Tras aplazarse el choque de la semana pasada ante Bidasoa, los gladiadores azules reinician la intensa parte final de la primera vuelta de Liga Sacyr Asobal visitando mañana viernes a Incarlopsa Cuenca. Los pucelanos, aún sin centrales, tratarán de sorprender al potente equipo castellanomanchego y seguir sumando lejos de Huerta del Rey.
Enésimo parón
El Recoletas Atlético Valladolid regresa a la competición de la Liga Sacyr Asobal, después de un obligado descanso el pasado fin de semana por el aplazamiento del partido ante Bidasoa Irún debido a los casos de Covid-19 en el club guipuzcoano. Lo hará como visitante desplazándose en el día al complicado El Sargal, donde se medirá al anfitrión Incarlopsa Cuenca mañana viernes a las 20:30 con televisión en directo (J14, La8 CyL Valladolid, CMM, LaLiga Sports TV).
Este breve periodo sin compromisos ligueros ha servido al castigado conjunto que dirige David Pisonero para recuperarse y trabajar, aunque no de manera excesivamente analítica, el choque de Cuenca. Por suerte, el técnico vallisoletano no ha tenido que lamentar mayores problemas físicos en su plantilla, aunque seguirá sin centrales, por lo que volverá a tener que tirar de repertorio táctico en ataque y defensa y aprovechar también la inspiración y buen momento de forma de algunos hombres como el lateral Miguel Martínez, 9º anotador Asobal y máximo del equipo con 5,2 goles de promedio.
Más inconvenientes en forma de bajas
Las bajas de Borja Méndez, Diego Camino y Alejandro Pisonero, siguen condicionando el juego pucelano, pero con el máximo goleador de la pasada Liga Sacyr Asobal, Jorge Serrano, reincorporado, anotó 4 goles ante el Viveros Herol BM Nava en su retorno, y también con Mauricio Basualdo insertado en dinámica, el argentino jugará mañana su cuarto choque consecutivo tras la lesión, el Recoletas intentará puntuar para seguir alejado de la zona baja.
A pesar de su último empate (29-29) en pista del Viveros Herol BM Nava, los gladiadores azules han descendido un puesto, son 13º con 10 puntos, una vez que BM Benidorm avanza en sus citas aplazadas (ayer superó a Fraikin Granollers, 28-27). Ahora el Recoletas se centrará en sumar el máximo de puntos posibles en este duro final de segunda vuelta, donde tendrá que disputar desde mañana 4 partidos en 2 semanas, tres de liga (además del compromiso en Cuenca, contra Granollers y Bidasoa en casa) más el enfrentamiento de la 2ª eliminatoria de Copa del Rey a partido único ante el Handbol Sant Quirze en tierras catalanas.
Motivación fundamental
Por ello, el equipo de Pisonero afronta motivado su primer reto de todos e intentará sumar ya en El Sargal, pista donde sabe lo que es vencer, después de lograrlo en la temporada 2018-19 (33-34) y quedarse a un solo gol de puntuar en la pasada (26-25), de cuatro visitas realizadas hasta la fecha a feudo conquense en Liga Sacyr Asobal.
Los vallisoletanos ya se midieron al Incarlopsa Cuenca en pretemporada ganándoles en Cigales de manera ajustada, 33-32. La escuadra entrenada por Lidio Jiménez se encuentra necesitada de puntos si quiere volver a mirar hacia arriba en la comprimida clasificación de la Liga Sacyr Asobal. Después de conseguir solo 2 de los últimos 12 posibles (en pista del Ángel Ximénez Puente Genil J11, 31-35), el Incarlopsa Cuenca (10º con 10 puntos) se tomará la visita de los gladiadores azules como una reválida para reorientar su dinámica y reivindicarse ante su público.
Un Ciudad Encantada remozado
Cuenca también ha afrontado una renovación en su plantilla a la que se han incorporado seis jugadores y por el contrario, ha sufrido salidas importantes como las de los argentinos Moscariello, Vainstein o Maciel. Tras un solvente inicio, los manchegos se hallan ahora en un bache que les ha abocado a la 10ª plaza de la Asobal con 10 puntos, siendo el 2º que más goles encaja de promedio en la Liga Sacyr Asobal con 31,4. Su principal arma ofensiva sigue siendo el lateral brasileño Thiago Ponciano con 59 goles (13º en la clasificación Asobal) al que complementa una de sus nuevas incorporaciones, el extremo Arnau Fernández con 3,8 de media.
El entrenador del Recoletas, David Pisonero, analizaba así el encuentro de mañana en El Sargal, “nos vienen 3 partidos en liga para no especular y tratar de puntuar, y el primero es Cuenca, que no está pasando por su mejor momento y vamos con la intención de competir, pero si vemos su plantilla asusta”, indicó Pisonero.
Pisonero se sincera
“No es fácil jugarse los puntos contra Ponciano, Pizarro y Simonet en primera línea y pivotes como Pozzer y Doldán, si a eso le sumas la capacidad anotadora de Bulzamini, el gran fichaje de Prantner que les está dando muchísimo también en defensa y que su portería está rayando a nivel aceptable el partido será complicado”, explicó el técnico en la rueda de prensa previa.
Según el preparador de los gladiadores azules, Incarlopsa Cuenca practica “un balonmano sencillo pero muy eficaz, con jugadores altos con una capacidad de lanzamiento enorme y dos pivotes que por físico podrían ganar la posición, pero que además corren y buscan muy bien la espalda a los defensores aprovechando los espacios. Defensivamente es un equipo agresivo, con muchos kilos atrás y capacidad de blocaje y colaboración”, añadió.
La cantera al rescate
En lo que respecta a sus pupilos, el entrenador del Recoletas lamentó que sigan con las mismas ausencias por lo que tirará de nuevo de canteranos para completar la plantilla, “viajaremos con Pablo Herrero y Sergio Casares, sin centrales y con Jorge Serrano cogido con pinzas aunque está cada vez mejor. Adaptando lo que hicimos en Nava esperamos que sea suficiente para competir en Cuenca, físicamente estamos bien y nos ha dado tiempo en este periodo a canalizar el juego de manera más eficaz adaptando a un zurdo en el centro”, señaló Pisonero.
