filas a los suyos para evitar que la diferencia fuera a más. No mejoró el parcial ni las sensaciones tras el tiempo muerto y el Bourg siguió aumentando su renta, cimentada en un rebote defensivo bien cerrado y un ataque rápido y acertado. Los «taronja» intentaban cambiar las cosas con rotaciones y cambios continuos pero su ataque continuaba siendo deslabazado y demasiado individualista. El juego valenciano no fluía y era todo a base de acciones individuales.
Cambio de dinámica
No le hizo falta mucho al conjunto local para meterse en el partido e igualarlo. Tiros más liberados, ataques más rápidos y brazos más activos en retaguardia, aunque era en defensa donde todavía no se lograba alcanzar el nivel deseado y necesario para ponerse a la par en el electrónico. Muchos cambios, incluida la aparición del joven Carot, pero la defensa seguía sin dar sus frutos. El Valencia Basket no acababa de entrar al partido y la concentración brillaba por su ausencia. Daba la impresión que solo los vecinos del norte habían venido al partido con la intensidad necesaria para llevárselo.(37-50 m.17.). Otro arreón final de los «taronja» y un parcial de 13-4 le valió a los de Pedro Martínez para llegar cerca de la igualada al final de la primera parte. Todo parecía mejorar. (50-54 m.20).
Partido nuevo
Como si de Dr Jekill y Mr Hyde se tratara, los taronja parecían otro equipo. Intensidad en defensa y ataque fácil. Todo esto trajo la primera ventaja local y la entrada en juego de una fría hasta el momento Fonteta. Aún y con todo, los galos no se iban del partido ni bajaban sus estadísticas ofensivas. Se complicaba un partido que se antojaba plácido para Pedro Martínez y su banda. Los aficionados intentaban empujar y dar aliento pero faltaba todavía una mayor continuidad en el juego para darle la vuelta al electrónico. (72-76 m. 30)
Picar piedra
Tocaba ponerse el mono de faena para llevarse el partido. La Fonteta entendió el mensaje y el equipo se sumó, por fín, a la fiesta. Un buen par de acciones ofensivas, alguna que otra polémica arbitral y los decibelios subieron considerablemente. Parcial de 6-0 en el primer minuto y ahora tocaba darle continuidad al esfuerzo y al acierto. Poco a poco y con mucho esfuerzo y sin dejar de cometer fallos incomprensibles, los valencianos consiguieron ponerse por delante pero continuaba faltando esa constancia tan necesaria. Final igualado y tocaba templar nervios para cerrar con victoria esta fase de la competición.
Con más corazón que cabeza y tirando de destellos personales, el Valencia Basket se encaminaba a una nueva victoria en la Fuente de San Luis. (96-93. m.39). Tocaba defender como no se había hecho hasta ese momento para poder sellar el resultado, pero de nuevo un rebote mal cerrado y otra opción para los franceses. Afortunadamente para los valencianos, fallaron dos tiros libres cuando más los necesitaba el Bourg-en-Bresse. Respiración contenida, escasos segundos en el luminoso y un ataque para finiquitar el resultado en manos de los valencianos. Dos libres para Jones y 100-95 para regocijo de la afición. Solo un inverosímil triple disimuló la claridad de la derrota final.
