Fue una tarde entretenida — por decir lo mínimo- la del pasado domingo en el Heinz Field. El encuentro que enfrentaba a Steelers y Broncos fue de todo menos aburrido, manteniendo la tensión hasta los instantes finales. Graves lesiones de por medio, actuaciones inesperadas y sorprendentes por parte de role players y una falta de motivación hicieron de este un partido de lo más igualado. El encuentro fue para los locales, no sin sufrimiento de por medio. Lo más positivo para los Steelers, el resultado. En el caso de los Broncos, desgraciadamente ven como la lista de lesionados aumenta.
Los Broncos supieron utilizar sus cartas
El equipo dirigido por Vic Fangio se encontró con uno de los mayores reveses posibles en el primer cuarto, la lesión de Drew Lock. Tras solo cinco minutos de juego y tras un sack de Bud Dupree sufrió una lesión en el hombro que le apartará de dos a seis semanas de la competición. En esa misma jugada los Steelers lograrían un fumble cuya conclusión sería una anotación a la carrera de James Conner. Con un marcador 7-0 en contra de los Broncos y jugando fuera de casa salió al campo Jeff Driskel, quarterback reserva de Lock. Lejos de amedrentarse y pese a una intercepción — culpa de una dudosa recepción de Sutton-, realizó un más que solvente partido. Lanzó para un total de 256 yardas, dos touchdowns y hasta una conversión de dos puntos. A ello, añadir varias big plays que dieron síntoma de la confianza que desprende el jugador. Así, tras ir 17-3 y 26-14 abajo en el marcador, llevó al equipo a un 26-21 y un último drive para lograr la victoria.
Los Steelers viven de rentas
No fue finalmente así, tras conseguir detener el ataque de Broncos en un último y fatídico cuarto down con un sack de Terrell Edmunds. No obstante, y pese a lesiones graves de jugadores clave como Lock o Sutton, Denver debe quedarse con lo positivo. A la más que solida defensa se le debe unir la aparición — de nuevo- de dos jóvenes jugadores llamados a capitanear el ataque, Jerry Jeudy y Noah Fant. Solo un golpe — deportivamente dudoso- de Devin Bush impidió a Jeudy llegar a las 100 yardas en este encuentro. Por su parte, Noah Fant continuó dando buena muestra del estado físico y mental en el que se encuentra, consiguiendo una anotación y 57 yardas. Si pese a todas las bajas ya existentes y las nuevas este equipo pudo haber dado la sorpresa en Pittsburgh, es evidente que hay razones para el optimismo dentro de la situación del equipo.
Pittsburgh fue de más a menos
Todo parecía ir a favor de los Steelers al comienzo de este partido. A la lesión de Drew Lock y el fumble logrado le seguirían sendas anotaciones de James Conner y Chase Claypool — recepción increíble de 85 yardas-. Sin embargo, si eres seguidor de Pittsburgh y ves que tu equipo va 17-3 por encima en el marcador, sabes que al final vas a sufrir. Y efectivamente así fue, un ataque que comenzó muy bien se volvió en ocasiones inocuo, predecible para la defensa de Denver. A ello deben añadirse que se cometieron varios errores que metieron a Broncos en el partido. Big Ben, como su equipo, fue de más a menos. Una mala decisión en una mala lectura de campo provocó una intercepción para Denver, a lo que se debe añadir un fumble perdido por Benny Snell Jr. en una de sus carreras.
Cuidado con los altibajos
No fue tanto una inaplicación del playbook o malas ejecuciones sino la sensación de no estar mentalmente en el partido. El equipo dio la sensación de dejarse llevar en determinados momentos del encuentro, de relajarse, provocando ello una remontada de Broncos que casi se consuma finalmente. Por destacar aspectos positivos tanto en defensa como en ataque, hay jugadores que merecen especial mención. Comienzo por el rookie e infravalorado por muchos Kevin Dotson, quien tuvo que ocupar el lado derecho de una maltrecha línea ofensiva. El partido del joven fue muy sólido, llegando en ocasiones a parecer un veterano de la liga. Por el lado aéreo debemos hablar tanto de Diontae Johnson — movimientos vertiginosos, uno de los mejores retornando patadas de la liga- y Chase Claypool, quien ya dejó su sello en la liga. Apenas tres recepciones, pero siendo una de ellas de especial importancia al lograr anotar un touchdown de 85 yardas. Por la defensa, un gran papel de nuevo de la línea defensiva, capitaneada por un imperial T.J Watt que logró 2.5 sacks. En la secundaria, no fue el partido de Joe Haden ni tampoco el de Nelson, pero finalmente Pittsburgh salió airoso del duelo.
Ambos equipos necesitan ganar en la siguiente semana
Sí, todos los equipos necesitan ganar. No obstante, considero que las dos franquicias necesitan la victoria en la semana 3 — aunque por motivos distintos-. Los Steelers porque necesitan afianzarse como uno de los equipos llamados a pelear por postemporada, debiendo recuperar sensaciones. Qué mejor ocasión que ante unos Texans que llegan en un nivel de moral bajo a Pittsburgh. Por el lado de Denver, necesitan una victoria que les reubique en la clasificación divisional y les permita ir ganando confianza hasta la vuelta de Drew Lock.
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