Rugby VI Naciones

Las Red Roses logran el Grand Slam en el Women Six Nations ’22

Inglaterra gana el grand slam en el women six nations '22

Inglaterra vuelve a demostrar por qué es el mejor equipo femenino de rugby del mundo en una final que controló de principio a fin. El poderío físico de las Red Roses ahogó por completo al equipo francés que se marchan del campeonato con un solo partido perdido. Su rugby ha sido excelente, pero no suficiente.

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ElSuper Saturday con el que finaliza este TikTok’s Women Six Nations tenía un partidazo en el menú, y otros dos acompañantes de menor fuste. Tanto es así, que Irlanda decidió llevarse a casi todas sus tres cuartos a jugar el campeonato de Sevens.

La misma IRFU que prometió darle empuje e invertir en el rugby femenino desmanteló su equipo de XV. No le fue mal en Sevens  (consiguió un fantástico tercer puesto) pero no le dio apenas importancia en sus redes sociales. El desinterés de la federación choca con el creciente interés del aficionado hacia este campeonato.

La jugada no obstante salió bien, y las del trébol ganaron su partido ante Escocia, con un ajustado 15-14 gracias a un ensayo con el reloj en rojo de Enya Breen.

Era el minuto 83 y un minuto después convertía su ensayo dando la victoria a su equipo. Imagen muy pobre de Escocia que se han ganado la cuchara de madera al no haber conseguido ninguna victoria.

Emulando a sus compatriotas.

Las chicas de Italia repitieron los pasos de sus compañeros del XV masculino ganando a Gales en Cardiff en la última jornada. Solo se pudo ver un ensayo por equipo sobre el césped galés, y como pasó con Irlanda, las italianas sacaron su partido adelante en el ultimísimo tramo. Un golpe de castigo en el 79 pateado por Michella Sillari dio el triunfo por 8-10 a Italia.

En este segundo escalón de equipos, Italia tiene un XV peleón y durante este seis naciones han podido brillar jugadoras como la pilar Lucia Gai, la segunda línea Giordana Luca, la guerrera por excelencia Beatrice Rigoni, Sara Barattin y la veterana Manuela Furlan.

El partido

Francia e Inglaterra llegaban invictas a “Le crunch”. Las sensaciones de la Francia de Laure Sansus eran muy positivas. Han ganado sus partidos con solvencia, desplegando un rugby rápido y preciso. Sansus visualiza los agujeros en la defensa rival y toma la decisión correcta en microsegundos.

Esta clarividencia, unida a la habilidad de sus jugadoras a la hora de avanzar en carrera ha sido suficientes en sus enfrentamientos anteriores. Pero Inglaterra no es la numero uno de World Rugby por casualidad.

Inglaterra es otro nivel

Inglaterra es, a día de hoy, un equipo profesional de élite a la espera de que el resto de países den el salto al profesionalismo real. Su pack es sólido en melé y casi imparable en maul. Sarah Bern se ha ganado la titularidad revolucionando cada partido. Es una pilar de las modernas, de las que corren. Contra Italia hizo todos los ensayos que le dio la gana.

Poppy Cleal es la ball carrier por excelencia. Durísima en defensa y ataque. Gana metros a base de ímpetu constante e inquebrantable. Marlie Packer, la fontanera, y Sarah Hunter (baja por lesión en este último partido) completan un “back row” que ejecuta las fases finales, las que se mueven cerca de la línea de ensayo rival, como un martillo neumático. Pero es que no solo de pack viven las Roses. Sus tres cuartos han desquiciado a sus rivales con velocidad en la carrera y precisión pateando el oval. Juegan a la mano con la misma excelencia con la que colocan la pelota en el punto exacto a base de pateos.

Lydia Thomson, Helena Rowland, la incombustible Emily Scarrat han conseguido otro campeonato brillante, sin mácula.

Con estos mimbres se desarrolló el partido. Francia comenzó con un ensayo ilusionante, pero Sarah Bern por partida doble y Abbie Ward arrancaban de cuajo cualquier atisbo de esperanza. A partir de ahí, jugaron con la tranquilidad de la ventaja. Anularon con éxito a Sansus, controlaron las visitas a su 22, y contraatacaron cuando las francesas tomaban aliento.

Ha sido un campeonato muy atractivo para el espectador. El rugby femenino a día de hoy no tiene el apretado corsé de su versión masculina. Arriesgan más. Y todo ese riesgo se materializa en espectáculo. Este año es el primero en el que entra un patrocinador potente. Este año es el primero en el que se juega en fechas diferentes que su versión masculina. Y el espectador ha respondido llenando estadios cada vez más grandes. Este año se celebra la Copa del Mundo. Volveremos a verlas en Nueva Zelanda a partir del 8 de octubre. Hasta entonces, quedará el recuerdo de este fantástico torneo.

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Fuente de la imagen: womens.sixnationsrugby.com

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