Esta semana en “La Sonrisa del Jugón” hablamos de un auténtico crack, un jugador polivalente que con su juego ha enamorado a toda la NBA y que ha demostrado no tener límites cuándo está en medio de la pista. Hablamos del ambicioso jugador: Russell Westbrook.
Russell Westbrook nació el 12 de noviembre de 1988 en Hawthorne (California) y es el base titular de los Oklahoma City Thunder. Su historia comienza después de la muerte de su mejor amigo de la infancia, Barrs a los 15 años. Westbrook, que no era ni titular en su equipo, se decidió a empezar a jugar para la Universidad de UCLA, con un solo propósito: ser el mejor. Para ello se entrenó con su padre tirando a canasta horas y horas, hasta que todo ese esfuerzo obtuvo su recompensa cuando después de promediar 12 puntos y 4 asistencias por partido en la universidad de UCLA, le draftearon en el puesto número 4 para los Seattle Supersonics en el 2008. Ese año los Supersonics se trasladarían a Oklahoma y pasarían a ser el Oklahoma City Thunder actual que ha llevado a Westbrook hasta lo más alto.
Ya en sus primeros años en Oklahoma, Westbrook destacaba y se hacía con mucho liderazgo en su equipo junto a su compañero Kevin Durant. El equipo iba mejorando a grandes pasos y jugarían sus primeros playoffs en 2010 con Russell Westbrook promediando 20 puntos, 6 asistencias y 6 rebotes por partido. Westbrook dejó huella en la NBA ya en 2011 cuándo se convirtió en uno de los cinco jugadores que en sus primeros 3 años en la liga han podido anotar 4000 puntos, capturar 1000 rebotes y repartir 1500 asistencias.
Los Thunder en 2012 acabaron llegando hasta la Final de la NBA, en la que perderían contra los Miami Heat de Lebron, Wade y Bosh 4-1 y donde Westbrook haría barbaridades como anotar 43 puntos en el cuarto partido. Pero esa final no fue la única buena noticia ese año, los Oklahoma City Thunder al ver la gran progresión del base californiano le ofrecieron una multimillonaria renovación que este no dudaría en aceptar y que, por lo tanto, ponía a Westbrook como uno de los jugadores con más futuro de toda la NBA, cosa que se ha hecho realidad en estos últimos años haciéndose por ejemplo 2 veces con el MVP del All-Star NBA (2015, 2016) o haciendo triples-dobles imposibles como 25 puntos, 20 asistencias y 10 rebotes en un partido, cosa que no se había visto en los últimos 28 años. Y es que Westbrook se ha consolidado como una máquina de hacer triples dobles, acabando con 18 esta última temporada.
A Westbrook hay que añadirle también su palmares con la Selección Absoluta de Estados Unidos, con la que se ha colgado la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Londres en 2012 y en el Mundial de Turquia en 2010, compartiendo equipo con muchos de los mejores jugadores de la talla de Stephen Curry, Andre Iguodala, Rudy Gay o Derrick Rose.
Y no solo impacta dentro de la pista, Westbrook ha sido estos años el jugador más llamativo y espectacular en cuanto a su look y vestuario en la NBA. Sus prendas no han dejado indiferente a nadie y él ha demostrado no tener ningún tipo de complejo a la hora de elegir su vestuario, que siempre da que hablar. Él mismo aclara “Igual que me gusta el baloncesto también amo la moda. Es algo que me inspira y que espero que en unos años pueda desarrollar más”. Sin duda un hombre elegante donde los haya y que le convierte en el jugador mejor vestido de la NBA.
Y así es Russell Westbrook, un magnífico jugador con una emotiva historia detrás y que ya no sabemos como nos puede ya sorprender en medio de una pista de baloncesto, con su pulsera en la muñeca izquierda con las iniciales “KB3” para el recuerdo de su mejor amigo fallecido y con su infinita ambición, es sin ningún lugar a duda un auténtico jugón.
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Foto destacada Vía: ftw.usatoday.com
