Ya han pasado poco más de tres meses desde que se inició este 2019. Casi cuatro. Misma cantidad de tiempo lleva de iniciado el circuito masculino de tenis.
Este año pinta bastante distinto a otros comienzos de temporada pasados. Si a estas alturas en años anteriores ya se vislumbraba una tendencia sobre entre qué jugadores se iban a repartir los grandes trofeos y quiénes eran los que iban a pelear por todo, este comienzo de año está siendo bastante distinto.
Por ahora la gran protagonista está siendo la incertidumbre. Veremos si seguirá así o si algunos nombres lograrán vencerla.
En cuanto a los nombres de siempre:
Novak Djokovic terminó el 2018 ganando los dos últimos Grand Slam (Wimbledon y US Open) casi de manera contundente. Como lógico muchos daban por hecho que iba a ser el principal candidato a ganar el primer major de este 2019. Y así lo hizo frente a un renovado Rafael Nadal, que hizo un increíble AO19 en base a un juego mucho mas agresivo y con estreno de servicio incluido, pero que faltó a la cita final por el título, haciendo solo acto de presencia, como si de un mero espectador se tratase.
¿Qué paso después? Llegó el primer master 1000 de la temporada (Indian Wells) y sorpresivamente al serbio se le vio muy incómodo en los primeros partidos, además de apático, descoordinado, y sin timming, con una imagen totalmente opuesta a lo que había mostrado en aquella final en Australia. ¿Consecuencia? Derrota contundente frente Philipp Kohlschreiber por un doble 6-4 y un adiós prematuro a California.
En el día de este domingo, Djokovic venció a Federico Delbonis en su segundo partido del Miami Open y se puede confirmar que el serbio sigue en la misma línea que en su torneo anterior.
En cuanto a Roger Federer, este 2019 lo empezó pisando fuerte y jugando rapidísimo en el AO, para terminar cayendo sorpresivamente ante el griego Stefanos Tsitsipas en cuartos de final. Semanas más adelante logró seguir con su juego en esa misma línea y así llegó en Dubai el ansiado título numero 100 para él, tomando revancha precisamente frente al griego.
Pero esa línea se rompió también sorprendentemente, tras ganar el primer set de la final de Indian Wells, dándole la posibilidad al austríaco Dominic Thiem de levantar el primer master 1000 de su carrera.
En Miami, su debut frente al moldavo Radu Albot le costó mucho trabajo y su imagen no convenció a muchos. Habrá que ver cómo sigue Roger en su camino a una hipotética final.
Del Big4 ahora rebautizado como Big3 frente al anticipado retiro de Andy Murray, solo queda por hablar de Rafael Nadal.
Lamentablemente poco se puede decir sobre Rafa. Tras Australia voló a tierras mexicanas donde perdió en un partido rarísimo frente a Nick Kyrgios, pero del que pronto se olvidó e hizo olvidar a todos mostrando una mejor versión inclusive superior a la de comienzos de año, pero que lamentablemente se vio frenada por una nueva recaída de su rodilla derecha.
Lo normal sería verlo nuevamente listo para la gira de tierra batida que comienza en abril con en el master 1000 de Montecarlo.
Por último, de la Nextgen poco o mucho se puede esperar. Zverev, Thiem, Khachanov, Tsitsipas, y demás miembros se parecen a las luces intermitentes. Una semana se encienden pero a la siguiente se apagan.
La edad y el físico de Roger, las constantes lesiones de Rafa, y las caídas anímicas de Novak, fueron y son la llave que abrieron la puerta para que la incertidumbre dé un paso adelante.
Bienvenida a este 2019.
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Fuente de la foto principal: jumeirah.com
