El Grupo A del Europeo de Balonmano Femenino de Suecia 2016 tiene como claras favoritas a las anfitrionas. Junto a las suecas, lucharán por una plaza en la Main Round nuestras guerreras de la selección española (actuales subcampeonas de Europa), la siempre peligrosa selección Serbia (venida a menos por las bajas) y la incógnita de Eslovenia que regresa a un Europeo tras seis años (dos ediciones) de ausencia.
Un diciembre más los aficionados al balonmano volvemos a tener una cita ineludible en el calendario, en este caso (como cada dos años) un nuevo campeonato de Europa de selecciones en el que nuestras guerreras tienen la dificil misión de volver a luchar por las medallas. A juzgar por la igualdad presente en el balonmano femenino del viejo continente con selecciones emergentes, unidas a las de siempre, la empresa se presenta harto complicada. A continuación les presentamos el Grupo A de la competición en el que España se verá las caras con las anfitrionas de Suecia, Serbia y Eslovenia. El domingo día 4 se dará el pistoletazo de salida con los encuentros Serbia-Eslovenia y Suecia-España; el grupo A se disputará en el añejo Hovet Arena de Estocolmo inaugurado en 1955, con capacidad para 9.000 espectadores y habitualmente destinado a la práctica del hockey sobre hielo.
Suecia: Aprender a vivir sin Linnea
Suecia será el primer rival de España en el campeonato y defenderá la medalla de bronce lograda en 2014. A los mandos de la selección local se encuentra Henrik Signel desde los Juegos Olímpicos de Río, cargo que compatibiliza con el de técnico del IK Sävehof. La principal novedad de la lista sueca es la ausencia de la veterana Linnea Torstensson que no atraviesa su mejor estado de forma. Una vez más, el éxito de las suecas dependerá del rendimiento de Isabelle Güllden. La genial central del campeón de Europa, el CSM Bucuresti, defiende, lanza, golea y asiste como pocas, además de ser un verdadero quebradero de cabeza para las defensas rivales por su envergadura y agilidad de movimientos; todo el juego en estático de Suecia pasa por la gran Bella y más aún, si cabe, tras la baja por lesión de su acompañante en la dirección de juego Johanna Ahlm.
El juego sueco se caracteriza por una férrea defensa en 6:0 y los rápidos contragolpes. Sabina Jacobsen y Linn Blohm tendrán que sobreponerse a la ausencia de Torstensson para garantizar el poderío defensivo, base del juego de las de Signel. La defensa es la principal arma de las nórdicas, puesto que permite las fulgurantes salidas al contragolpe de las veloces extremos Louise Sand y Nathalie Hagman.
En el debe de esta selección sueca encontramos la ausencia de una zurda de garantías en el lateral ya que la única jugadora específica es la jovencísima (20 años) Hanna Blomstrand, lo que provoca que Hagman deba disputar algunos minutos en dicha posición, perdiendo su efectividad desde el extremo y resultando más previsible su juego.
En definitiva, una selección que quizá no esté entre las mejores de este campeonato pero que, sin duda, espoleadas por un público que se va a volcar con ellas se convierten en favoritas para luchar por las medallas.
Serbia: Equipo renovado
Si hablamos de una selección Serbia sin la gran Andrea Lekic, está claro que podemos pensar que un equipo sin una de las mejores jugadoras del mundo pierde gran parte de su poderío. Sin embargo, cuando nos referimos a un equipo balcánico siempre hay que estar con las orejas tiesas. Serbia es un bloque de calidad que, pese a no contar ya con Lekic, tiene recursos suficientes para poner contra las cuerdas a cualquier rival. Con la fenomenal ex-portera Dragica Djuric en el banquillo, el plus de competitividad está asegurado. En la cancha, sus jugadoras más destacadas quizá sean la habilidosa extremo zurda Katarina Krpez (habrá que ver si está totalmente recuperada de su lesión) y la menuda central Kristina Licevic. Pop-Lazic es una buena pivote y apunten un nombre; el de Andjela Janjusevic en el lateral derecho.
El planteamiento serbio ha cambiado notablemente con la ausencia de Lekic dejando paso a un juego más de equipo en el que ninguna jugadora acapara el juego ofensivo. De hecho veremos un conjunto con mucho movimiento de jugadoras durante los 60 minutos. Constantes cruces y un juego más profundo que no destaca especialmente por sus lanzamientos exteriores.
Sin embargo el cambio más importante se produce en la defensa donde la ausencia de la gigantona Cvijic (al igual que Lekic ha dejado la selección) ha provocado dicho cambio. Del 6:0 que acostumbraba a utilizar Serbia con la jugadora de Buducnost “repartiendo estopa” a diestro y siniestro, se ha pasado a defensas más profundas y agresivas con las laterales contrarias, llegando incluso a parecer un 3:3 o un 4:2. Pop-Lazic se ha convertido en uno de los baluartes de dicha defensa.
Por lo tanto mucho ojo con Serbia a la que nunca hay que menospreciar y que estará a buen seguro en un nivel aceptable sin ser un equipo que pueda llegar muy lejos en la Main Round.
Eslovenia: ¿La cenicienta?
La joven selección eslovena es, sobre el papel, el rival más débil e inexperto del grupo de España aunque, como en el caso de Serbia, conviene no desmerecer a un equipo con jugadoras de calidad y acostumbradas a competir a un buen nivel. Tras dos europeos de ausencia, Eslovenia, en manos de Uros Breger, técnico del otrora grande de Europa Krim Mercator, vuelve a estar entre las 16 mejores del viejo continente. Un equipo inexperto en el que destaca, por encima de otras jugadoras, la lateral del Metz, Ana Gros. La zurda, a sus 25 años, ha jugado en los mejores equipos de su país y actualmente lidera al equipo galo que se ha convertido en una de las revelaciones de la Champions hasta el momento. Gros es una jugadora explosiva, con un gran uno contra uno y buen lanzamiento de media distancia. Sus otras jugadoras destacadas son la lateral del Vardar, Barbara Lazovic y la central Nina Jericek que pone el punto de veteranía al equipo de Breger.
Si nos ceñimos al juego, hablamos de un equipo con una defensa 6:0 amenazante sobre la primera línea rival buscando siempre el robo de balón; con extremos veloces y que se encuentra como pez en el agua jugando al contraataque y al contragol. Transiciones rápidas que pueden traer complicaciones a equipos como España al que cuesta el repliegue. En la portería, ojo con Misa Marincek, cuando está de dulce es prácticamente imbatible.
En ataque estático casi todo (por no decir todo) el peligro viene por el flanco derecho, donde las zurdas Lazovic y Gros hacen gala de su calidad.
En resumen, una selección la eslovena que tiene como objetivo tratar de hacer un buen balonmano e ir mejorando de cara a un futuro prometedor. En principio tendrá difícil su acceso a la Main Round pero cuidado que alguno puede llevarse una sorpresa.
España: Guerreras “renovadas”
Imágenes: http://swe2016.ehf-euro.com/
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