El torneo más emblemático del tenis mundial está a la vuelta de la esquina y Daniil Medvedev ha dado un paso de gigante. Su principal objetivo es intentar plantar cara a los principales favoritos sobre la superficie del All England Lawn Tennis Club (Novak Djokovic, Roger Federer, Alexander Zverev, Stefanos Tsitsipas…).
Con su triunfo de este sábado ante Sam Querrey, deja claro que la hierba se le da muchísimo mejor que la tierra batida por razones obvias. La principal característica de esta superficie es el bote bajo de la pelota y la rapidez. Medvedev tiene un muy buen saque y unos golpes de fondo muy potentes que pueden hacer daño a cualquier rival, y su éxito en Wimbledon está prácticamente asegurado.
La trayectoria de Sam Querrey en el torneo balear fue brillante. En primera ronda doblegó al español Roberto Carballés Baena por 5-7, 6-4 y 7-6. En segunda ronda tuvo suerte y no jugó ante Ugo Humbert por walkover del tenista galo. En cuartos de final superó a Roberto Bautista con extrema facilidad por 6-3 y 7-6. Y, ayer, en las semifinales logró el triunfo ante Adrian Mannarino por 6-4 y 6-3.
Por su parte, el jugador moscovita de 25 años obtuvo cuatro triunfos un tanto meritorios. En primera ronda ganó al francés Corentin Moutet por 6-4 y 6-2. En cuartos de final se deshizo de uno de los principales favoritos, el noruego Casper Ruud por 7-5 y 6-2. En las semifinales de ayer venció al gijonés Pablo Carreño, lo que impidió la participación de un jugador español en el partido final del ATP 250 Mallorca Open. Contra el tenista asturiano sufrió de lo lindo, pero terminó ganando 3-6, 6-3 y 6-2.
El público del Mallorca Country Club de Santa Ponsa pensaba que iban a disfrutar de un buen espectáculo, más todavía cuando en la final estaba Sam Querrey. El norteamericano es un buen jugador de hierba, y así lo demostró cuando en 2016 dio la sorpresa en la tercera ronda del torneo inglés, y ganó a Novak Djokovic. Pero el jugador ruso, sin embargo, no quería emplearse demasiado a fondo y no le dio opción alguna a Querrey. El bueno de Daniil doblegó por 6-4 y 6-2 en 62 minutos al veterano jugador americano.
En la primera manga esperó su oportunidad al resto y consiguió llevársela por 6-4, en un primer set impecable por parte del ruso. Medvedev es de esos jugadores que saben cuándo y cómo jugar sus cartas. El moscovita se mostró impecable con su servicio durante todo el encuentro.
En la segunda manga, Medvedev tenía mucha más confianza y, si el público quería ver más tenis, el ruso negó cualquier opción de hipotético tercer set. Cerraría el segundo parcial por 6-2 y con esta triunfo suma su 11º título como tenista profesional. Ya tiene al menos un torneo en todas las superficies, pero se le resiste su “odiada” tierra batida.
A partir de la semana que viene, en Wimbledon, querrá confirmar sus buenas sensaciones sobre la hierba y presentarse como un claro favorito para llevarse el tercer Grand Slam de la temporada. El ruso debutará contra el peligrosísimo jugador alemán Jan-Lennard Struff, contra el que recientemente perdió en Halle, también en hierba. Por su camino podrían estar el joven español Carlos Alcaraz, el veterano croata Marin Cilic y el suizo Roger Federer, rey en Wimbledon, y con el que se podría enfrentar en unos hipotéticos cuartos de final.
Fuente de la imagen principal: @ATPTour_ES
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