Con los resultados del Dauphine podemos hablar con tranquilidad del favoritismo al Tour de Francia, gala que claramente tendrá dos favoritismos marcados, Pogacar y el Jumbo Visma- De Pogacar solo tenemos que referirnos a su rendimiento de las dos rondas de gala que ha ganado con autoridad, especialmente la última, en la que aventajó en la clasificación general en más de 5 minutos a su segundo competidor.
Jumbo vs Pogacar
Del otro lado, un candidato que tenemos de favorito es a toda una escuadra de monumental rendimiento, el Jumbo Visma, encabezado por Roglic y seguido muy de cerca por un Vingegaard con su esplendorosa regularidad y un Wout Van Aert sin límites, quien, aunque en las últimas etapas de Dauphine bajó su rendimiento, no sabemos si fue como estrategia o verdaderamente luego de 5 etapas a completo tope. Así, la estrategia del Jumbo Visma deberá ser, ir a tope toda la carrera, a tres bandas, pues claramente la única forma de batir a Pogacar es buscarle un mal momento, por ello, el Jumbo tendrá como una única estrategia, buscarle un momento de debilidad, y no podrá hacerlo con un solo corredor.
El Dauphine estuvo marcado por un rendimiento increíble del Jumbo; una contrarreloj y capacidad de remate en etapas estilo clásica increíble de Van Aert, un ataque con demostración de piernas y capacidad escaladora de Roglic en la etapa 7 y una regularidad increíble de Vingegaard. El danés en la etapa 7 impuso un ritmo durísimo en la subida y el día de cierre en la etapa 8, la más dura seguramente, estaba en mejor condición que Roglic, obviamente tras el desgaste del remate del día anterior, pero que demostró un gran rendimiento de Vingegaard, quien se llevó la segunda casilla del podio.
Pogacar el infalible
Con esos tres corredores, el Jumbo tiene con qué buscarle un momento de debilidad a Pogacar, ya sea en la contrarreloj o en la alta montaña. Ahora, la estrategia deberá ser bien marcada, ir a todo por el todo de la clasificación general, buscar siempre el que este en mejor condición, así no sea el magnifico Roglic, pues claramente, Jonas Vingegaard llega en un gran estado físico a esta cita francesa. La del Jumbo deberá ser una estrategia fría y salvaje, a quien este mejor en la general y quien este mejor en la alta montaña, y a su vez, mas cerca de Pogacar, pues sacrificar un corredor que este mejor en dichas circunstancias por la esperanza de una remontada, es una ilusión ante un Pogacar que no perdona.
En segundo lugar, debemos tener en cuenta al inolvidable INEOS, quien llevó sus mejores apuestas al Tour de Suiza y seguramente definirá su líder, dependiendo del rendimiento de sus dos puntas de lanza en esa carrera, Yates y Martínez; de allí saldrá un serio candidato en tercería para el Tour de Francia, aunque debo decirlo que el mayor favoritismo esta entre Pogacar y el Jumbo.
Trabajo en equipo
El Jumbo debe estar analizando que papel le entregan a sus tres corredores, es decir, si llevan una estrategia clásica de llevar un líder-Roglic- con un colider-Vingegaard- y un gregario de Lujo-Van Aert, y así defender su líder y aspirar a podio y camiseta de puntos, o solo ir por la CG, como sea, destrozando la contrarreloj y cazando bonificaciones con Van Aert, atacando de lejos con Roglic poniendo a Pogacar en soledad en contra de una dupla Roglic-Vingegard, con ataques consecutivos, y por supuesto, dejar en libertad a Jonas para ir con Pogacar, dejando a su líder solo si es necesario y si tiene las piernas que ello requiere. Lo cierto es que el Tour sera combativo, muchos tienen hambre de victoria y las estrategias no podrán ser tan conservadoras ante un Pogacar que le gusta ampliar diferencias y dar espectáculo.
PD. Lo de Van Aert en la contrarreloj del Dauphine es surrealista, a solo 2 segundos del multicampeón mundial Don Filippo Ganna, y sacándole 40 segundos a Roglic.
Nelson Andres Mantilla Oliveros
Tw. @Nelsonamantilla
