El Sporting de Lisboa alcanza su segundo título europeo en una final apasionante y con cierta polémica ante el Barcelona de Andreu Plaza.
Primera parte
El Sporting de Lisboa es campeón de Europa en una final que, como se esperaba, fue magnífica. La final empezó con un gol muy tempranero de Marcenio cuando solo llevábamos 50 segundos de partido. El jugador brasileño, con un punterazo potente desde la frontal del área, logró batir al guardameta del conjunto portugués. La primera parte fue muy igualada. Didac, portero del Barça, tuvo que emplearse a fondo en varias ocasiones, y Esquerdinha, estrelló dos balones contra la madera de la portería que defendía Guitta.
Como era de esperar, la primera parte fue muy disputada. Los dos equipos se dejaron todo en la pista, luchando cada esférico como si fuera el último y entrando con todo a cada balón disputado. Así fue, que la primera parte se saldó con dos tarjetas amarillas, una para cada equipo. Parecía que la primera parte acabaría con el marcador que permanecía invariable desde el segundo 50. Pero, a falta de 2,36′ para el final, el jugador culé Ximbinha, puso el 2-0 en el casillero. Tanto que sería el último de la primera parte.
Segunda parte
Una segunda parte que resultaría ser de locura. Tuvo que esperar para dar comienzo ya que los árbitros tuvieron ciertos problemas técnicos con sus comunicaciones. Hasta que estos no se solucionaron, el partido no se pudo reanudar. Cuando comenzó el espectáculo, el encuentro volvió a ser duro. Cuando se habían disputado apenas dos minutos del inicio de la segunda mitad, Dyego fue sancionado con tarjeta amarilla por dar un codazo a un jugador rival cuando intentaba salir a la contra.
La madera volvía a privar al conjunto culé de hacer otra diana. Está vez fue Adolfo el que estrellaba el esférico en el palo tras una gran volea con la pierna izquierda. Cuando no habíamos llegado todavía a los 6 primeros minutos de juego de la segunda parte, Zicky marcó un gol que su compañero Tomás Paço le sirvió en bandeja. Ese tanto motivó al conjunto luso, que se volcó al ataque. Tan solo dos minutos después, Erick, de cabeza, en una jugada de estrategia, ponía las tablas en el luminoso. Tras el segundo gol, el equipo lisboeta le ganó la batalla psicológica al Barça que parecía hundido y Didac tuvo que hacer una parada de muchísimo mérito a Tomás Paço que había hecho un disparo que se colaba por la mismísima escuadra.
A falta de nueve minutos para el final, como era de esperar por el dominio que el Sporting estaba ejerciendo, João Matos pondría el 2-3 en el marcador, tras coger un rechace del disparo de falta directa de su compañero Taynan, que se estrelló en el palo. El conjunto español no bajó los brazos y el técnico culé a falta de poco mas de tres minutos para el final ordenó a Dani Shiraishi que saliese como portero-jugador, pero en la primera jugada, el Barça perdió el balón, Varela no perdonó y marcó el 2-4 a placer. Aun así el conjunto blaugrana siguió peleando, Ferrao, marcó tras un rebote el 3-4 a falta de tres minutos, que a la postre sería el resultado definitivo y el Sporting de Lisboa acabó llevándose el título.
Durante el partido hubo varias protestas hacia los colegiados y discusiones entre los jugadores, cuando finalizó el partido, se dio lugar a lo que se llama tangana, el lado feo del deporte que a veces sale a la luz.
Sean felices y disfruten de este deporte. ¡Viva el fútbol sala!
Ficha técnica:
Alineación Barcelona: Didac, Aicardo, Dyego, Ferrao, Marcenio.
Alineación Sporting de Lisboa: Guitta, Matos, Erick, Merlim, Vaz.
Árbitro principal: Nikola Jelic
Estadio: KreŠimir Cosic Arena.
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Imagen de: www.marca.com
