Mi testimonio probablemente tenga un buen hueco en esta página web porque tanto mi mujer como yo somos muy seguidores de los deportes, incluso diría que forofos de los dos clubes de los que somos socios actualmente, el Aula Cultural Alimentos de Valladolid de balonmano femenino y el VRAC Quesos Entrepinares de rugby masculino en Valladolid, y ahora que están suspendidas todas las competiciones deportivas es un rollo; incluso yo escribo sobre el deporte del balón oval artículos en esta página, que me supone una buena forma de entretenimiento, pero como no hay partidos de rugby (bueno, y de ningún otro deporte), hay que reinventarse la manera de entretenerse sin salir de casa hasta que podamos volver a hacer vida normal.
La crisis que se nos viene encima
Lo cierto es que esta situación nos ha sobrepasado a tod@s, y con una gran crisis económica que va a generar esta epidemia de dimensiones descomunales.
Incluso un gran estamento como es el Gobierno de la nación en muchos momentos se ha visto desbordado.
Qué decir de la FER y otras Federaciones Deportivas, que en muchos casos se encuentran en la tesitura de no saber qué hacer con sus ligas, ya que la situación que ha provocado la epidemia del COVID19 es tan inusual e inesperada que ni el Consejo Superior de Deportes tiene legislado absolutamente nada para una situación como la que vivimos actualmente, por lo que las distintas federaciones actúan con las más diversas propuestas, aunque en todos los casos se aboga por llegar al final de la temporada, aspecto que cada vez es más improbable debido a que según pasan los días, se ve más lejano el fin del confinamiento.
Desavenencias en el mundo del rugby
En lo que respecta al rugby, incluso hay diferencia de criterios entre la FER y los clubes de División de Honor que dan por finalizada la temporada, cosa que en estos momentos me parece lo más correcto, con la incógnita de lo que ocurrirá con clubes que durante todo un año han estado luchando por meterse en las fases de ascenso, y que ahora no ven nada claro que se puedan desarrollar por culpa de esta maldita epidemia.
He visto a muchos deportistas haciendo ejercicio, de músicos, de gente aplaudiendo, y un largo etc, en vídeos para nuestro entretenimiento; ahora creo que yo también puedo aportar mi granito de arena para todas las personas a las que se las está haciendo excesivamente largo el periodo de confinamiento en sus casas.
Una vida cautiva, un confinamiento infernal
Yo soy muy discapacitado, y necesito ayuda para casi todo, y por eso vivo en una residencia porque mi mujer trabaja, además de que ella sola no podría ocuparse de todas mis necesidades.
Yo sufro lo que los médicos llaman síndrome de cautiverio, que viene a significar que ante la ausencia del habla y unos mínimos movimientos, mi cuerpo se convierte en una especie de prisíón para mis pensamientos que permanecen intactos sin sufrir ningún daño. Si yo he logrado evadirme de ese enclaustramiento durante casi 21 años, porque con la escritura puedo decir al mundo lo que pienso, unos pocos meses sin salir de casa no es nada en comparación con un cautiverio de los pensamientos en el cuerpo sin tener las ayudas técnicas apropiadas. Así que adelante compañer@s!
Una amiga con contagio leve hacía una crítica a vecinos suyos que no hacen caso al aislamiento decretado. Podría hablar más sobre esto, pero vamos, que la conclusión final es que lo mejor que podemos hacer es seguir aguantando sin salir a la calle, solamente lo imprescindible, por ti, por mí, y por tod@s tus compañer@s.
La verdad es que yo siempre me he considerado rarito, y así parece ser, porque al contrario que la mayoría que estáis cansados de no salir de casa, yo lo pasé peor al principio.
Ni mujer, ni escritura pero todo el ánimo del mundo
De pronto, un día se nos anuncia que yo no puedo salir de la residencia y que no podemos recibir visitas de absolutamente nadie, lo que incluía a mi mujer, y todo el mundo que nos conoce cree, por decirlo de algún modo, que ella y yo somos como una simbiosis de la misma persona, y cierto que eso me supuso un palo, porque deben de ser unos 25 días sin vernos, pero a mí me parece medio año, aunque como de todas las circunstancias hay que aprender, me he dado cuenta de que dependo demasiado de Puri, y en la situación actual de reclusión no me queda otra que subsistir por mi mismo.
Poco después se me estropeó el programa de escritura que estoy usando para escribir estas líneas.
Por la ley de murphy, que cada día estoy más convencido de que realmente existe, dos días después se me fastidió el ordenador completamente, que yo decía, y ahora cómo me entretengo?
La residencia por fortuna dejó que trajesen hasta la puerta para recogerlo el ordenador arreglado.
Mucho ánimo a todos
Yo estoy en una residencia para personas jóvenes con diferentes patologías que en la mayoría de casos suponen un factor de alto riesgo para contraer el coronavirus. Por fortuna, la dirección desde el principio dictó un protocolo bastante seguro y ningún residente se ha visto afectado por el virus, pero cuando lees o ves en medios de comunicación lo que está sucediendo en algunas residencias geriátricas te asustas un poco.
Ahora vivo el momento, que creo que es lo mejor que se puede hacer en estas circunstancias. Para los que se os está haciendo largo el encierro en casa, Puri y yo partimos con ventaja, pues debido a mi situación de gran dependiente hace tiempo que aprendimos a valorar las pequeñas cosas que tiene la vida, y eso creo que es lo que tenéis que hacer los que estáis agobiados por el confinamiento, aunque algún bajón se tiene como me ha sucedido a mí.
Ahora voy contando los días hacía atrás porque a final de mes es nuestro aniversario (joder 21 años aguantando el Charlie a la Puri, y ella aguantándome a mí).
Creo que aún estaremos encerrados, así que me tocará hacer una poesía porque poseo un gran talento poético jejeje. Que también es importante reírse en esta situación para evadirse algo de las noticias que vemos en los medios de comunicación sobre la pandemia.
Y nada, ya despedirme, que aunque nos cueste llevar el confinamiento, es la única medida que hasta ahora conocemos para evitar contagios. Sé responsable y quédate en casa.
Solo me queda reconocer el trabajo de todas las personas que trabajan en primera línea por nuestro bienestar en estos difíciles días.
A seguir con ánimo!!!!!
Y recuerda, #YoMeQuedoEnCasa
