Los octavos de final del Open de Australia nos han dejado un torrente de emociones en forma de partidazos, sorpresas inesperadas y hasta polémicas para debatir. Así han ido los partidos, disputados entre ayer domingo y hoy lunes:
El “niño” del tenis doblega al maestro búlgaro
Primer partido, primera sorpresa. El joven norteamericano Frances Tiafoe, llamado probablemente a grandes cosas en el tenis, se deshizo de Dimitrov, que venía jugando bastante bien en las primeras rondas, si bien no había tenido ningún rival de entidad. El de Orlando, sin embargo, ya nos había impresionado dejando fuera del Open de Australia primero a Anderson y acto seguido a Seppi. El partido con Dimitrov estuvo marcado por el saque de ambos, con mucha igualdad, pero con Tiafoe manteniéndose firme en los momentos importantes. Grigor no pudo o no supo recuperarse, y a pesar de hacerse con el tercer set en un intento de comenzar la gran remontada, claudicó en el cuarto frente al empuje de Frances, que se verá las caras nada menos que con Nadal en cuartos de final, primera vez para él y primer norteamericano en llegar a esta ronda en un Grand Slam desde Roddick en el Open USA de 2010.
Exhibición de poderío de super Nadal
Se esperaba más de Berdych en este enfrentamiento con un Nadal que no ha jugado nada oficial este año, teniendo en cuenta que el checo había vuelto muy inspirado, llegando a la final en Doha frente a Bautista y habiendo eliminado en Melbourne a Kyle Edmund y Diego Schwartzman con bastante autoridad. Pero una vez más, se impuso la apisonadora Nadal, que está muy fresco de piernas y cuya derecha corrió como nunca para desesperar a Tomas. La victoria fue contundente y hace esperar lo mejor del español en las próximas rondas y, por qué no, soñar con una final contra Djokovic de poder a poder.
Nueva heroicidad de Rober ante Cilic
Salta de nuevo la sorpresa en el partido del aguerrido jugador de Castelló frente al finalista el año pasado, que fue verdugo de Nadal en estas pistas, Marin Cilic. De nuevo le tocó a Bautista luchar hasta el último aliento frente a la torre croata, al que consiguió doblegar tras cinco sets de lucha sin cuartel. Llega Rober con 18 sets en cuatro partidos a sus espaldas a la segunda semana del GS australiano, lo cual será un hándicap para sus condiciones físicas, pero mentalmente se le ha visto fresco y luchando cada punto hasta el final. Primera vez para Rober en cuartos de final de un Grand Slam, veremos como es capaz de asumir ese hito en su carrera.
El relevo generacional llega con Tsitsipas frente a Federer
Y si fueron sorpresas las victorias de Tiafoe y Bautista, pequeñitas se quedaron frente al impresionante partido que nos regalaron el jovencísimo griego Stefanos Tsitsipas y el maestro Roger Federer. El partido fue de un altísimo nivel, y por eso sorprende más que Tsitsipas impusiera su frescura y juventud frente a la veteranía y el oficio de Roger, deslumbrando al mundo del tenis marcándose una victoria que sin duda lo confirma como un valor de futuro a tener muy en cuenta. El griego hizo un despliegue espectacular de golpes y de movilidad en pista, arrancando multitud de exclamaciones de asombro del público. El ateniense manejó (ante nuestra sorpresa) los puntos importantes mejor que una leyenda como Federer, lo cual ya dice mucho de él. Su próximo rival, eso sí, no tendrá nada que ver, ya que Bautista es un jugador muy diferente a Roger y podría crear problemas a Stefanos si no se mentaliza a enfrentarse a intercambios largos y a tener que golpear una bola más en casi todos los puntos.
El tren canadiense va imparable
Y para no perder la tónica reinante en los octavos de final, el canadiense Raonic, que venía de cargarse a Wawrinka y al ídolo local, el díscolo Kyrgios, de forma más que brillante, se ha deshecho en tres sets de Alexander Zverev, el alemán, que amenaza con ser la eterna promesa en los Grand Slams, en los que aún no ha pasado de cuartos de final (y solo una vez ha llegado a esa ronda) situación que parece que empieza a afectarle, a juzgar por el monumental cabreo que ha mostrado contra su raqueta tras perder uno de sus servicios, que ha dejado paralizados a los recogepelotas que tenía alrededor, y en silencio sepulcral a la pista central del Melbourne Park. Raonic se confirma como el principal escollo a superar por Djokovic a la hora de llegar a la final de este Open de Australia.
Pouille elimina a Coric valiéndose de su experiencia
El partido a priori más igualado de estos octavos de final era este que enfrentaba a dos jóvenes, ya no pertenecientes a la NextGen (22 y 24 años respectivamente) que aún no han explotado en ningún torneo importante. Coric nunca había llegado a cuartos de final de un Grand Slam, pero el vencedor, Lucas Pouille, ya había llegado en dos ocasiones (Wimbledon y Open USA 2016), y puede que esa experiencia le haya servido en el partido, muy igualado y decidido por la mejor actuación del francés en los puntos decisivos. Lucas lo va a tener muy complicado frente a un potentísimo e inspirado Raonic.
Nishikori pasa a cuartos remontando dos sets y con polémica final
Y llegamos al partido de la polémica. Carreño ha encarrilado el encuentro en los dos primeros sets jugando un tenis muy serio, manteniendo a raya al japonés y eligiendo perfectamente los golpes que más daño le hacían en cada momento. Pero Nishikori parece abonado a las remontadas (ha ganado 19 de los 25 partidos en los que ha llegado al quinto set) y ha subido su nivel en los dos siguientes para forzar un quinto set que ha sido de infarto, llevando a los dos jugadores a disputar el tan cacareado antes del torneo super tie break de desempate en el set decisivo. Carreño ha empezado muy bien este tie break, llegando a ponerse con ventaja de 8-5, momento en el cual una controvertidísima decisión del juez de silla ha dado el punto a Nishikori y el asturiano, que no estaba en absoluto de acuerdo, ha perdido los papeles, concediendo los últimos cinco puntos del partido e insultando gravemente al árbitro al finalizar el encuentro. Por suerte, ha pedido disculpas públicamente por su reacción una vez calmados los ánimos, lo cual suavizará la más que probable sanción que le va a caer.
Nole, sin jugar su mejor tenis, a cuartos con brillantez y oficio
Y acabamos este resumen con el número 1, que lo seguirá siendo después de este torneo, independientemente de lo que ocurra al final, al haber superado esta ronda de octavos de final. Medvedev sin duda ha cumplido con su papel y ha conseguido forzar un set al inspiradísimo serbio, que no ha jugado su mejor partido pero se ha impuesto con claridad al joven ruso, que ha finalizado con cierta desesperación al no ser capaz, pese a jugar su mejor tenis, de doblegar a la bestia Djokovic, que se las verá con Nishikori en la próxima ronda y al que espera un duro escollo si consigue llegar a semifinales: Milos Raonic.
