Unos Juegos Olímpicos ya son de por sí un acontecimiento a nivel global. Dentro de este evento la gimnasia artística femenina es una fecha que se subraya, recalca, etc. dentro de unas fechas ya de por sí en rojo.
Hoy era el día. Todo el mundo con sus millones de personas estamos expectantes. No siempre se ve a una estrella. No una de esas de apodo fácil. Sino una estrella de verdad. Una persona que nos asombra e ilumina al resto. Hoy todas queremos ser ella. La perfección del universo rara vez se ve concentrada en la gracia de una deportista que no deja de asombrar y maravillar a todo el planeta. Hoy era el día de Simone Biles.
Final Femenina Gimnasia Artística Tokyo 2020
Las rusas ya se habían puesto delante en la primera rotación, el salto. Sus 43,799 puntos las colocaron 1,067 por encima de los 42,732 de Biles y compañía. Fue entonces cuando nuestra estrella se despidió de la final.
La ventaja de Rusia se duplicó con creces tras el paso por las asimétricas, con las tres rusas en torno al 14,900 aunque ninguna cerca del 15,400 de Sunisa Lee, que defendió de forma meticulosa uno de los mejores ejercicios que se pueden ver ahora en un gimnasio.
Por detrás, Italia y Gran Bretaña comenzabas su asedio al podio, ayudadas por los errores de China en suelo o de Gran Bretaña en la barra.
La barra fue la encargada de aumentar la dosis de emoción, las rusas sufrieron dos caídas que acercaron a las estadounidenses a 800 milésimas. 800 milésimas es nada en esta disciplina deportiva. El suelo iba a terminar la jornada e iba a ser determinante a la hora de decidir el podio.
Vlasdislava Urazova, Viktoriia Listunova y Angelina Melnikova tenían que asegurar; Grace McCallum, Jordan Chiles y Sunisa Lee, arriesgar. Pero Chiles se salió del tapiz por un lado, y por otro se quedó sentada, sólo faltaba por salir Angelina para firmar el orden de las medallistas.
Rusia, EEUU, Gran Bretaña, Italia, Japón, Francia, China y Bélgica fue el orden de las finalistas.
La final femenina aún está por disputar, Biles, de momento, no se sabe si participará.
Después de obtener con su salto, un Amanar con giro y medio, una nota de 13,766, la peor entre las integrantes su selección, la vigente campeona olímpica abandonó el escenario con un médico del equipo, lo que podría indicar algún tipo de dolencia. Pero regresó unos minutos después sin lesión aparente, con gesto sereno, enfundada en un chándal.
En las asimétricas, en las que iba a ser titular (lo son tres gimnastas por país en cada aparato), Biles fue reemplazada por Jordan Chiles y poco después llegó la noticia de que no disputaría el resto de la final. Insólito a la par que desgarrador. La final concluyó sin una explicación clara sobre la retirada de Biles.
