Duelo de titanes en Maracaná
“O Grande Desafío de Vóleibol» fue un partido amistoso entre Brasil y la entonces URSS, ambos equipos estrellas de los años 80. El lugar del desafío iba a ser el Estadio Maracaná, referente eterno carioca del fútbol, y se logró contra todo pronóstico una asistencia récord de 95.887 personas. Hasta entonces, el mayor número de personas reunidas para un partido de volley habían sido 90 mil espectadores, para la apertura de los Juegos Olímpicos de Tokio en 1964.
Respeto al público y al deporte
Lo más destacable fue lo que pasó en pleno partido. El partido tuvo que ser realizado en una noche lluviosa del día 26 de julio de 1983. La cancha fue montada en el centro del césped. En el primer set, una fuerte lluvia interrumpió el juego. Viacheslav Platanov y Pavel Selivanov, técnico y atacante del equipo soviético, tuvieron la idea de recoger las alfombras que iban desde el vestuario hasta la cancha para forrar la cancha y continuar el partido.
Con cinta adhesiva se marcaron las líneas los 3 metros y el fondo de la cancha. Además, impactante, cada que la cancha se mojaba por la lluvia, los jugadores se secan el suelo con las propias toallas. Y pese a todo eso, los jugadores dieron una muestra gigante de respeto al público, rivales y a ellos mismos. Siguieron jugando y mostrando su calidad humana y deportiva bajo la lluvia de Río.
