Camino hacia la cumbre
Si el año 2020 ha sido en general malo para el deporte, no se puede decir lo mismo para la joven estrella del salto con pértiga Armand Duplantis. ¿Quién iba a pensar en sus comienzos, que con tan solo 21 años, “Mondo” Duplantis se hubiera consolidado ya como una de las grandes estrellas del atletismo mundial?. Nadie hubiera pensado que esto fuera posible en sus inicios. Tenía que “derrumbar” las hazañas de todo un mito del salto con pértiga, el ucraniano Sergey Bubka, con un palmarés a la altura de pocos ases del deporte mundial. Campeón olímpico en 1988, y múltiples veces campeón mundial (1983, 1987, 1991, 1993, 1995 y 1997). Además cuenta en su haber con 35 plusmarcas mundiales (17 al aire libre y 18 en pista cubierta). Pero sin duda el mayor valor del pertiguista ucraniano fue elevar el listón durante su carrera, de los 5,83 a los 6,15, acabando esta marca como récord mundial, establecido en Donesk en 1993.
Crecimiento continuo
Pero la ambición del sueco Duplantis ya ha roto en dos ocasiones, este 2020, el récord mundial indoor de salto con pértiga (6,17 y 6,18) y superado la mítica marca de Sergey Bubka con 6,15 al aire libre. Además al atleta sueco se le ha visto compitiendo esta temporada en 16 pruebas del más alto nivel, imponiéndose en todas ellas con holgura. Pero Duplantis tenía que imponerse a otra estrella de la pértiga que ya en 2014, había saltado más que Bubka, Renaud Lavinellie, que ya logró saltar en interior 6,16. Aun así, hace ya un tiempo que Lavillenie, de 34 años, está en clara regresión, no siendo rival actualmente para la juventud de Duplantis. El joven atleta tiene en su poder casi todos los récords de su especialidad. Comenzó a destacar con tan solo siete años, y con una progresión casi sin precedentes, ha llegado a convertirse, pese a su juventud, en el único rey del salto con pértiga.
Un año mágico
En este 2020 nadie ha sido capaz de superar a este atleta, desde hace tiempo revelación del salto con pértiga. En el mes de febrero y con el peligro que suponía el covid 19, comenzaba una incierta temporada indoor. Ese día “Mondo” Duplantis hacía historia al superar en Torun (Polonia) la plusmarca de Renaud Lavillenie. Volaba sobre unos impresionantes 6,17, elevando el anterior récord en un solo centímetro. Tenia apenas 20 años y ya conseguía todo un hito, lograr batir uno de los récords mas difíciles del atletismo. Posteriormente en la ciudad escocesa de Glasgow, Duplantis lejos de conformarse con la marca obtenida en Torun, volvió a establecer un nuevo tope mundial, al superar una altura de nada más y nada menos que de 6,18. Lejos quedaban la época en la que Sergey Bubka controlaba los tiempos y nos tenía acostumbrados a superar el récord mundial en momentos puntuales centímetro a centímetro. Con Duplantis había transcurrido tan solo una semana de un récord a otro, y suponía una mejora respecto a la legendaria plusmarca de Bubka de cuatro centímetros.
El dia D y la hora H
Pero lo mejor para Duplantis estaba aun por llegar para cerrar un año mágico, y tuvimos que esperar al mes de septiembre para contemplar en Roma una hazaña memorable. Era el 17 de septiembre, esa noche mágica quedará grabada en los anales del atletismo mundial. El sueco se convirtió, no solo en plusmarquista mundial absoluto de salto con pértiga con sus 6,18 en pista cubierta, sino también en récordman absoluto al aire libre. Ponía fin al récord de Sergey Bubka, un récord de 26 años de antigüedad. En un estadio olímpico sin público debido a la pandemia, Duplantis se elevaba por encima de los 6,15, todo un hito. De esta forma, y con apenas 20 años, Duplantis se coronaba en Roma como el monarca absoluto de una especialidad tan difícil como el salto con pértiga. Lo que venga a partir de aquí ya será historia con toda seguridad.
Nombramiento merecido
Toda su trayectoria, y especialmente sus logros este 2020, hizo posible que el joven Armand Duplantis, “Mondo” para los amigos, se convirtiera a los ojos de World Athletics en el mejor atleta de este año. Superaba para ello a grandes ases del atletismo mundial, como al ugandés Joshua Cheptegei, al lanzador de peso Ryan Crouser, al vallista Karsten Warholm, o al jabalinista Johannes Vetter. Sin duda ha sido el año de Armand Duplantis.
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