Nueva entrega de los resúmenes de la temporada 20-21, continuamos con el equipo que completa el pódium de la Liga ASOBAL, el BM Logroño La Rioja que se creció en los últimos compases para alcanzar puestos europeos.
Objetivo: Volver a Europa
Renunció a su puesto en competiciones europeas debido a la crisis del Covid-19. Los logroñeses debían moverse bien en el mercado para alcanzar puestos europeos de nuevo.
La no participación europea causó una oleada de bajas entre las que destacaban las del portero internacional con los Hispanos Sergey Hernández, los laterales izquierdos Patrick Ligetvari y Junior Scott o el central Lazar Kukic. A todos ellos se unían el lateral derecho Imanol Garciandia, los pivotes Timoslav Kusan y Claudio Ramos y el extremo izquierdo Gianluca Dapiran.
El equipo necesitaba cubrir las numerosas bajas con jugadores de categoría que conociesen la liga y ayudasen a lograr el objetivo marcado. Comenzaron a llegar los refuerzos como el pivote Domen Sikosev que estaría cedido en Alemania hasta enero y volvería a salir en marzo a Francia.
Entre los que sí se quedarían toda la temporada en las filas riojanas llegaban el portero Rangel Luan, los laterales izquierdos Antonio Serradilla y Délcio Pina, el central Agustín Casado, el lateral derecho Oswaldo Maestro y el el extremo izquierdo Mario Dorado. Una serie de refuerzos conocedores de la liga española y de plenas garantías para establecerse en los puestos altos de la clasificación.
Arranca la competición
La temporada comenzó regular para los hombres de Miguel Ángel Velasco, en septiembre ya debían de verse contra el todopoderoso Barça que les hacía caer con claridad, volviendo a caer en Valladolid y ante el Bidasoa ya en octubre. El proyecto parecía que no carburaba del todo con el equipo en mitad de tabla. Aunque un mes de noviembre perfecto ya colocaba al equipo en el top3.
El último mes del 2020 volvía a generar dudas en el Logroño, dos derrotas en cuatro partidos y el equipo riojano cedía la tercera plaza a la revelación Bada Huesca.
El parón de enero causado por el Mundial debía permitir al conjunto franjivino analizar la situación para lograr asaltar las plazas que daban acceso a la competición europea.
Demostrar que se puede
Los logroñeses habían trazado un plan para que no se les escapase la plaza europea. Pese a caer contra el Barça en el mes de febrero, los riojanos seguían empatados a puntos con el sorprendente Bada Huesca.
El mes de marzo llegaba cargado de partidos entre los que se encontraba la disputa de la Copa del Rey donde los de Velasco caerían en cuartos de nuevo ante el Barça al cual llegaron a poner contra las cuerdas. De vuelta a la Liga los logroñeses caerían por la mínima ante el Bidasoa, resultado que les alejaba del subcampeonato.
Tras caer en Irún, el Logroño cosechó una buena racha de resultados, cinco victorias consecutivas entre las que destacaba la lograda en la siempre difícil pista de Puente Genil.
Último esfuerzo
Llegaba el último mes de competición y el Logroño se encontraba quinto a un único punto del tercer puesto que estaba en manos del Granollers. Restaban siete partidos para decidir si se volvería a clasificar a competición europea o no lograría el objetivo marcado. En este último mes se verían las caras con rivales de la talla del Ademar, Granollers o Huesca.
El mes no arrancaba bien, los de León conquistaban el Palacio de los Deportes de Logroño y volvían a alejar a los franjivinos del objetivo. No fue fácil tampoco el siguiente partido en el que no pasaban del empate en Cangas.
El equipo se concienció y se repuso logrando dos victorias consecutivas ante el Cuenca y el Puerto Sagunto pero de nuevo llegaba la tormenta sobre Logroño con una abultada derrota en Granollers que aventajaba a los riojanos en dos puntos cuando restaban cuatro por jugarse. Solo un milagro acabaría con el Logroño en Europa, pero el milagro ocurrió.
Victoria sufrida en Pamplona y todo por decidirse en la última jornada dónde el Logroño se la jugaba ante un Huesca con opciones europeas y el Granollers iría a Irún donde el Bidasoa no era matemáticamente subcampeón. Los logroñeses ganaron al Huesca y esperaban noticias de Irún donde el Bidasoa derrotó al Granollers.
Sin embargo, al Granollers le quedaban dos balas en la recamara, los partidos aplazados ante Guadalajara y Ademar, si ganaban los dos serían ellos los que lograrían el billete europeo. Un descendido Guadalajara ganó en Granollers y entonces si el Logroño pudo celebrar su clasificación europea.
Foto vía: @CdadLogrono
