El tenista austriaco ha conseguido hacerse con la final del torneo alemán derrotando al local Philipp Kohlschreiber, en dos días de partido, por (2)6-7 6-4 6-4.
Habiéndose suspendido por cuestiones meteorológicas, la final del torneo alemán en hierba debía de finalizarse esta misma mañana en las pistas de la curtida Stuttgart Mercedes Cup. Era el Tie-Break del primer set cuando el juez decidió poner fin al intercambio de golpes entre el alemán y el austriaco, marcando este hecho un punto de inflexión claro que podía hacer que se volviese al marcador sin apenas inercia de lo que estaba sucediendo.
Así pues, a las 10:30am dio comienzo el choque de nuevo, claro está, sin el mismo público que el día anterior y con un resultado muy adverso para Dominic, quien caería en el primero por 7-2 en la muerte súbita. Sin embargo, estas adversidades no le hicieron rendirse y sí sacar su bestia más fuerte, esa que le permitió hacer de un cambio de horario toda una gloria.
Se defendió como ninguno de las cinco quiebras planteadas por su rival, aprovechando a la vez las que él creaba para llevarse por la mínima las dos mangas que le otorgaban el placer de levantar otro entorchado. Tras haber eliminado a Roger Federer en unas semifinales jamás vistas (3-6 7-6(7) 6-4), nuevamente volvía a lucir con su trofeo habiendo remontado el primer parcial en contra.
Será este el cuarto torneo conquistado en lo que llevamos de 2016, dado que ya consiguió la corona en Acapulco, Buenos Aires y Niza, además de unas semifinales en Roland Garros que no pasan desapercibidas para este nuevo Top 10 que apunta excesivamente alto.
Imagen: www.mundodeportivo.com
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