La Juve está a un paso de una nueva final de Champions, la 2ª en 3 años. Se la juega ante un Mónaco al cual ya eliminó en esta ronda hace 2 décadas y dónde, salvo sorpresa, se enfrentará al mismo rival que entonces, el Real Madrid.
Tres goles son los que tiene que marcar el joven y descarado Mónaco en el inexpugnable Juventus Stadium para impedir la Vendetta de los Italianos en la final, algo difícil teniendo en cuenta que la Juve solo ha encajado 1 gol en 5 partidos como local en Champions.
Para Jardim, la diferencia en Mónaco la marcó la eficacia Juventina, que disparó 5 veces a la portería de Subasic y le hizo 2 goles. Eficacia que le faltó al Mónaco y que necesitará en Turín para darle la vuelta a una eliminatoria que parece sentenciada, pero Allegri no se fía.
En el Derby della Mole, la Juventus reservó a la mayoría de sus estrellas, dando pistas sobre quién jugaría la decisiva vuelta en Turín, por lo que los planes del técnico Italiano pasan por un 3-4-1-2, que en muchos momentos se convierte en un 5-3-2, con Sandro y Alves incrustados en una defensa de 5, e incluso en un 4-4-2 cuando el rival pasa la línea de presión, con Alves o Sandro incorporándose a la línea de 4 del centro del campo. Un planteamiento similar al de la ida, con el único cambio de un Khedira sancionado en la ida y que saldrá por un voluntarioso Marchisio, con el objetivo de frenar a la juventud que nutre en gran parte el 11 de Jardim y convertir, como en la ida, la precipitación de sus acciones y su necesidad de marcar en arma letal para volver a generarles problemas en forma de espacios.
En la ida el Mónaco no supo aprovechar las múltiples transiciones defensa – ataque que hizo la Juve con sus distintas variantes en gran parte por la gran velocidad en la que realizaban sus ataques, con pocos jugadores, en 3 o 4 toques. La Juve no se descompuso.
Jardim deberá vigilar de nuevo los laterales, claves en la ida y encontrar una solución arriba para encontrar a Falcao, que sufrió un férreo marcaje al hombre por Bonucci y sobretodo, por Chiellini.
La Juventus se siente cómoda con el balón y sin él, su capacidad camaleónica para aclimatarse a los partidos y a sus fases les hace ser un rival rocoso y difícil de superar. Allegri no tocará unas piezas que le dieron un efectivo resultado ante un Mónaco que dio buena imagen, pero que no supo materializar las ocasiones derivadas de individualidades a la Juve en forma de gol y ahora se la juega a la desesperada a sabiendas de que un gol dejaría muy tocados a sus inexpertos jugadores en el mayor fortín de Europa.
Posibles 11:
Juventus: Buffon; Barzagli, Bonucci, Chiellini; Alex Sandro, Alves, Pjanic, Khedira, Mandzukic; Dybala e Higuain.
Monaco: Subasic; Dirar, Glik, Jemerson, Sidibé; Bakayoko, Fabinho, Silva, Lemar; Mbappé y Falcao
Estadio: Juventus Stadium
Árbritro: Björn Kuipers
Imagen desatacada: WordPress.com
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