Las declaraciones de Javier Aguirre sobre regalarle su sexto Mundial a Memo Ochoa han hecho eco en los medios mexicanos. El veterano portero podría convertirse en el primer futbolista azteca en jugar seis Copas Mundiales si asiste a la justa de 2026. Sin embargo, el estratega no lo considera como prioridad porque no tiene equipo.
“¿Lo de las seis copas? Yo no regalo nada, vendrá el que esté mejor y él no tiene equipo. Hablé con su agente, tiene ofertas, la intención es permanecer en Europa”, dijo Aguirre antes de que México jugara el amistoso contra Japón.
La cuestión es que Aguirre tiene dos antecedentes como entrenador de México en Copas del Mundo. El estratega de 66 años fue al Mundial de Corea-Japón de 2002 y al de Sudáfrica 2010. Y de esas dos experiencias se puede decir que regaló viajes a algunos jugadores que no se lo merecían.
Leyendas viajan a los países asiáticos como acompañantes
Para el Mundial de 2002, Aguirre llegó a salvar a México luego de perder en el Estadio Azteca contra Costa Rica y contra Honduras en San Pedro Sula. El equipo mexicano ganó 13 de los últimos 15 puntos posibles y avanzó a la Copa del Mundo de Corea y Japón. En la Copa del Mundo, los rivales fueron Italia, Croacia y Ecuador. El conjunto nacional se despidió de la competencia con una dolorosa derrota ante Estados Unidos en los octavos de final.
Su convocatoria estuvo llena de leyendas que poco hicieron el torneo. Jorge Campos fue llevado como tercer portero, por detrás de Óscar Pérez y Oswaldo Sánchez. ‘El Brody’ fue titular en las ediciones de Estados Unidos 1994 y Francia 1998, pero sus mejores días estaban lejos en 2002. El también conocido como ‘El Inmortal’ era jugador de Pumas, unos meses después fue reemplazado por Sergio Bernal.
Otros dos veteranos que poco tenían que hacer en ese equipo fueron Alberto García Aspe, con 35 años, Sigifredo Mercado, con 33 y Gabriel Caballero, con 31. El último fue un argentino nacionalizado que brilló con Pachuca, pero solo tenía cinco juegos disputados con México antes de ser convocado al Mundial de 2002. La plantilla mexicana podría haber contado con jugadores que estaban en mejor nivel como Pavel ‘El Bebé’ Pardo, Duilio Davino, Miguel Zepeda. Lamentablemente, la defensa no pudo contar con Claudio ‘El Emperador’ Suárez por una lesión.
Franco y Bautista, dos incógnitas en Sudáfrica
Aguirre tuvo que actuar como bombero otra vez y salvar la clasificación en 2010. El Hexagonal final arrancó de la peor manera con derrotas en las visitas a Estados Unidos y Honduras bajo la tutela de Sven-Goran Erikson. ‘El Vasco’ fue presentado en abril de 2009 y perdió su primer duelo contra El Salvador en San Salvador. Después de eso, el estratega hiló cinco triunfos, incluido un 3-0 contra Costa Rica en San José.
La portería fue una de las posiciones donde más duda generó al elegir a un veterano ‘Conejo’ Pérez, de 37 años, sobre un Memo Ochoa que estaba por entrar en su mejor momento a los 24 años. La otra alternativa en como guardameta tricolor era Luis Michel, entonces portero de las Chivas del Guadalajara. Un año después del Mundial, ‘Pacomemo’ migró al futbol europeo con una transacción libre al AC Ajaccio de la liga francesa.
La delantera fue controvertida porque en todas sus alineaciones de la fase de grupos, donde enfrentaron a Sudáfrica, Francia y Uruguay, Aguirre alineó a Guillermo Franco sobre Javier ‘Chicharito’ Hernández. Uno de los delanteros que solo fue de vacaciones fue Adolfo ‘El Bofo’ Bautista. El exjugador de las Chivas fue titular en el duelo contra Argentina de los octavos de final, pero fue reemplazado por Pablo Barrera al medio tiempo.