En Sexto Anillo tenemos el placer de entrevistar a una tetracampeona de Europa, tricampeona del mundo y medallista olímpica.
Esta estrella del bádminton no dudó desde pequeña el cambiar el tablado flamenco por un pabellón, el traje de lunares por una raqueta y el alzar unas castañuelas por levantar medallas, y parece que este cambio no le ha venido nada mal a la campeonísima Carolina Marín.
Pregunta: Lo primero de todo, felicitarte por el Mundial conseguido recientemente y por el
Europeo. Hablemos primero del Mundial, cuéntenos ¿qué sintió al ganar, en qué pensó, de quién se acordó…?
Respuesta: Siempre que consigo un título me viene a la cabeza el trabajo que hemos hecho todo mi equipo y yo por llegar hasta ahí. Son semanas y meses complicados, de muchísimo trabajo por parte de muchas personas que se sacrifican para un único objetivo. Esos abrazos con Fernando y Anders nada más terminar el partido lo reflejan bien.
P: Según declaraste tras la final, has vivido un tiempo muy complicado, ¿cómo lo superaste y en quién te apoyaste?
R: Ha sido fundamental el apoyo de todo el equipo: entrenadores, fisio, compañeros, mi psicóloga… Hemos sabido corregir errores y modificar ciertas cosas que nos han permitido volver al camino.
P: ¿Cómo ha sido tú planificación para conseguir el Mundial?
R: Hemos adaptado mejor aún el trabajo psicológico y a nivel de trabajo en pista hemos focalizado aún más la preparación. Más allá de eso, hemos seguido entrenando dos sesiones por la mañana y una por la tarde.
P: Además del Mundial, también conseguiste el europeo, en tu país, en tu tierra y ante tu gente ¿Qué sensaciones tuviste durante el torneo?
R: Es uno de los torneos más especiales que he vivido. Fue una semana muy intensa y a nivel de competición, como ya dije, sentí que tenía que jugar casi dos partidos en vez de uno: contra la rival y contra mi mente. Sin embargo el día de la final me limité a disfrutar y gracias a eso todo salió mejor que ningún otro día.
P: Después de jugar las semifinales, saliste a firmar autógrafos y a fotografiarse con la afición ¿Hubo alguna frase de algún aficionado que te llamase la atención?
R: Ahora mismo no recuerdo ninguna frase, pero sí las sensaciones: toda esa gente era de mi ciudad, de donde me he criado… Y estaban allí para verme y hacerse una foto conmigo. Son cosas que una no llega ni a imaginar pero que te llenan más que muchas victorias.
P: “Puedo porque pienso que puedo” esa es una de sus frases más conocidas ¿quién se la dijo y en qué momento?
R: Fue una frase que desarrollé con uno de mis anteriores psicólogos, Pablo Del Río. Surgió a raíz de que una de mis virtudes es la fortaleza mental, hace ya varios años. Me acompaña porque creo que define bien mi manera de afrontar las competiciones y entrenamientos.
P: Ha jugado muchísimos torneos y partidos, seguro que tiene mil anécdotas para contar,¿con cuál de ellas se quedaría?
R: Uno muy curioso es que hace muchos años, sería por 2010, fuimos a disputar un torneo a Uganda y la competición se jugó en una especie de iglesia que había allí. Es de las situaciones más raras que he vivido (risas)
P: En las redes sociales se puede ver su amistad con Clara Azurmendi y Sara Peñalver ¿en este mundillo da tiempo para hacer amistad con las rivales o no?
R: Es que ellas no son rivales, ¡son mis compañeras! Son de las personas con las que paso más tiempo y compartimos muchas cosas. Respecto a las rivales, es difícil porque cada una miramos por nuestro propio interés y durante las competiciones apenas hay tiempo para desconectar, pero sí que hay jugadoras con las que tienes más vínculo y te llevas mejor.
P: La vida del deportista suele tener fecha de caducidad, esperemos que la suya sea lo más larga posible, pero… ¿te has planteado ya qué hacer una vez que decidas colgar la raqueta?
R: La verdad es que no. Me gustaría seguir ligada al bádminton, al deporte… Pero no me lo he planteado demasiado. ¡Bastante tengo con pensar en lo que me toca al día siguiente! (risas)
P: ¿Quién le ha dado uno de los mejores consejos en su vida profesional y personal? ¿Cuáles
fueron?
R: Fernando, mi entrenador, me ha dado cientos de ellos. Es una persona que gestiona muy bien la manera de comunicar y eso ayuda a que su mensaje llegue mejor. Cuando era pequeña, me sacó a la pista de atletismo del CAR para hacerme ver que mi trayectoria para conseguir lo que quería era como la pista de 100 metros: un camino del que cuanto menos me desviase, menos difícil sería llegar a la meta.
P: ¿Y cuál le darías tú a las nuevas generaciones?
R: Que más allá de los objetivos que se marquen en la vida, intenten disfrutar de esa trayectoria hasta conseguirlos. No siempre es fácil, claro. Pero a mí me ha servido para darle aún más valor a lo que he obtenido.
P: Tras el éxito del Europeo de Huelva ¿Crees que España está capacitada para organizar un Máster Serie 1000?
R: De momento se ha conseguido organizar un Europeo y un Super 300. Llegar al punto que comentas es como plantear que en España se organice un Grand Slam de tenis, por lo que lo veo difícil, pero sí que se puede seguir creciendo.
P: Te tengo que reconocer que en las semifinales y en la final mi asiento estaba entre tus tíos, primos (por cierto, me faltó poco para llevarme a tu tía abuela a mi casa, -risas-)…¿Cómo de importante ha sido tu familia en tu vida personal y profesional?
R: Son fundamentales. Precisamente porque paso mucho tiempo alejada de ellos, valoro mucho más lo que representan para mí. Les echo muchísimo de menos, por eso intento disfrutar al máximo el poco tiempo que paso con ellos a lo largo del año.
P: Has fichado por el CB Pitiús de Ibiza, allí estarás con tus amigas Sara y Clara, cuéntanos como se fraguó el fichaje y cómo te decidiste a volver a la Liga española.
R: Para mí es una oportunidad de volver a jugar en la liga española y esa ha sido la gran razón para decidirme. Después de lo que viví en el Europeo quería hacer algo para competir en España más a menudo y surgió esta posibilidad. Además, Ernesto García ha sido muy importante ya que me conoce bien y también sabe las necesidades que tengo de competiciones internacionales. Y encima compartiré equipo con muchos compañeros y amigos de la Blume, como dices. Era difícil decir que no sabiendo que se daban las circunstancias necesarias.
P: Para terminar, permíteme proponerte un juego de respuestas cortas que nos permita conocer mejor a la Carolina como persona.
Una comida: El jamón de Huelva y la gamba de Huelva, no puedo elegir sólo uno.
Un libro: No sé decir uno en concreto, seguramente alguno de autoayuda.
Una serie: Merlí.
Una película: Diamante de sangre
Un lugar donde perderte: Una isla paradisiaca de Indonesia o Tailandia.
Un hobbie: Pasar el tiempo y pasear con mis perros.
Una superstición: No soy supersticiosa, la verdad. Siempre juego con la medalla de la Virgen del Rocío, pero es más una manera de llevar conmigo mis orígenes.
Una manía: Antes de cada partido sigo una rutina, aunque no es muy llamativa: antes del sorteo bebo agua, luego calentamos y justo antes de empezar vuelvo a refrescarme y secarme el sudor.
Hasta aquí la entrevista con una gran persona y una gran profesional, muchas gracias por esta entrevista.
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