El escenario lleva siendo el mismo desde los años sesenta, la Tirreno-Adriatico pone su broche en San Benedetto del Tronto, una ciudad bañada por el Adriatico que podría servir de ejemplo en escuelas y universidades sobre lo que no se debería hacer con el litoral. La carrera era una cronología de 10 Km, una guerra en la que se iban a librar dos grandes batallas.
La etapa
La primera, la lucha por la victoria parcial con muchos de los grandes galgos del pelotón internacional, Rohan Denis y Filippo Ganna (Ineos), Victor Campenarts (NTT) o Tobias Lundvigsson (FDJ).
Este año los especialistas contra el reloj tienen menos oportunidades de brillar que en otras ocasiones ya que esta especialidad está pasando una época en la que no es del agrado de los organizadores. El propio mundial de la especialidad ha propuesto para los mundiales que se disputan este mismo mes un recorrido de 32 Km, longitud que supone menos de una hora de esfuerzo y parece poco para ser la que decida quién llevará la próxima temporada el maillot arco iris.
El campeón nacional italiano Filippo Ganna ha arrasado en San Benedetto y ha dejado clara su candidatura para conseguir el oro en Imola. Ha mejorado el tiempo de una leyenda como Fabian Cancellara sobre este mismo recorrido y dejado sin opciones al recordman mundial de la hora Campenaerts y al actual campeón del mundo Denis.
Esta victoria parcial le sirve al Ineos para lamerse las heridas tras el hundimiento de Bernal en la Grand Colombier de ayer. Ganna además ha dejado claro que espera mantener el estado de forma hasta el arranque del Giro en Palermo y conseguir la primera Maglia Rosa en el prólogo de 15 Km.
La general
La otra gran batalla de la jornada era por la Maglia Azzurra de la general y por llevarse el tridente de Poseidón a casa. Llegaba de líder el ganador de La Vuelta de 2018 Simon Yates Mitchelton-Scott) por delante del polaco Rafal Majka (Bora) y de Geraint Thomas (Ineos). El corredor galés era claramente el más rápido de los tres en la lucha contra el crono, pero tenía que superar 39¨ segundos de desventaja en la general. Gracias a un trabajo sobresaliente consiguió superar a Majka en la tabla final pero no a Yates que se apunta para su palmarés la cerrera de los dos mares.
El año pasado Simon Yates, el gemelo de Adam, perdió la carrera ante Primoz Roglic por un solo segundo. Adam ha restaurado el honor familiar y además se ha convertido en el primer británico en ganar la carrera en sus 55 ediciones.
Las demás clasificaciones se han repartido de la siguiente manera; Pascal Ackermann (Bora) se ha llevado la de los puntos gracias a sus dos dos victorias de etapa; La enorme promesa del ciclismo ruso Alexandr Vlasov (Astana) se ha impuesto en la clasificación de los jóvenes; Hector Carretero (Movistar) se lleva la montaña y le da un pequeño respiro a un equipo necesitado de alegrías y finalmente en Sunweb se hace con la clasificación por equipos.
Froome
El cuatro veces ganador del Tour estuvo también presente en la carrera y pesar de que su actuación ha sido más que discreta, finalizando en la nonagésima posición, su figura sigue siendo un gran reclamo periodístico. A pocas semanas de comenzar el Tour el Ineos cambió su estrategia de tres líderes, Bernal, Thomas y el propio Froome, por la de un líder único, Bernal. Con dos semanas de Grand Bucle disputada el colombiano se une en la clasificación y esta fuera incluso del Top 10.
Las miradas se giran estos días hacia Italia y muchos se pregunta que hubiera pasado si Froome o Thomas estuvieran ahora mismo a los pies de los Alpes. Es posible que el resultado fuera el mismo pero en una entrevista concedida a Eurosport dejaba entrever que podría haber ayudado en la situación en la que se encuentra el equipo ahora mismo.
“Creo que solo puedo hablar por mí mismo, pero quiero decir que hubiera estado más que feliz de haber ido al Tour y haber ayudado. Pero creo que tiene mucho más sentido para mí no estar bajo tanta presión en este momento, obviamente con el momento en el que estoy tratando de volver a mi antiguo nivel”.
Su gran objetivo de la temporada será La Vuelta que será la ultima vez que lo veamos competir con el equipo que lo ha encumbrado antes de marcharse al equipo Israel.
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