Durante el fin de semana se han celebrado las finales de los campeonatos de Catalunya Sub-14, Sub-16 y Sub-18.
Las dos primeras en el sábado 22 de Abril, estadio Baldiri Aleu, en Sant Boi cuna y pilar del rugby, donde este deporte constituye una tradición arraigada hasta lo más profundo, donde la historia del balón oval ha vivido grandes acontecimientos, y el domingo 23, en La Foixarda, el Sub-18.
En todas ellas ha habido un equipo protagonista por encima de todos, el R.C. Sant Cugat, ha colocado a sus tres equipos en las finales, algo que no nos puede extrañar a la vista de la trayectoria de este club, que desde hace mucho años está realizando un gran trabajo a nivel de escuela y de equipos inferiores, y que como resultado de ello ha sido, como ya hemos dicho anteriormente, el gran protagonista del fin de semana en el rugby de base.
Los otros protagonistas de este acontecimiento han sido el R.C. Sitges, en las categorías Sub-14 y Sub-16, y la U.E. Santboiana, equipo decano en el deporte del balón oval.
Afortunadamente, hemos tenido la suerte de vivir en directo la final de la categoría Sub 14, entre el Sant Cugat y el Sitges, y decimos afortunadamente porqué fue todo un espectáculo de lo más delicioso, un choque apasionado, un encuentro lleno de emociones y muchos nervios, tanto en la grada, como en el campo, ya que para los jugadores de ambos equipos era la primera final que se disputaba en esta categoría.
El partido empezó con errores de ambos equipos, producto, tal como hemos señalado de los nervios que no dejaban que desplegaran el buen juego que había realizado esta temporada, en la que han sido claramente superiores al resto de los rivales.
Prueba de ello es que Sant Cugat no ha perdido ni un solo encuentro en todo el campeonato regular, anotando una media de 65 puntos por partido, y Sitges sólo ha caído en un partido, precisamente frente a su rival de hoy.
Aún con nervios y errores, por momentos el juego era vivo, ágil, muy emocionante y con destellos de calidad a pesar de la juventud de los jugadores.
San Cugat a pesar de todo pudo dejar el marcador en un 10-5 al finalizar la primera parte, sin que los pateadores pudieran anotar las transformaciones.
El inicio del segundo tiempo fue un poco continuación del primero, persistieron los errores, aunque el juego estático Sitges controlaba mejor los rucks y las melés, pero cuando San Cugat poco a poco fue quitándose los nervios y su línea de tres cuatro recibió balones en condiciones, fue anotando ensayos y aumentando su ventaja hasta el pitido final, y ganó el encuentro por un claro 34-5.
Por el San Cugat estos fueron los protagonistas: Valenti, Jan Benito, Lluch, Segimon, George, Jaume, Alvaro, Marc R., Jack Daniels, Yago, Alex, Bernat, Marcel, Daniel, Jan, Marc M., Gerard, Oriol, Ian Lucas, Sergio y Max, entrenador Jordi Justicia.
Los hombres del Sitges, entrenados por Philippe Theron fueron Manuel, Gonzalo, Joan, Bruno, Victor, Pablo, Pol V., Pol R., Pau, Juan, Balthazar, Noah, Nicolas, Luka, Eloi, Joan Pau, Nicolas, Max y Devon.
Arbitro José Luis Murillo, en las bandas Xavier y Adolf Anta, y como cuarto Arbitro Maurici Segú.
Para finalizar decir que en las finales de las otras dos categorías, Sub-16 y Sub-18, se impuso el equipo del Vallés también de forma clara, ya que en Sub-16 ganó al Sitges por 52-22, y en Sub-18, frente a Santboiana por 34-18.
Para terminar felicitar a todos los equipos que han llegado hasta esas finales y en especial al Sant Cugat por el pleno del fin de semana, pleno que no es fruto de la casualidad sino de muchos años de trabajo, sacrificio y buen hacer de un club que se preocupa por el futuro del rugby.
imagen destacada vía: Foto propia
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Buen artículo, el futuro del rugby, lo veremos crecer cuando las autoridades deportivas piensen en diversificar las ayudas, apoyos y promociones de este deporte. Y cuando el fútbol no se confunda como el único deporte que existe en este país. Mientras tanto el balón rey, seguirá siendo redondo.
¡Bravo!
Da gusto leer artículos así, de rugby y de sus categorías inferiores, ya que, por desgràcia, no es nada habitual. Es todo un lujo ver que no todo es fútbol y tertulianos (en el sentido más peyorativo de la palabra), peleándose a ver quien es más cretino.
Felicidades.