El croata vuelve a estar entre los nominados otro año más, y no es para menos. Campeón de Liga y Europa con el Real Madrid, donde ha sido clave para Zidane.
Sexto Anillo continúa su repaso a la lista de treinta futbolistas candidatos a lograr el mejor trofeo a nivel individual en el mundo del fútbol: el Balón de Oro. Pese a ser una batalla que se disputará, probablemente, entre Cristiano Ronaldo y Leo Messi, hay otros veintiocho futbolistas que merecen una mención especial por su trabajo a lo largo de todo el año. Hoy nos vamos a centrar en la figura de Luka Modric.
Un tipo distinto, pausado, con mucha calma y que sabe muy bien lo que hace dentro del rectángulo de juego. El Madrid y la Selección Croata juegan al ritmo que marca Modric. Es el director de orquesta, el hombre que siempre encuentra el último pase, el desborde necesario para crear peligro. Clave en el Real Madrid, el croata ya es uno de los auténticos ídolos del Bernabéu. Su calidad es increíble, posee un talento al que solo unos pocos llegan y visión de juego envidiable. Además, muchos sostienen que, aparte de ser un gran futbolista, hace buenos a los que tiene a su alrededor.
Desde su llegada al Real Madrid, nadie duda que el futbolista croata ya es el jugador más importante de la plantilla después de Cristiano Ronaldo, en el mismo escalón que el capitán Ramos. Porque el equipo merengue juega mejor con él. Modric hace el fútbol, y Zidane lo sabe. No hay duda de su titularidad. Es un jugador ‘10’, como el número que porta en su camiseta.
Los 42 millones de euros que Florentino pagó por él en el año 2013 se han amortizado muy bien. Porque siempre ha jugado. Ha sido uno de los fijos para Mourinho, Ancelotti, Benítez y Zidane. Precisamente, con este último ya ha hecho historia, levantando dos Champions consecutivas. Pero aparte de la máxima competición continental a nivel de clubes, Modric ha levantado, este año, LaLiga y las dos Supercopas, teniendo el Mundial de Clubes entre ceja y ceja el próximo mes de diciembre.
La importancia de Modric en Croacia
Además, Modric también es uno de los fijos dentro de Croacia. Acaban de sellar su pase a la repesca para el próximo Mundial de Rusia, donde Modric será uno de los grandes atractivos si logra superar esta última fase. El combinado rojiblanco es consciente de la importancia de tener un futbolista de semejante talento entre sus filas. Porque Modric, además de ser un gran pasador también tiene llegada. Y siempre que el balón toca la red después de haber salido de sus botas, rara es la vez en la que no hablamos de golazos.
Imagen destacada: everardoherrera.com
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