La italiana Elisa Balsamo se lleva la etapa final
La Ceratizit Challenge de La Vuelta ha sido la encargada de poner el broche a la temporada, pero tristemente se ha convertido casi en una puesta en escena de todo lo que queda para conseguir la igualdad en los temas más básicos del ciclismo; premios, recorrido, cobertura, seguridad en la carrera, información a la prensa.
Pero como viene pasando toda la temporada, las corredoras del WWT dan espectáculo aunque sea corriendo en el Super Mario Kart.
Aunque la etapa de Madrid no presentaba ninguna dificultad montañosa, los sprints intermedios dejaban un jugoso botín de bonificaciones que podía darle la victoria a cualquiera de las velocistas del grupo.
Es cierto que esta modalidad de carrera en realidad convierte el Paseo del Prado y de al de Recoletos en una especie de velódromo al aire libre en el que se corre una prueba de puntuación, pero hay que reconocer que la emoción estaba garantizada.
La carrera
Lorena Wiebes (Sunweb) y la lider Lisa Brennauer (Ceratizit-WNT), ganadoras de la primera y segunda etapa respectivamente se disputaron los primeros pasos por meta. La neerlandesa consiguió colocarse segunda en la clasificación general provisional, pero por el camino se dejó mucha energía.
Una caída en la parte baja del circuito,antes de llegar a la estación de Atocha acabó con la italiana Alessia Vigilia (Crono Casa Dorada) con la cadera tocada y camino del hospital, también impactaron con el asfalto Jessica Allen (Mitchelton), Susana Perez (Rio Miera) y la pistard Letizia Paternoster (Trek) que quedó descartada para la victoria final.
Fueron muchos los ataques en las primeras vueltas, con mucho protagonismo del Massi Tactic y del Mitchelton. Saltaron todas las alarmas cuando se conformó por delante un grupo con Annemiek van Vleuten (Mitchelton), Van Dijk (Trek), Gloria Rodriguez (Movistar) Hanna Ludwig (Canyon), Laura Asencio (Ceratizit-WNT), Julia Soek (Sunweb) y Sara Martín (Sopela). Pero la desconfianza entre ellas y los intentos por detrás de unirse a la escapada acabaron con ella.
Era entonces el momento del recital de Elisa Longo-Borghini (Trek) que se lanzó a por la victoria a 50 Km de meta, durante mucho tiempo fue líder virtual de la prueba aprovechando las bonificaciones que acumuló al pasar primera por meta en varias ocasiones.
En el grupo Wiebes ya no era capaz de disputar los sprints a Brennauer y esta fue amortiguando el golpe de Longo Borghini consiguiendo bonificaciones.
A tres vueltas de la llegada se neutralizó a la corredora de Ornavasso, que estuvo escapada más de 35 kilómetros. Desde ese punto se dio el zafarrancho de combate para una llegada al sprint. El equipo Valcar montó un tren muy efectivo que fue capaz de llevar a Elisa Balsamo a la victoria en la tercera etapa, por detrás entraron una Lorena Wiebes, que se había dejado parte de sus opciones en las primeras vueltas, y Marta Batianelli (Alé Ljubljana) tercera.
El podio final de la prueba fue para Brennauer, Longo Borghini y Wiebes, esperemos que el año que viene podamos ver el espectáculo de la carrera femenina de principio a fin y no solo un tercio del mismo.
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Fuente de las fotografías: Ceratizit Challenge by La Vuelta, @baixaulistudio
