El Gran Premio de Bakú no defraudó. Es más, saltaron chispas. La carrera tuvo de todo: adelantamientos, choques, safety cars, incluso una bandera roja. En medio de este caos, Daniel Ricciardo sacó provecho y ganó la carrera más agitada del año.
La acción más destacada del Gran Premio fue el doble accidente entre Lewis Hamilton y Sebastian Vettel cuando se iba a relanzar la carrera después de uno de los periodos de safety car.
Tras la carrera también saltaron chispas. Hamilton y Vettel dieron su punto de vista sobre el accidente. El alemán comprende que sea el líder el que marque el ritmo pero “en una curva así creo que no era necesario. La Fórmula 1 es para los adultos. No ha tenido sentido. He ido a su lado y luego hemos tenido un pequeño contacto. No estoy de acuerdo con la sanción, tendrían que habernos sancionado a los dos’” Por su parte, Hamilton se defiende: “he hecho lo mismo que en otros safety car. Si Vettel tiene algún problema que venga a decírmelo fuera de la pista”.
Según el reglamento, cuando el safety car apaga las luces el primer monoplaza puede marcar el ritmo. Es entonces cuando Hamilton frena bruscamente para calentar los frenos y Vettel entiende que lo ha hecho intencionadamente. El de Ferrari entonces acelera hasta ponerse al lado del Mercedes y le golpea rueda contra rueda. Vettel fue sancionado durante la carrera con un Stop and Go de 10 segundos y posteriormente la FIA decidió retirarle 3 puntos de su licencia.
Después del altercado sucedido en Bakú, la FIA debe plantearse ser más estricta. Más de una vez los pilotos, han sobrepasado la línea de la legalidad. Un buen ejemplo son los insultos por radio del alemán de Ferrari, el año pasado, al director de carrera, Charlie Whiting. Estos gestos antideportivos no deben permitirse para evitar que estas acciones se puedan repetir en categorías inferiores
Lance Stroll también fue protagonista. En este caso por realizar una carrera sin errores que le permitió acabar tercero. Con este resultado, el rookie canadiense es el segundo piloto más joven en subir al podio, tras Max Verstappen. Stroll iba a finalizar segundo pero Valtteri Bottas le arrebató esa posición sobre la línea de meta.
En Force india sigue la ‘guerra’ entre los pilotos. La tensión vivida en Canadá reapareció durante la carrera de Bakú. Tenían opciones de podio pero el accidente en el que ambos se tocaron les dejó sin ninguna posibilidad. Checo Pérez, que iba por el exterior no tenía más espacio, fue por tanto Ocon el culpable de este choque, podía haberle dejado más espacio a su compañero de equipo.
Por su parte, los españoles hicieron una carrera sin accidentes ni errores que les llevó a ambos a los puntos, no sucedía desde Brasil 2016. Sí, también Fernando Alonso acabó en los puntos. Son los primeros que consigue McLaren este año, pero el asturiano quería más: “era una carrera que podríamos haber ganado en condiciones normales. Hoy hemos ganado posiciones gratis pero es una pena no poder aguantarlas por las deficiencias que tenemos”.
Los 25 puntos de esta carrera, en la que hubo 137 adelantamientos, se los llevó Ricciardo que supo pescar en río revuelto. El australiano se llevó la victoria pese a tener que adelantar su parada. El propio Ricciardo no se creía el resultado. “Es una locura conseguir cuatro podios seguidos. Estamos muy contentos, hemos hecho todo lo que podíamos para conseguir la victoria”.
Se termina otro fin de semana más de Gran Premio. Bakú nos ha dejado la que se puede considerar como la carrera más emocionante de lo que llevamos de campeonato. El siguiente capítulo se escribirá dentro de dos semanas en Austria donde continuará la guerra Ferrari-Mercedes y quién sabe si volverán a saltar chispas.
__
Imagen destacada vía: motor.es
Pueden seguirme en Twitter: @rafamc119 y a Sexto Anillo: @SextoAMotor y @SextoAnillo. También estamos en Instagram y en Facebook
