Análisis Fútbol Sala

Alireza Abbasi: ¿Cómo es la regulación de la temperatura corporal durante el entrenamiento de fútbol sala con calor?

Alireza Abbasi, nacido el 26 de julio de 1987 en Teherán, una cara conocida de la ciencia del fútbol sala y del fútbol en el mundo.

Termorregulación

Durante el entrenamiento, los fuertes mecanismos fisiológicos de reducción del calor están asociados con la prevención de un aumento brusco de la temperatura central del cuerpo. Sin embargo, un ambiente caluroso y húmedo puede aumentar significativamente el desafío que los ejercicios físicos de fútbol sala crean en el sistema de regulación de la temperatura del cuerpo humano, porque el intercambio de calor entre el cuerpo y el ambiente se ve gravemente afectado en estas condiciones.

Este problema puede conducir a una severa reducción del rendimiento y un mayor riesgo de desarrollar enfermedades causadas por el calor. Afortunadamente, hay una serie de planes estratégicos que los jugadores de fútbol sala pueden utilizar para prevenir o reducir estos riesgos asociados con el entrenamiento en el calor. En este contexto, la flexibilidad y las intervenciones nutricionales parecen ser los métodos más efectivos.

Durante la adaptación al calor, los umbrales de temperatura para la vasodilatación y el inicio de la sudoración disminuyen, lo que, en combinación con la expansión del volumen plasmático, mejora la estabilidad cardiovascular. Las intervenciones nutricionales efectivas incluyen optimizar el estado de hidratación reemplazando las bebidas líquidas. El segundo elemento debe incluir cantidades adecuadas de glucosa y sodio, que mejoran la absorción y excreción de agua.

Energía=calor

Durante los ejercicios, se liberan grandes cantidades de energía en forma de calor. Para evitar el aumento continuo de la temperatura corporal central, mecanismos fisiológicos como la dilatación de los vasos de la piel y la sudoración aumentan la disipación de calor. Sin embargo, varios factores, como los ambientes cálidos y húmedos y la reducción de agua en el cuerpo, pueden afectar negativamente la regulación de la temperatura del cuerpo e incluso pueden provocar enfermedades por calor.

Afortunadamente, los jugadores de fútbol sala pueden reducir los efectos de este tipo de calor adaptándose al calor y suministrando agua al cuerpo. La mayoría de las personas tarda de 7 a 14 días en completar el proceso de aclimatación al calor. Los ejercicios intensos intermitentes o los ejercicios moderados continuos en condiciones de calor pueden ser la mejor manera de adaptarse al calor. En cuanto al suministro de agua, se sugiere que los jugadores de fútbol sala consuman líquidos a una tasa cercana a la tasa de pérdida de agua en forma de sudor y orina.

Hidratación

Este trabajo generalmente requiere el consumo de 200 a 300 ml de líquido cada 10 a 10 minutos, que debe comenzar antes del entrenamiento y continuar hasta 20 minutos antes del final del entrenamiento. Se ha demostrado que la adición de carbohidratos de menos del 7% a las bebidas deportivas conduce a una mejor absorción intestinal al crear un gradiente osmótico adecuado. Para obtener una hidratación eficaz después del ejercicio, las bebidas hidratantes deben contener cantidades moderadas a altas de sodio (≥50 mmol/L) y deben consumirse en un volumen superior a 1,5 veces la pérdida de agua.

Al final, agregó: la cantidad de lactato en la sangre de los jugadores de fútbol sala es más alta que la de los jugadores de fútbol. Los estudios demuestran que las actividades periódicas de corta duración, como los deportes de fútbol sala, se han utilizado en actividades periódicas más prolongadas a intensidades altas para aumentar el nivel de lactato en sangre y, en consecuencia, aumentar la capacidad de absorción y los procesos involucrados en este proceso.

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