La Rostelecom Cup, primera prueba del Grand Prix que se disputa con público esta temporada, ha devuelto la victoria a los pupilos de Alexei Mishin. Mikhail Kolyada, su más reciente incorporación, se ha hecho con el oro en la categoría masculina, como también lo ha hecho la ya veterana Elizaveta Tuktamysheva.
Ha sido en categoría femenina donde se ha dado la sorpresa en el podio, y es que, mientras todos apostaban por las dos patinadoras de Evgeni Plushenko (Alena Kostornaia y Alexandra Trusova) ha sido Tuktamysheva quien ha dado un golpe sobre la mesa y se ha impuesto a las jóvenes rusas. No pudo colocarse en primera posición en la primera jornada tras el programa corto, aun aterrizando su mejor triple Axel hasta el momento. Un step out en el triple Flip que tenía previsto combinar obligó a la rusa a añadir un doble Toe a su triple Lutz final. Fue este fallo el que la llevó a la segunda posición, cuatro puntos por detrás de su compatriota Alena Kostornaia, que lideraba la clasificación. En tercera posición se encontraba Alexandra Trusova. La gran favorita para hacerse con el oro no tuvo un buen inicio de competición, tras una fuerte caída en su primer elemento, el triple Axel.
La ambición de Trusova y la constancia de Tuktamysheva
La gran cantidad de puntos que Trusova podía llegar a acumular en la parte técnica de su programa largo hacía pensar en una posible remontada, como ya se había visto hacía tan sólo dos semanas en la cuarta prueba de la Copa de Rusia, pero la ambición de añadir 4 cuádruples a su programa no resultó como ella esperaba. 4 caídas, 3 de ellas en cuádruples y una en el último de sus saltos, el Triple Lutz, le costaron nada más y nada menos que 6 puntos de penalización y la cuarta posición. Fue otra de las patinadoras de Mishin, Anastasiia Guliakova, quien también dio la sorpresa y se llevó la medalla de bronce.
Su compañera de equipo, Kostornaia, tampoco tuvo su mejor programa. Aunque consiguió mostrar una mejor actuación que en la última edición de la Copa de Rusia, todavía estuvo lejos de su mejor versión, aquella que la llevó a lo más alto del podio europeo la pasada temporada. Quien sí recuperó la forma fue Tuktamysheva, que ya sabía lo que era ganarlo casi todo, siendo campeona de Europa, campeona del Mundo, campeona del Grand Prix, campeona de Rusia… Tras unas temporadas muy duras, a la sombra de las jóvenes promesas que salían cada año de la mano de Eteri Tutberidze, volvió a saborear lo que es una medalla de oro. Con 23 años demostró que, aunque a veces lo parezca, las jóvenes no son imbatibles, y que todavía hoy en día, sigue en forma para competir a su máximo nivel. Y está mejor que nunca.
Programa largo de Elizaveta Tuktamysheva en la Rostelecom Cup 2020
Kolyada regresa a la Rostelecom Cup por todo lo alto
Algo parecido le sucedía al nuevo pupilo de Mishin. Parece que, tras un año parado debido a una operación y unas temporadas duras, Mikhail Kolyada se ha vuelto a posicionar como el patinador ruso número 1. Partía desde la tercera posición tras el programa corto, por detrás del georgiano Morisi Kvitelashvili, el único alumno de Eteri Tutberidze en esta Rostelecom Cup. El georgiano se posicionaba líder tras un excelente programa con dos cuádruples (Salchow y Toe) realizados a la perfección.
Pero no pudo mantener esa misma posición tras el programa largo, donde tuvo una caída en el último de sus 3 cuádruples, el Toe, y finalmente se hizo con la medalla de plata. Por su parte, Kolyada mostró su mejor versión con el programa “Nureyev”, coreografiado por el mítico Illya Averbukh. En un programa donde tanto su faceta artística como su perfecta técnica resaltaron, consiguió hacerse con el oro y volver así, a lo más alto del podio.
Programa largo de Mikhail Kolyada en la Rostelecom Cup 2020
Sin duda alguna, Mishin ha sido el gran vencedor de esta prueba de Grand Prix tan atípica, donde las gradas se volvieron a ver repletas de gente y las clasificaciones no dejaron indiferente a nadie. La próxima parada de todos estos patinadores tendrá lugar el Campeonato Nacional de Rusia, donde parece que todo está más abierto que nunca.
