Aunque parecía un milagro el ganarse un boleto al Play-In, los Pumas remontaron a Cruz Azul en el Estadio Cuauhtémoc para imponerse 3-2 en la última fecha de la fase regular del Apertura 2025. La Máquina terminó con 10 hombres luego de la expulsión de Lorenzo Faravelli y los auriazules aprovecharon la superioridad numérica para vencer a los de Nicolás Larcamón.
Con este resultado, Cruz Azul se quedó con 35 puntos y eso solo le alcanzó para la tercera posición de la tabla. En el caso de los Pumas, estos sumaron 21 unidades y se quedaron con el 10° puesto de la clasificación. Con esto, La Máquina enfrentará al Club Deportivo Guadalajara en la primera ronda de la Liguilla. Por su parte, los universitarios deben vencer a Pachuca y luego al perdedor del duelo de Tijuana y Juárez para avanzar como el octavo invitado a la liguilla.
Gol de Ruvalcaba y lesión de Macías
Los Pumas anotaron primero en el juego de vida o muerte. Jorge Ruvalcaba se encargó de abrir el marcador al 3’. El atacante mexicano controló en dos tiempos un centro de Álvaro Angulo y disparó con una patada de karateka para vencer a Kevin Mier.
Lamentablemente, a los pocos minutos, los Pumas perdieron a José Juan Macías por una lesión de rodilla. El jugador auriazul chocó con José Paradela y el dolor fue tanto sobre la articulación de la pierna izquierda que tuvo que salir del campo de inmediato. El exjugador de las Chivas tuvo que ser reemplazado por Pedro Vite.
Doblete del Toro Fernández
En el futbol es muy frecuente que se aplique la ley del ex y el duelo entre Cruz Azul y Pumas no fue la excepción. Gabriel ‘El Toro’ Fernández anotó los dos goles con los que la Máquina le dio la vuelta al encuentro. Primero remató con la cabeza un centro preciso de Jorge Sánchez al 13’ para batir a Keylor Navas.
Después, el delantero uruguayo empujó el balón con la punta del pie al 18’ para conseguir su doblete. Fernández aprovechó que Jeremy Márquez dejó pasar la asistencia de Charly Rodríguez. El portero universitario se lanzó para atajar la esférica, pero el balón pasó a centímetros de su guante. La primera mitad necesitó de 14 minutos de añadido para acabar, pero lo que más hubo fueron tarjetas amarillas para Adalberto Carrasquilla y Willer Ditta.
Cruz Azul dio un paso al precipicio por una lesión de Kevin Mier. Carrasquilla se ganó su tarjeta amarilla al presionar al portero y barrerse para evitar el despeje. El portero sufrió una grave lesión y tuvo que ser reemplazado por Andrés Gudiño. La jugada fue revisada por el VAR y el árbitro reafirmó su decisión de mantener la tarjeta amarilla.
Expulsión para la Máquina y remontada de Pumas
Lorenzo Faravelli entró de cambio al 52 en lugar de Márquez y no duró ni 15 minutos en la cancha. El mediocampista argentino se barrió con fuerza excesiva y con los tachones en la pierna de Santiago López. Los jugadores de la Máquina reclamaron de inmediato y Erik Lira fue amonestado por las protestas.
Con un hombre de más, los Pumas se volcaron al ataque porque si no ganaban, quedaban eliminados. La insistencia fue tanta que fueron recompensados con un penal luego de una patada imprudente de Omar Campos sobre Carrasquilla. La jugada parecía haber sucedido fuera del área, pero el juez central sancionó el penal. Angulo tomó el balón y anotó desde los 11 pasos para igualar el juego.
Con la desesperación de tener que sacar los tres puntos para avanzar al Play-In, los de Efraín Juárez no dejaron de atacar. El milagro fue conseguido por Alan Medina. El mediocampista del cuadro universitario remató en el área chica tras un primer toque de Santiago López luego de un tiro de esquina. Con ese gol al 85’, Pumas solo tuvo que aguantar los últimos minutos para garantizar su pase al Play-In.
Los universitarios se pertrecharon en su zona defensiva para los instantes finales. Tanto que cometieron muchas faltas y Santiago López fue apercibido por una sobre Ángel Sepúlveda. Después, una falta sobre Luka Romero provocó fricciones en jugadores de ambos equipos y tanto Ruvalcaba como Sepúlveda vieron cartones amarillos. Aunque se habían añadido seis minutos después de los 90 reglamentarios, los universitarios tuvieron que aguantar hasta casi el 90+8’ para celebrar la victoria.