Hace tres semanas debieron haberse enfrentado en la final del Western & South Open, pero una incipiente lesión en el muslo de Naomi Osaka, la obligó a retirarse antes de iniciar el partido, para así cederle el título a Victoria Azarenka.
Una final repetida
Fue un final agridulce para ambas tenistas, que lucieron muy bien durante esa semana. Todos hubiéramos querido haber visto ese partido, pero al final, la decisión de la japonesa probó ser la correcta. Durante las pasadas dos semanas ha podido lidiar con las molestias para alcanzar la final del US Open. En cuanto a la bielorrusa, el triunfo, aunque no fue como ella hubiera querido, le ha devuelto la confianza en su juego, convirtiéndola una vez más, en una contendiente real para ganar un torneo del Grand Slam.
El saque
Ambas tenistas han lucido muy sólidas en las pasadas dos semanas. Al analizar el servicio de la campeona de la edición del 2018, vemos que ha promediado seis “aces” por juego, y dos dobles faltas. Su primer servicio ha sido colocado en un 57% de las veces, y ha ganado un impresionante 81% de los puntos iniciados con ese primer servicio. En el caso de la finalista de las ediciones del 2012 y 2013, ha promediado tres “aces” por partido, y la misma cantidad de dobles faltas.
En el renglón donde Azarenka parece llevarle la ventaja a Osaka, es en los primeros servicios, que ha promediado en un 72%, pero se quedó por debajo de la nipona, en los puntos ganados con sus primeros servicios, al promediar un 69%. Sin duda, sigue siendo un gran número, pero las estadísticas tienden a confirmar lo que se hace evidente al ojo humano. El servicio de Osaka es más arriesgado y contundente. Por lo tanto, lo fallará más, pero una vez lo coloque, ganará más puntos.
El resto
Al momento de devolver el servicio, Azarenka lleva la ventaja. Ha logrado romper los servicios de sus oponentes en un 55% de las oportunidades tenidas, mientras que Osaka ha desperdiciado muchas de estas oportunidades, al promediar un 40%. En cuanto a los puntos ganados al devolver el servicio, Azarenka igualmente lleva la delantera al ganar un 54% de esos puntos. Osaka ha promediado un 44%. Estos números sugieren que Osaka tiene la obligación de servir de forma impecable, porque de lo contrario, puede verse en aprietos.
Ganadores y no forzados
Al evaluar los tiros ganadores y los errores no forzados, ambas tenistas tienen números positivos, pero una vez más, Azarenka parece estar más en control en este renglón, al promediar 21 tiros ganadores y 15 errores no forzados por partido. Osaka por su parte, promedia 25 tiros ganadores, y 21 errores. Al igual que pasa con el servicio, esta aparente diferencia, puede explicarse con el mayor riesgo que asume Osaka, al ejecutar sus tiros.
En general, ambas tenistas lucen bastante parejas, por lo que el partido pudiera irse para cualquier lado. Al revisar los encuentros que han tenido en el pasado, se puede concluir también, que cualquier cosa puede pasar.
Precedentes
El primer encuentro se dio en la tercera ronda del Abierto de Australia del 2016. En ese momento Azarenka se encontraba entre las primeras 15 tenistas del mundo y apabulló a una jovencísima Osaka, que entró al cuadro principal por la vía clasificatoria. La victoria de la europea fue con un marcador de 6-1, 6-1. Dos años después, volverían a verse las caras en la primera ronda del Abierto de Italia. Esta vez, Azarenka se encontraba en pleno regreso a las canchas luego de parir y estar en una contenciosa lucha por la custodia de su hijo. No estaba en su mejor momento, pero ciertamente, Osaka ya no era la jovencita de antes. Ya en ese momento, la japonesa ocupaba la vigésimo primera posición del ranking, y aunque la arcilla no ha sido su mejor superficie, superó de forma clara a Azarenka, 6-0, 6-3. El más reciente encuentro se dio el año pasado en la arcilla del Roland Garros, cuando Osaka ocupaba la máxima posición del ranking, pero se encontraba inmersa en una crisis de confianza que le duró varios meses más. A pesar de estar susceptible mentalmente, superó a una aguerrida Azarenka, que ya daba muestras de estar reencontrando su juego. Fue un partido épico, que terminó a favor de Osaka 4-6, 7-5, 6-3.
Pienso que el partido del sábado, se parecerá más a ese último encuentro. Y si Osaka, logra colocar sobre un 60% de sus primeros servicios, creo que se convertirá en doble campeona del US Open. Me voy con Osaka en tres sets.
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Fuente de la foto principal: Twitter/@USOpen
