La selección española de rubgy ha caído este fin de semana frente a Rumanía por 13-3. España afrontaba en Bucarest el partido más difícil de toda la fase de clasificación para el Mundial. Rumanía, pese a la sorprendente derrota contra Alemania la pasada jornada, sigue siendo la favorita para hacerse con la plaza de clasificación directa a Japón 2019.
Ya desde el inicio se vio sobre el campo a un equipo rumano con ganas de enmendar el resultado negativo frente a los teutones. Apenas habían transcurrido dos minutos cuando dispuso de la primera ocasión para abrir el marcador con un golpe de castigo cercano a la línea de mediocampo. Afortunadamente para los Leones, la patada quedó corta y el marcador no se movería.
España, muy seria en defensa como viene mostrando en los últimos partidos, aguantaba las acometidas de la delantera rumana. Sin embargo en el minuto 13, los Robles dispusieron de una touch a 5 m de la línea de marca española que no desaprovecharían. Jugada de libro rumana: touch, maul y ensayo del primer centro Vlaicu que él mismo transformaría para dejar el marcador en 7-0.
Sólo cinco minutos después España respondería al ensayo con una patada de Brad Linklater que ponía el 7-3. Lamentablemente, no fue capaz de repetir posteriormente en el minuto 24 y el partido mantendría ese 7-3 a favor de los rumanos, que dominaban la posesión.
A partir de ahí se vivirían los peores minutos de España en el encuentro. Varios errores consecutivos ponían en bandeja el 10-3 a Vlaicu con un golpe de castigo en 22 propia en el minuto 28. Pudo ser aún peor sólo 5 minutos después, cuando los Robles se plantaron con una touch a favor en la 22 española. Sin embargo, una defensa impresionante de los Leones logró contener las embestidas de los delanteros rumanos prácticamente sobre la línea de ensayo, logrando recuperar finalmente la posesión tras un avant de los tres cuartos locales.
España consiguió llevar el juego hasta la 22 rumana justo antes del descanso, pero un error en una touch a favor privó a equipo español de poder recortar las distancias antes del pitido del árbitro. Se llegó por tanto al final del primer tiempo con un 10-3 a favor de Rumanía.
El inicio de la segunda mitad se caracterizó por los numerosos errores de los dos equipos. Pérdidas de balón constantes por parte de ambos sin un dominador claro de la posesión, aunque mayoritariamente en campo español. Así hasta el minuto 56, cuando los rumanos dispusieron de un golpe de castigo en campo rival que de nuevo pasaría entre palos Vlaicu. El marcador mostraba un 13-3 que alejaba a España del bonus defensivo.
El XV español se mostraba muy atascado con el balón en las manos. Apenas creaba peligro en ataque y era continuamente arrastrada a su propio campo por Rumanía.
El partido pudo cambiar en el minuto 70 con un ensayo español. Sin embargo, tras consultar con su asistente, el colegiado del encuentro anuló la marca española por un avant en un placaje en el centro del campo.
A partir de ahí, Rumanía intentó que el partido se jugase en campo español. Y lo consiguió. España aguantaba bien en defensa pero no era capaz de salir de su propio campo, donde terminaría muriendo el partido con el resultado final de 13-3.
Mal resultado para el equipo español de cara a obtener la clasificación directa para el Mundial de 2019. El mensaje positivo que nos deja el partido es la buena actuación defensiva de los Leones, evitando que Rumanía consiga el punto bonus ofensivo como había ocurrido en las anteriores visitas a Bucarest. La conclusión negativa del encuentro, además del resultado, es que a España le sigue costando muchísimo hacer puntos, algo que hay que mejorar de cara a los partidos del mes de Marzo.
En dos semanas Medina del Campo acogerá el España-Georgia que recordemos no es puntuable para el torneo clasificatorio al estar los georgianos ya clasificados. Alemania fuera y Bélgica en casa son las próximas citas clave para el equipo español en su camino a Japón, donde debemos hacer valer la fantástica victoria contra los rusos en la jornada inaugural.
FICHA TÉCNICA:
Partido disputado en el Estadio Arco del Triunfo de Bucarest.
RUMANÍA: 1. Mihaita Lazar (C), 2. Otra Turashvili, 3. Andrei Ursache, 4. Valentin Poparlan, 5. Johannes Van Heerden, 6. V. Lucaci, 7. Vlad Nistor, 8. Dorin Iazar, 9. Florin Surugiu, 10. Luke Samoa, 11. Stephen Shennan, 12. Florin Vlaicu, 13. Jack Umaga, 14. Ionut Dumitru y 15. Catalin Fercu.
SUPLENTES: 16. Marin Capatina, 17. Constantin Pristavita 18. Alexandru Tarus, 19. Ionut Muresan, 20. Andrei Gorcioaia, 21. Valentin Calafeteanu, 22. Madalin Lemnaru, 23. Jody Rose
ESPAÑA: 1. Fernando Martín López, 2. Beñat Auzqui, 3. Jonathan García, 4. Ignacio Villanueva Martín, 5. David Barrera, 6. Pierre Barthere, 7. Gautier Gibouin, 8. Jaime Nava (C), 9. Guillaue Rouet, 10. Mathieu Belie, 11. Jordi Jorba, 12. Thibaut Alvarez, 13. Fabien Perrin, 14. Javier Carrión y 15. Bradley Linklater.
SUPLENTES: 16. Francisco Olano, 17. Sthepen Barnes, 18. Alberto Blanco, 19. David Gonzales, 20. Víctor Sánchez, 21. Sebastien Rouet, 22. Daniel Snee, 23. Silvio Castegioni
Árbitro: E. Rizzo (ITA)
Anotaciones: 7-0 (min. 14) Ensayo de Florin Vlaicu que transforma él mismo. 7-3 (min. 19) Golpe de castigo de Bradley Linklater. 10-3 (min.28) Golpe de castigo de Florin Vlaicu. 13-3 (min. 56) Golpe de castigo de Florin Vlaicu.
Foto vía: www.ferugby.com
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