Hace no demasiado, lo que actualmente se conoce como las ATP Finals se denominaba como Copa de Maestros. Muchos jugadores supieron ganar este prestigioso torneo y ganarse el mote de “Maestro”, pero si de esos vamos a hablar, hay uno que desde hace rato merece un título superior, y hoy lo confirmó. En este jornada, Novak Djokovic se terminó de consagrar como Gran Maestro del deporte blanco, pero tuvo que pasar por una exigente semana antes de esta nueva coronación, y aquí la repasaremos.
Fase de grupos llena de drama
Nole (#1) formó parte del grupo rojo en Turín junto a Jannik Sinner (#4), Stefanos Tsitsipas (#6) y Holger Rune (#8), siendo el danés el rival con quien debutó el pasado domingo. Las expectativas del encuentro eran altas, tomando en cuenta el partidazo que habían jugado hace poco en París, y acá no decepcionaron tampoco.
Apenas un quiebre con lado en los primeros 2 sets, que se definieron en tiebreak: a favor de Djokovic en el 1er set y del lado de Rune en el 2do. En el 3er set pegaría primero Novak, seguido de un quiebre del oponente y, finalmente, otro break de Nole para sacar 4-2 y no mirar atrás (7-6 (4), 6-7 (1), 6-3).
Este partido tuvo un incentivo especial para Djokovic, que llegó a Turín con otro objetivo además del campeonato: asegurar la cima del ránking hasta fin de año y, con este triunfo, lo aseguró, recogiendo el trofeo correspondiente al día siguiente antes de empezar la acción en el grupo verde.
Después llegaría el mejor partido del torneo, entre el serbio y Sinner, repleto de muchos rallies emocionantes y buen juego. Apenas hubo un quiebre en el 1er set, que dejó a Sinner sacando 6-5 para adelantarse en el parcial. Más parejo aun sería el 2do set, donde no hubo ninguna chance de quiebre y el Djoker, fiel a su buena fama en los tiebreaks, mandó todo al set decisivo.
Allí, Jannik quebraría para sacar 4-2 pero vio esfumarse rápidamente esa ventaja al game siguiente. El partido merecía acabar en la última instancia, y así fue, pero contrario a lo que suele decir la lógica de los tiebreaks, Nole no pudo esta vez. El nivel asombroso de su rival se impuso y le dio al italiano la ventaja en el grupo (7-5, 6-7 (5), 7-6 (2)).
Poco antes de ese partido, Tsitsipas se retiró apenas empezado su partido contra Rune, lo que le dio muchas posibilidades a este último de pasar de ronda y, habiendo perdido Nole más tarde, corría mucho riesgo de quedar eliminado en fase de grupos, la cual cerraría contra el primer suplente del torneo, Hubert Hurkacz (#9). El polaco no tenía chance alguna de pasar de ronda, pero salió dispuesto a conseguir su primer triunfo ante Novak, a quien nunca que había podido ganar hasta entonces.
El set inicial no fue muy alentador para la causa, pues acabaría decantándose para Djokovic en el tiebreak tras no haber tenido ninguno de los dos posibilidad alguna de quebrar. Hubi pudo quebrar por única vez en el 2do set y llevárselo pero, aún más importante, condenó a Nole a depender de Sinner en su partido contra Rune para pasar de fase. Djokovic se llevaría cómodamente el último set del partido con un par de quiebres, pero no fue hasta que el Carota Boy se impuso más tarde que pudo celebrar completamente su victoria (7-6 (1), 3-6, 6-1).
La grandeza no conoce de edades
Después de esa agónica clasificación, llegaría el momento de presenciar un nuevo episodio de la mayor rivalidad de la temporada: Novak Djokovic vs Carlos Alcaraz (#2), el duelo entre los 2 mejores jugadores del mundo. En estas últimas semanas, sin embargo, había un jugador claramente en un mejor estado de forma que otro, el serbio, y así se demostró en esta ocasión.
Nole tuvo que levantar un 15-40 en el game que abrió el partido y, tras tanta paridad, pudo quebrar para servir 5-3 y cerrar un arduo set donde, no obstante, se fue sintiendo cada vez más cómodo. El 2do set se fue volcando de a poco al lado de Djokovic, que quebró en el game 3 y empezaba a encarrilar una siempre difícil contienda con el español, quien tuvo posibilidad de responder al quiebre pero, en su lugar acabó con otro break en contra que dejó a Novak sacando para partido, en lo que fue el último juego del encuentro (6-3, 6-2).
Y así es como llegamos al duelo decisivo: Djokovic contra Sinner. Revancha de la fase de grupos, ronda donde luego el italiano salvó al serbio de una eliminación prematura. El trámite acá, sin embargo, sería muy distinto al de aquel partido de 5 días antes. Solo hubo un break point en el 1er set, que capitalizó Nole con 2-1. Luego de mantener la ventaja y ganar el set, el Djoker dio un golpe de efecto quebrando de arranque en la 2da manga.
Djokovic pudo ampliar la ventaja con 2-0, mas Sinner resistió. Posteriormente, llegó el momento de mayor tensión del encuentro, con Novak salvando un 15-40 sacando 3-2, seguido de un interminable game donde Jannik levantó otro par de break points, cosa que no pudo hacer en su siguiente juego de saque, que se cerró con una doble falta que le dio el campeonato al mejor del mundo (6-3, 6-3).
El año terminó como empezó, con Nole ganando. Fueron 7 títulos, incluidos 3/4 Grand Slams para alcanzar los inéditos 24 (AO, RG y USO), habiendo llegado a la final del restante. También se impuso en un par de M1000 (Cincinnati y París) para engrandecer su ventaja como máximo ganador de torneos de esta categoría, con 40. El día de mañana, iniciará su semana #400 como N°1 del mundo, otro récord, un día después de su 7mo trofeo levantado de ATP Finals, algo que nadie había conseguido hasta ahora y reafirma lo evidente: Novak Djokovic es el mejor jugador de la historia de este deporte.
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