Muchas son las situaciones que hemos vivido en esta edición de la Itzulia y que han sido, a mi parecer, sorprendentes y reveladoras. Procedo en este texto a resumir todos los detalles que nos ha dejado la carrera y las conclusiones que podemos sacar de estos días. Desde la desconexión de Primoz Roglic portando el maillot de líder, a la mejoría en los descensos de Evenepoel, pasando por la calidad de Marc Soler e Ion Izaguirre que están en un momento de forma muy bueno.
Etapa prólogo (Hondarribia, 7,5km)
Como de costumbre, vimos a un Primoz Roglic pletórico que mantiene su idilio con el calendario español. Su rendimiento en el prólogo ya dio muestras de la calidad que atesora en sus piernas y, por si fuera poco, su control de la bicicleta y de los tiempos. Antes de la última ascensión el eslovaco perdía hasta 1 segundo con el belga Evenepoel, al cual pulverizó en la ascensión final adoquinada.
Acabó sacándole hasta 5 segundos de ventaja a un belga que parece llamado a dominar la disciplina contra el crono en el futuro, pues consiguió batir hasta por más de 10 segundos a corredores como Cavagna o Geraint Thomas.
Segunda etapa (Leitza – Viana, 207km)
Parecía una típica etapa de transición de la Vuelta a España, tan criticadas y aburridas por la creación de las llamadas “pactofugas” de equipos españoles. Acabó dejándonos uno de los finales más recordados en carreteras españolas. A falta de 20 kilómetros la fuga, integrada por Ibón Ruiz, Ander Okamika, Ibai Azurmendi y Julen Amezqueta había defendido hasta 2 minutos de ventaja contra un pelotón que había decidido no gastar ni un solo gramo de esfuerzo por coger a los españoles. Es entonces cuando pudimos presenciar uno de los momentos más raros y cómicos del año.
Tras muchos kilómetros de racanear en el esfuerzo por parte de Amezqueta y Azurmendi, Ibón Ruiz decidió marcharse en solitario, consiguiendo rápidamente una ventaja cercana a los 20 segundos con el trío perseguidor, del cual Amezqueta seguía sin colaborar. En ese mismo momento su equipo, Caja Rural, marchaba trabajando por detrás para alcanzar desde el pelotón a los escapados.
Los coches al mando
Fue entonces cuando se produce una conversación entre los coches del Burgos BH y el propio Caja Rural, en la que, de manera burlona, el director del Burgos le cuestiona si no es mejor que llegue la escapada y que, si su corredor principal, Orluis Aular, iba a ser capaz de ganar a un todo campeón del mundo como es Julien Alaphilippe.
Tras toda la polémica, el pelotón, tras un trabajo impresionante del belga Evenepoel, consiguió coger a Ibón, que marchó en solitario hasta los últimos 500 metros, y el francés campeón del mundo se impuso con suficiencia en un sprint que será recordado por todos tras no pasar de la 5ª posición Aular, el sprinter del Caja Rural y ganar con clara solvencia. Con todo ello, Roglic se mantuvo de líder y no hubo cambios relevantes en la clasificación, por otro lado, pese a no ganar Ibón Ruiz obtuvo el maillot de la montaña.
Tercera etapa (Llodio – Amurrio, 182km)
Discurrió sin grandes complicaciones para el pelotón. La fuga, organizada por Jan Polanc, del UAE y por Cristian Rodríguez, del TotalEnergies, llegó a sumar hasta 4 minutos, siendo totalmente controlados por el equipo INEOS, cogiendo al español a falta de 20 kilómetros, después de haber sido el corredor que más persistió en su empeño y teniendo como premio el maillot de la montaña, tras haber sumado 17 puntos en la etapa.
El final de la tercera etapa siguió el guion de la etapa anterior, Remco Evenepoel aprovechó para marcar el ritmo en los últimos kilómetros para lanzar al francés Alaphilippe, el cual no pudo repetir la victoria del día anterior.
Cuarta etapa (Vitoria-Gasteiz – Zamudio, 186km).
Controlada en todo momento por Jumbo y en la que pudimos ver a un Geraint Thomas meterse en la escapada junto a Ruben Guerreiro de Education First, Bruno Armirail de Groupama, Davide Formolo de UAE, Mikel Iturria del Euskaltel Euskadi, Mauri Vansevenant de Quick Step y Victor Lafay de Cofidis, que se marchó en solitario en el ascenso al Vivero y que rozó la victoria tras haberle cogido el grupo en el último kilómetro.
Por detrás, en el ascenso al Vivero, el pelotón comenzó a desatar las hostilidades, siendo Julien Alaphilippe el primero en saltar del grupo, marchándose Jonas Vingegaard por detrás y siendo rápidamente absorbidos por el grupo comandado por INEOS y Bahrein, para posteriormente saltar Remco Evenepoel al cual no le permitieron marcharse del grupo, acabándose así el último ascenso del día e iniciando un descenso en el que Pierre Latour sufrió una caída fortísima que no le permitió tomar la salida al día siguiente.
Tras todo ello y como había venido pasando en las etapas anteriores, Remco Evenepoel fue el encargado de preparar la llegada a meta para su compañero Alaphilippe, cogiendo a Lafay dentro del último kilómetro y lanzando el sprint en el que, de nuevo, el campeón del mundo quedó segundo, esta vez por detrás del colombiano Daniel Martínez
Quinta etapa (Zamudio – Mallabia, 164km)
Nos dejó la primera victoria profesional de Carlos Rodríguez tras seguir la rueda de Marc Soler quien volvió a mostrar la calidad que atesora en las piernas tras mantener el pulso al pelotón él sólo. Ambos corredores españoles fueron los últimos supervivientes de la escapada del día hasta que el corredor del INEOS atacó a falta de 13 kilómetros para el final a un Marc Soler que no había recibido ningún relevo por parte de Carlos Rodríguez, por órdenes de equipo, no pudiendo seguir el ritmo de cabeza.
También reseñable en esta escapada fue la caída de Lucas Hamilton, siendo una de las más duras en lo que va de año, saltando por encima del quitamiedos y que, por suerte, no llegó a caer precipicio abajo.
Por detrás, paralelo a esto, pudimos ver una bonita batalla dentro del grupo de los favoritos para llevarse la general, iniciando las hostilidades el belga Remco Evenepoel, atacando a falta de 28 kilómetros para la meta, al cuál respondieron todos los líderes (Vlasov, Vingegaard, Daniel Felipe Martínez, Ion Izaguirre o Enric Mas) menos un Primoz Roglic que, bien por debilidad o bien por dar libertad a Vingegaard, decidió no meterse en ese corte, el cuál acabó cogiendo más de 1 minuto de ventaja con el grupo de Roglic, Adam Yates y Gaudu, del que únicamente trabajaba Sebastien Reichenbach en favor de David Gaudu.
Guerra de guerrillas
La subida se mantuvo con la lucha entre Cristián Rodríguez, que luchaba por ganar, el grupo de favoritos, que luchaba por alejarse de Roglic y Yates y el 3er grupo, del que trabajaba Groupama, sin mucha convicción, para que la diferencia no se disparase. Y éste fue el guion hasta que entramos en la última parte de la ascensión a Mallabia, en la que las rampas finales superaban los dos dígitos de pendiente.
Finalmente, Carlos Rodríguez acabó ganando la etapa con 7 segundos de ventaja sobre Daniel Martínez, que fue el ganador del sprint del grupo. Sprint en el que, debido a la dureza de la subida y el asfalto mojado debido a la lluvia, Vingegaard y Vlasov cayeron tras chocar el danés con el ruso, perdiendo hasta 13 segundos con el colombiano.
Por su parte, el grupo de Roglic acabó entrando por detrás a un minuto cediendo el maillot de líder en manos de Evenepoel, que lo conservó por una diferencia de únicamente 2 segundos con respecto al colombiano del INEOS y unos 20 segundos con los demás corredores favoritos.
Por lo demás, no hubo cambios y Alaphilippe (maillot por puntos) y Cristian Rodríguez (maillot de la montaña) se mantuvieron al frente de las respectivas clasificaciones.
Sexta y última etapa (Eibar – Arrate, 135,7 km)
Se jugaba la general entre los 7 primeros de la clasificación, todos ellos en una distancia de 29 segundos. No decepciónó en ningún momento y nos demostró el porqué de la belleza del ciclismo, desde la dureza del recorrido, el regreso de la afición a las cunetas, la marea naranja que es tradición en terreno vasco y el propio devenir del día.
Iba a comenzar con una escapada de 4 corredores formada por Tony Gallopin del Trek – Segafredo, Cristián Rodríguez del TotalEnergies, Davide Formolo del UAE Team y Xabier Mikel Azparren del Euskaltel – Euskadi, que duraría prácticamente hasta la ascensión a Urkaregi, por un Davide Formolo que fue el que más lejos llegó de todos ellos y que puso en jaque la clasificación de la montaña de Cristian Rodríguez que se la acabó llevando por únicamente 2 puntos de ventaja.
Alta tensión
Dentro del pelotón, la etapa iba a transcurrir con mucha tensión, trabajando Quick Step desde el inicio, destacando el trabajo de Dries Devenyns, y que se quedó rápidamente con únicamente 2 corredores, Alaphilippe y Evenepoel, pasando INEOS a endurecer la carrera en el Krabelin, con tal de aislar al belga.
Tras el trabajo de INEOS, a falta de 41 kilómetros de meta, Primoz Roglic saltó del grupo, seguido por Daniel Martínez y rompiendo al grupo por completo, yéndose ambos junto a Enric Mas y Vlasov, mientras que Vingegaard decidió saltar por detrás para dejar a un Evenepoel que corrió de manera muy inteligente.
Marcó un ritmo cómodo para él en el que poder estabilizar las diferencias acabando incluso por cerrar el hueco, no obstante, al poco de enlazar con el grupo, fue Enric Mas el que, de manera sorprendente y potente, saltó del grupo marchándose junto a Ion Izaguirre, Vingegaard y Daniel Martínez que llegaron a su rueda por detrás.
El descenso clave
Así llegamos a un descenso que dio para mucho y que demostró que, para ganar una carrera de éste nivel, la calidad en el descenso es casi igual de importante que la capacidad para subir, y es que vimos un descenso en el que pasó de todo. Por un lado, Pello Bilbao consiguió recuperar una diferencia de 20 segundos con los mejores de la carrera, coronando por detrás de Remco, cogiéndole en la bajada, soltándole, cogiendo al grupo de favoritos y estableciéndose como el líder del grupo marcando el descenso, mostrando un nivel digno de destacar.
Por otro lado vivimos la caída de Enric Mas y su compañero Nelson Oliveira, quienes cogieron mal una curva y se cayeron partiendo el grupo en 2 y destapando las carencias en el descenso del colombiano Daniel Martínez del INEOS y yéndose por delante Vingegaard, Vlasov, Ion Izaguirre y Pello Bilbao.
La madre de las batallas
Así se inició una de las batallas más bonitas que pudimos ver ayer, tras enlazar Remco, Roglic, Gino Mader, Felix Gall y Marc Soler con Daniel Martínez, lo cual fue clave para enlazar con el grupo de cabeza. Rápidamente los dos primeros de la clasificación se pusieron de acuerdo para trabajar y poder enlazar con el grupo de cabeza, que ya había absorbido a Davide Formolo.
No se superaron las diferencias de más de 25 segundos y pudiendo unificar los grupos en el descenso hacia Eibar, tras una muestra de descenso de Remco que despejó todas sus dudas y criticas sobre su incapacidad o inseguridad en los descensos.
El grupo de cabeza se mantuvo hasta la llegada al pueblo de Eibar donde, tras disputar Daniel y Remco las bonificaciones del sprint intermedio de Eibar que se llevó el belga, Davide Formolo aprovechó un parón para volver a saltar hacia delante. Acabó siendo absorbido por un grupo que saltó del grupo tras el ataque de Ion Izaguirre al que le respondió Vlasov y que siguieron Daniel Martínez, Vingegaard y Soler y que dejó totalmente clavado al belga Remco.
No pudo seguir en el grupo de favoritos pero que mostró una capacidad mental y de sufrimiento impresionante manteniéndose en todo momento a unos 20 segundos del grupo que se jugaría la victoria en lugar de dejarse llevar y desconectar de la cabeza.
Dos carreras en una
A la misma vez que el belga sufría por no ceder mucho tiempo, los 5 de cabeza se jugaban la victoria hasta que, a falta de unos 3 kilómetros para la meta y algo más de uno para coronar Arrate el danés de Jumbo, Vingegaard, derribó, en un bandazo extraño, a Ion Izaguirre, el cual rápidamente cogió la bici y se volvió a montar, para perder el menor tiempo posible.
Por delante, era el ruso Vlasov el que apretaba para que los cuatro de cabeza mantuviesen el ritmo e intentasen cortar a Soler y Vingegaard que comenzaban a sufrir. Pese a todo, Ion Izaguirre demostró el motor que llevaba en toda la etapa, luchando por enlazar en los últimos metros de la subida a Arrate, cogiéndoles incluso antes de coronar y comenzando el descenso hacia meta en el grupo de 5 que se habían marchado por delante y habían ya dejado por detrás a Remco y a Pello Bilbao.
Soler ataca, Izaguirre vence
Finalmente, en la llegada a meta Soler es quien lanza la llegada en la que se acaba imponiendo un Ion Izaguirre que se había merecido la victoria a lo largo de toda la etapa y que demostró un carácter y una fortaleza tremenda al conectar con los mejores tras la caída y pudiendo superarles en el sprint, batiendo a Vlasov y Soler, 2º y 3º y entrando Daniel Martínez 4º al mismo tiempo, consiguiendo la victoria global de esta Itzulia, tras llegar perder Remco 24 segundos únicamente con respecto a Ion.
Al final, Daniel Martínez se llevó el maillot por puntos y la general por 11 segundos con respecto a Ion Izaguirre, que fue 2º y 16 segundos sobre Vlasov, que fue 3º y demostró que, si no hubiese perdido tiempo con su caída junto al danés Vingegaard, podría haber peleado la victoria final.
Señales de debilidad
Remco acabó 4º a 21 segundos y volvió a dar muestras de cierta debilidad subiendo, como ya demostró en Tirreno y Volta a Valencia, pero esta vez demostró una gran capacidad mental para no dejarse llevar y luchar así por el pódium y una clara mejoría en su habilidad descendiendo. Por su parte, Cristian Rodríguez se acabó llevando la clasificación de la montaña y vimos por 1ª vez como Roglic sufre una gran derrota en España después de haber vestido el maillot de líder de la general.
Con todo ello, la Itzulia, de nuevo, ha demostrado ser una de las mejores vueltas por etapas del calendario ciclista, no sólo por participación, sino por recorrido y afición, que se ha volcado y ha llenado las cunetas, hasta tal punto que ciclistas como Remco o Roglic han elogiado a la afición vasca y al ambiente que ha habido a lo largo de todo el recorrido.
Editor: @JesLpez
Síganme en Twitter como @JesLpez y sigan toda la información y actualidad deportiva en nuestra página web https://sextoanillo.com/, en @SextoAnillo, en www.facebook/sextoanillo.com o en nuestro Instagram: sextoanillo.
