Jo-Wilfried Tsonga no se conformó con alcanzar las 400 victorias en el circuito ATP. Estaba a un paso de conseguir el título número 13 de su carrera, y enfrente tenía a David Goffin, quien estaba listo para impedirlo.
El partido no empezó bien para Tsonga. Goffin jugó un gran nivel en el primer set, donde puso en complicaciones al francés cuando éste se encontraba con el servicio. El belga fue agresivo en la devolución y consiguió dos quiebres de servicio. A pesar de perder su servicio en una ocasión, la ventaja fue suficiente para hacerse con el primer set del partido 6-4, para colocarse a una manga de distancia del título.
Sin embargo, Tsonga supo componer las cosas en el segundo set. Comenzó a sacar mejor y se concentró en ese aspecto, ya que no cedió siquiera una oportunidad para que Goffin le quebrara el servicio. Por el contrario, el belga enfrentó cinco break points en contra, de los cuales salvó cuatro. Pero solo un quiebre fue suficiente para que el francés marcara diferencia en el segundo parcial, y también con un 6-4, enviara el partido a un tercer y definitivo set.
El nacido en Le Mans pareció haber mejorado aún más en el tercer set. Fue directamente al 5-0, ventaja que ya parecía bastante difícil de superar para Goffin. No solamente por el hecho de que se encontraba dos breaks abajo, sino por el gran tenis que el francés desplegaba en aquel momento del partido. El belga fue completamente superado por Tsonga, quien ganó el tercer set con un 6-1 final para sellar la victoria y asegurar su primer corona en Rotterdam.
En una hora y 55 minutos Jo-Wilfried Tsonga pudo obtener el título que seis años atrás se le había negado, cuando perdió la final ante Robin Soderling. También, el francés obtuvo su segundo título en un ATP 500, después de haberlo logrado en Tokio 2009, donde venció a Mikhail Youznhy. Para ganar el título, Tsonga tuvo que imponerse a figuras como Tomas Berdych y Marin Cilic a lo largo del torneo, tenistas que están por encima del francés den el ranking ATP. Además, el francés terminó con una sequía de dos años sin un título.
Por otro lado, no todo fue malo para David Goffin. A pesar de haber perdido su sexta final consecutiva, y de no ganar un título desde el 2014, el belga aseguró su lugar dentro del top 10 del ranking ATP, esto después de haber ganado la semifinal que lo puso en posición para pelear el título. La presencia de Goffin dentro de los 10 mejores es algo histórico par Bélgica, ya que es el primer tenista de este país en conseguir esa hazaña.
Foto principal vía: Henk Koster
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